El director de EL PA?S apuesta por un periodismo de calidad en Internet
Javier Moreno explica en Suecia la "satisfactoria" transformaci¨®n llevada a cabo por este peri¨®dico, tanto en la edici¨®n impresa como en la digital
"Queremos tr¨¢fico masivo [en Internet], pero tambi¨¦n queremos tr¨¢fico de calidad". El director de EL PA?S, Javier Moreno, ha destacado ante el World Editors Forum reunido en Gottenburgo (Suecia) los logros obtenidos con la transformaci¨®n puesta en marcha en el ¨²ltimo a?o tanto en la edici¨®n impresa de EL PA?S como en ELPA?S.com. "La audiencia crece de manera sostenida en ambos. Tenemos 2,3 millones de lectores diarios en la edici¨®n impresa y casi un mill¨®n en la web. S¨®lo unos 200.000 se solapan", ha se?alado. Moreno ha defendido un modelo en el que la edici¨®n impresa y la digital "comparten" buena parte de la agenda informativa, poniendo el foco en un periodismo de calidad, pero trabajan con ritmos y narrativas muy diferentes. "Hemos cambiado la manera en que hacemos periodismo, la manera en que lo distribuimos y, probablemente y m¨¢s importante a¨²n, la manera en que ambas redacciones se perciben a s¨ª mismas y trabajan juntas", ha resumido.
"El periodismo es negocio, pero no consiste s¨®lo en ganar dinero. Cuando resulta necesario, hemos de levantar nuestra voz en defensa de los valores democr¨¢ticos y los derechos de los ciudadanos, frente a los gobiernos y las grandes empresas. Esto es algo que est¨¢ en nuestros corazones y nuestras almas. Desde hace 200 a?os, y as¨ª seguir¨¢ durante d¨¦cadas. En el peri¨®dico impreso y en el digital. Y eso es algo que ning¨²n Google va a hacer, nunca", ha manifestado.
Moreno ha hecho estas declaraciones en una mesa redonda en la que tambi¨¦n han participado representantes de otros grandes diarios internacionales como The New York Times y The Wall Street Journal, dos peri¨®dicos que, a diferencia de EL PA?S, han apostado por un modelo de integraci¨®n plena de las redacciones impresa y digital.
Jim Roberts, director de la edici¨®n digital de The New York Times, ha defendido un modelo de redacci¨®n integrada que permite incorporar cada vez m¨¢s elementos multimedia a la informaci¨®n generada por el diario y ganar eficiencia en el proceso informativo. Una din¨¢mica para la que, sin embargo, ha sido preciso desterrar algunas viejas prevenciones tanto en el equipo digital como en el de la edici¨®n impresa. "Para algunos [miembros de la redacci¨®n digital] el periodismo era sencillamente algo que deb¨ªa ser tolerado pero no asumido como propio", mientras que "los periodistas digitales eran tratados como meros ayudantes". Una din¨¢mica que el diario ha ido modificando mediante una forma de trabajar cada vez m¨¢s coordinada.
Alma Latour, director del wsj.com (edici¨®n digital de The Wall Street Journal), tambi¨¦n ha defendido un modelo de redacci¨®n integrada en el que los periodistas de la edici¨®n impresa realizan cada vez m¨¢s piezas multimedia, incluidos v¨ªdeos. Latour ha exhibido algunas de las primeras piezas audiovisuales elaboradas por la edici¨®n impresa, de una calidad sin duda mejorable, para explicar con una buena dosis de humor que se trata de un proceso de aprendizaje mutuo en el que la din¨¢mica de trabajo debe ir afin¨¢ndose paso a paso.
Lisbeth Knudsen, directora de Berlingske Tidende, tambi¨¦n ha defendido el papel de la prensa como pilar de la sociedad democr¨¢tica y la necesidad de que se transforme para garantizar su pervivencia futura: "No tenemos otra opci¨®n. Hemos de lograr que funcione".
Knudsen, que ha apostado por la integraci¨®n plena de las redacciones impresa y digital, ha se?alado que "el viejo buen periodismo ya no es suficiente; hemos de repensarlo y crear modelos integrados". Knudsen opina que los periodistas ya no son los ¨²nicos protagonistas de la informaci¨®n; que los ciudadanos y lectores "han irrumpido en los antiguos circulos de poder" y que "los viejos h¨¢bitos han muerto".
Todos los participantes en la mesa han coincidido en que Internet supone una transformaci¨®n radical en ia manera de ejercer el periodismo que implica una colaboraci¨®n cada vez mayor entre los equipos de la edici¨®n impresa y la digital, sea cual sea el modelo de negocio futuro de la industria.
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