"Quiero saber si estoy ayudando a los ni?os o subvencionando a unos vividores"

Varios ciudadanos han contestado a la publicidad de la ONG Intervida, Mejora su vida, y la tuya ?Apadrina!, y han pagado de 18 a 21 euros mensuales a esta asociaci¨®n para ayudar a ni?os del Tercer Mundo. Algunos de estos socios han explicado por tel¨¦fono a ELPAIS.com sus experiencias. Los hay esc¨¦pticos con la noticia de que la fiscal¨ªa investiga un supuesto desv¨ªo de fondos de la ONG, y quienes nunca hab¨ªan sospechado nada. Otros muestran indignaci¨®n y se van a dar de baja. Para todos ellos, lo m¨¢s importante no es el dinero que pueden haber perdido, sino la sensaci¨®n de enga?o y de que quiz¨¢ alguien se haya aprovechado de las necesidades de los m¨¢s pobres.

Suso Navarrete es un padrino de Valencia, que lleva siete u ocho a?os colaborando con Intervida. "La noticia ha sido un golpe para m¨ª", afirma Suso. "Intervida me dej¨® siempre claro que mi dinero no iba directamente al ni?o en cuesti¨®n, sino a proyectos en su pueblo que beneficiaban a toda la comunidad, y que el apadrinamiento del ni?o era, por decirlo as¨ª, para ponerle una cara a mi donaci¨®n", explica. A Suso siempre le pareci¨® raro que no pudiera enviar regalos ni ponerse en contacto con el ni?o, aunque acat¨® las reglas de la ONG. Ahora desconf¨ªa y prefiere esperar a tener pruebas antes de hacer acusaciones. "De demostrarse que el dinero de los padrinos ha contribuido al enriquecimiento de los directivos, la justicia deber¨ªa caer sobre ellos con el m¨¢ximo rigor", se?ala. "Deseo que caiga sobre ellos tambi¨¦n alguna especie de maldici¨®n b¨ªblica, porque enriquecerse con las buenas intenciones ajenas provoca verdadera repugnancia moral". Sin embargo, a Suso le parece mejor esperar el resultado de las investigaciones hasta hacerse una idea definitiva. "En el caso de que se demuestre que el entramado de Intervida estaba destinado a los fines normales de la ONG, se habr¨¢ hecho un da?o irreparable", resume.

Manuel Fern¨¢ndez, de 75 a?os, colabora con Intervida desde hace nueve. Conoce de primera mano la situaci¨®n y las necesidades del Tercer Mundo porque en los ochenta trabaj¨® a trav¨¦s de otras asociaciones con ni?os de M¨¦xico y Nicaragua. "Yo lo que intento es ayudar, aliviar angustias a los m¨¢s pobres", afirma. Su experiencia con Intervida ha sido gratificante hasta el momento de conocer la noticia. "Me decid¨ª por ellos porque me daban confianza y porque prefiero colaborar con asociaciones que no sean religiosas". Manuel asegura haber pagado todas sus cuotas, pero no est¨¢ preocupado por el dinero: "Lo peor es que negocien con la vida de esta gente".

Pilar Pascual: "Desde que ayer escuch¨¦ la noticia no he dejado de darle vueltas al tema, me parece incre¨ªble que se pueda jugar as¨ª con los sentimientos de las personas", explica. "Yo tengo apadrinada una ni?a de la India y hace a?os que soy socia de Intervida. Al principio, no sab¨ªa si apadrinar porque siempre te asalta la duda ?Ir¨¢ el dinero a los proyectos que nos venden?". Pilar asegura que su "buena voluntad" y el principio b¨¢sico de que no se puede "robar a los pobres" le llev¨® a confiar ciegamente en que estaba haciendo una buena labor social y aportando su peque?o granito de arena. "Lo que me fastidia de todo esto es la manipulaci¨®n que hacen, porque yo vivo desahogadamente, no me falta de nada y me doy cuenta de que entre todos podr¨ªamos hacer un mundo mejor", se queja Pilar, para quien lo m¨¢s importante no es la cuota de 21 euros mensuales, sino que se pudieran rob¨¢rselo a los m¨¢s necesitados. "?C¨®mo puede alguien tener tan pocos escr¨²pulos y ser tan ego¨ªsta". Pilar se muestra muy afectada por la noticia y a¨²n no sabe c¨®mo va a reaccionar. "No se si darme de baja, no hacerlo o como actuar. Desde luego cuando el r¨ªo suena.... creo que lo mas oportuno ser¨ªa esperar a ver c¨®mo se van desarrollando las cosas a lo largo de este mes y luego actuar, pero me siento defraudada". Y lo peor, en su opini¨®n, es que la labor de otras organizaciones queda bajo sospecha por casos como ¨¦ste. "?C¨®mo se recupera la confianza en las ONG que trabajan dignamente? porque estas cosas salpican a todos y pagan justos por pecadores".

Paula L¨®pez colabora con Intervida desde hace cuatro a?os. "No s¨¦ que tiene la condici¨®n humana, pero el dinero siempre corrompe". Apadrina una ni?a de Per¨², Luz Reina, y se muestra preocupada por ella: "?Qu¨¦ estar¨¢ haciendo ella ahora?". De manera peri¨®dica le enviaban dibujos y trabajos de la ni?a y ella estaba satisfecha. "Nunca sospech¨¦ nada y si escog¨ª Intervida fue porque, equivocadamente, cre¨ªa que estaba bien controlada, explica. Para Paula lo m¨¢s importante es que situaciones de este tipo de se puedan volver a producir. "Me gustar¨ªa que hubiera m¨¢s mecanismos para vigilar a estas asociaciones".

Alejandro Casas lleva cinco a?os colaborando con Intervida. Sus ganas de ayudar y su sentimiento solidario le llevaron a apuntarse a otras dos conocidas ONG. "Pensaba que Intervida era una sociedad sin ¨¢nimo de lucro y con sistemas de control adecuados". Alejandro est¨¢ dispuesto a darse de baja si se demuestra que hay fraude, aunque cree que Intervida siempre ha ense?ado sus cuentas auditadas limpias.

?rsula Gaus es madrina de dos ni?os. "Antes de darme de baja quiero estar segura de lo que est¨¢ pasando con los ni?os o si estamos subvencionando a una banda de vividores". Su sensaci¨®n al conocer la noticia es similar a la de otros socios. ?Por qu¨¦ eligi¨® Intervida? ?rsula asegura que le mandaban informes adem¨¢s de los trabajos con los avances de los ni?os apadrinados y esto le daba confianza.