Una drag¨®n de Komodo da a luz a cinco cr¨ªas sin ser fecundada
Se trata del segundo caso documentado de reproducci¨®n asexual en esta especie
Una hembra de drag¨®n de Komodo, los lagartos m¨¢s grandes del mundo y en grave peligro de extinci¨®n, ha tenido cinco cr¨ªas sin haber sido previamente fecundada por un macho. Se trata del segundo caso documentado de reproducci¨®n asexual en esta especie, lo que aporta una gran dosis de esperanza a la reproducci¨®n en cautividad de especies amenazadas. Ahora, los cient¨ªficos se preguntan si el drag¨®n siempre tuvo esta cualidad o estamos ante un nuevo desarrollo evolutivo. La feliz madre y padre a la vez se llama Flora, tiene ocho a?os y vive en el zoo de Chester, al norte de Inglaterra.
"Flora ignora la emoci¨®n que ha causado su parto, mientras nosotros estamos encantados en anunciar que ya es madre y padre a la vez", ha afirmado tras el nacimiento de los dragones el encargado de los vertebrados e invertebrados del zoo de Chester, Kevin Buley. No es para menos, ya que los dragoncillos, de piel negra y amarilla, vinieron al mundo producto de un nacimiento virgen. Seg¨²n explica el personal del zool¨®gico de Chester, Flora puso en mayo una nidada de 11 huevos sin que se la hubiera cruzado nunca con un macho de su especie.
Los cascarones de cinco cr¨ªas comenzaron a romper la semana pasada, tras ocho meses de incubaci¨®n y antes de ayer naci¨® el quinto. Adem¨¢s quedan dos cr¨ªas por nacer, que a¨²n no han roto sus cascarones. Unas 70 especies de reptiles, incluidas serpientes y lagartijas, pueden reproducirse de forma asexual, en un proceso conocido como partenog¨¦nesis, pero hasta hace bien poco s¨®lo se conoc¨ªa este fen¨®meno en reptiles m¨¢s peque?os. As¨ª, el de Flora es el segundo caso de partenog¨¦nesis tras el que se registr¨® el pasado abril en el zoo de Londres, cuando Sungai puso huevos dos a?os y medio despu¨¦s de su ¨²ltimo contacto con un macho. "Las implicaciones para los programas de conservaci¨®n son enormes porque esto abre una puerta a un nuevo camino por el que los animales podr¨ªan potencialmente colonizar una isla", afirma Buley.
?Un nuevo desarrollo evolutivo?
"Una hembra podr¨ªa nadar a una nueva isla, dejar sus huevos, despu¨¦s aparearse con sus cr¨ªas y ser sexualmente productiva durante una generaci¨®n", explica. Los peque?os dragones que nacieron en los ¨²ltimos d¨ªas miden entre 40 y 45 cent¨ªmetros de largo y pesan de 100 a 125 gramos. Las cr¨ªas se encuentran en buen estado y crecer¨¢n hasta alcanzar unos amenazadores tres metros de largo y 140 kilos de peso. De momento, se alimentan de grillos y langostas. "Cuando el primero de los dragones sac¨® la cabeza, no sab¨ªamos si prepararle a Flora una taza de t¨¦ o darle unos puros", bromea Buley.
Durante las pr¨®ximas semanas las cinco cr¨ªas ser¨¢n trasladadas a un nuevo recinto construido para que los visitantes puedan asistir al ¨²ltimo milagro evolutivo. Seg¨²n recog¨ªa un grupo de cient¨ªficos brit¨¢nicos en el n¨²mero de diciembre de la revista Nature, el hecho de que se hayan producido dos casos documentados de partenog¨¦nesis en dos zoos diferentes sugiere que esta facultad de fecundarse a s¨ª mismos podr¨ªa no ser algo inusual cuando los dragones de Komodo se encuentran aislados.
Y puede tener consecuencias de gran alcance para las especies en peligro de extinci¨®n porque la cr¨ªa en cautividad podr¨ªa asegurar la supervivencia de los tan s¨®lo 4.000 dragones de Komodo que viven en su h¨¢bitat natural. Los cient¨ªficos por el momento desconocen si la hembra de Komodo ha tenido siempre la capacidad de reproducirse sin necesidad de un macho o si se trata de un nuevo desarrollo evolutivo.
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