La justicia francesa amenaza a la iglesia de la Cienciolog¨ªa con la disoluci¨®n

Siete miembros de la Iglesia de la Cienciolog¨ªa comparecen hoy ante el Tribunal Correccional de Par¨ªs bajo la acusaci¨®n de estafa en banda organizada y extorsi¨®n de fondos a antiguos adeptos. Pero, de hecho, la asociaci¨®n espiritual est¨¢ imputada igualmente como persona jur¨ªdica, por lo que su estructura en Francia se ve seriamente amenazada con la disoluci¨®n.

Al lado de los siete encausados, la Asociaci¨®n espiritual de la Iglesia de la Cienciolog¨ªa-Celebrity Centre (ASES-CC), su principal estructura en Francia, radicada en Par¨ªs, est¨¢ por primera vez imputada en un sumario por estafa. La sociedad an¨®nima SEL, librer¨ªa puntera de la organizaci¨®n, est¨¢ igualmente en la n¨®mina de los acusados.

Las siete personas imputadas se enfrentan a una pena de hasta 10 a?os de c¨¢rcel y un mill¨®n de euros de multa, mientras que la iglesia de la Cienciolog¨ªa se enfrenta a una multa de cinco millones y la disoluci¨®n del grupo en Francia. La decisi¨®n del juez instructor Jean-Christophe Hullin de enviar el asunto al correccional puede tener por lo tanto serias consecuencias para la organizaci¨®n que, durante los 11 d¨ªas que se prev¨¦ que dure la audiencia, se juega su futuro y podr¨ªa suponer el principio del declive en Francia del movimiento fundado en los a?os cincuenta por el escritor de ciencia ficci¨®n norteamericano Ron Hubbard.

Durante el proceso, los debates se centrar¨¢n en conocer el objetivo de la organizaci¨®n y si, como alega el grupo, ten¨ªa como fin promover un m¨¦todo para despertar la espiritualidad o no es m¨¢s que una gran empresa destinada a estafar, como asegura el abogado de las v¨ªctimas Olivier Morice.

En 1997 ya se celebr¨® en Lyon un juicio importante contra miembros de la Cienciolog¨ªa, tambi¨¦n por estafa, y los m¨¦todos de la organizaci¨®n que se analizar¨¢n en el tribunal parisino son los mismos que hace 12 a?os, pero la diferencia ahora es que la justicia puede condenar a la propia estructura. En su providencia, el juez de instrucci¨®n revis¨® toda la parafernalia de los cienci¨®logos, los tratamientos a los que deben someterse, la obligaci¨®n de comprar un aparato llamado electr¨®metro que les cuesta 5.000 euros y unas vitaminas, que, seg¨²n el juez, no son m¨¢s que un se?uelo para darle a todo una apariencia cient¨ªfica. El primer da?o es econ¨®mico pero luego se produce la "falta de socializaci¨®n progresiva" que conduce finalmente a una "situaci¨®n de sumisi¨®n". Un estado mantenido h¨¢bilmente con sesiones de sauna interminables, pruebas f¨ªsicas reiteradas y cursos que pueden durar hasta 12 horas, prosigue el relato del magistrado.

Patrick Maisonneuve, el abogado defensor de la asociaci¨®n, basar¨¢ su alegato en que no se trata de saber si la Cienciolog¨ªa es o no una religi¨®n, sino si se trata de una estafa organizada. El abogado asegura que "no hay una maniobra fraudulenta. La Cienciolog¨ªa no avanza ocult¨¢ndose, es solvente", dice en el diario Le Figaro.