El d¨ªa en que Jennifer vio su propio coraz¨®n
Una exhibici¨®n en Londres muestra el ¨®rgano de una paciente transplantada junto a obras de Da Vinci y Warhol
Una joven brit¨¢nica de 23 a?os, Jennifer Sutton, logr¨® ayer en Londres algo al alcance de muy pocos: ver cara a cara su propio coraz¨®n. Lo ha conseguido gracias a la exposici¨®n The Heart (El Coraz¨®n), que ofrece la Fundaci¨®n Wellcome (www.wellcomecollection.org).
La muestra, que cierra sus puertas el pr¨®ximo d¨ªa 16, recorre el simbolismo que a lo largo de la historia el ser humano ha brindado al coraz¨®n. Los mitos, los rituales, las religiones se han referido siempre al coraz¨®n, como fuente de la vida, del amor y las pasiones. Dibujos, objetos de la vida cotidiana, obras de arte (entre otras, de Leonardo Da Vinci y Andy Warhol), adem¨¢s de el coraz¨®n de Jennifer, constituyen la exposici¨®n.
La joven sufri¨® una operaci¨®n en el hospital Papworth el pasado mes de junio, y prest¨® su coraz¨®n enfermo para esta exposici¨®n con el fin de concienciar al p¨²blico y a los donantes de la dolencia que sufr¨ªa y que habr¨ªa acabado con su vida, una cardiomiopat¨ªa Restrictiva.
Jennifer est¨¢ impresionada: "Ver mi coraz¨®n por primera vez es una experiencia emocionante y surrealista. Me caus¨® tanto dolor y dificultades cuando estaba dentro de m¨ª... Verlo ah¨ª es muy escabroso y raro. Al fin puedo ver este trozo de m¨²sculo que me ha causado tantos disgustos. Es estupendo que se haya convertido en un objeto de fascinaci¨®n y que consiga que la gente piense acerca de la enfermedad, los transplantes y la donaci¨®n de ¨®rganos".
La cardiomiopat¨ªa restrictiva
La cardiomiopat¨ªa restrictiva provoca que el m¨²sculo cardiaco se endurezca y que el coraz¨®n no se pueda relajar durante la di¨¢stole (el per¨ªodo entre latidos en el que la sangre regresa del cuerpo al coraz¨®n). La enfermedad es potencialmente letal y la ¨²nica cura es el transplante.
Jennifer comenz¨® a notar los efectos a los 18 a?os: se quedaba sin aliento y padec¨ªa fatiga cr¨®nica. Tras la operaci¨®n, el pasado cuatro de junio, la joven ya se ha recuperado y vuelve a dar largos paseos con su perro, Bramley.
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