Biobancos, muestras humanas para la investigaci¨®n biom¨¦dica

El apoyo a la investigaci¨®n b¨¢sica se percibe desde hace varias d¨¦cadas como una inversi¨®n a largo plazo porque sus resultados raramente encuentran una aplicaci¨®n inmediata, como desear¨ªa la sociedad. Esto no se debe tanto a la limitaci¨®n del conocimiento cient¨ªfico, sino m¨¢s bien a que el esfuerzo realizado en la transferencia del conocimiento a la pr¨¢ctica diaria no es suficientemente intenso, eficiente y mantenido en el tiempo.

En los ¨²ltimos a?os se han establecido estrategias para acelerar la traslaci¨®n y aplicaci¨®n de los resultados de la investigaci¨®n b¨¢sica al ¨¢rea biom¨¦dica y a la pr¨¢ctica cl¨ªnica diaria. Destaca la promoci¨®n de la investigaci¨®n traslacional, que incluye el proceso de transferencia de conocimientos y tecnolog¨ªa (diagn¨®stica o terap¨¦utica) desde el laboratorio hasta la cabecera de la cama del enfermo y viceversa. En este momento, esta apuesta resulta especialmente urgente y relevante debido al incremento exponencial del conocimiento generado en campos como la bioqu¨ªmica y la biolog¨ªa molecular, la gen¨®mica, prote¨®mica, metabol¨®mica y cit¨®mica. En el ¨¢rea biom¨¦dica, el investigador busca identificar qu¨¦ factores gen¨¦ticos, gen¨®micos y fenot¨ªpicos est¨¢n en el origen de todo tipo de enfermedades, cuyo desarrollo, curso cl¨ªnico y respuesta al tratamiento dependen de interacciones entre factores gen¨¦ticos y ambientales, modulados por el estilo de vida del individuo. Las plataformas tecnol¨®gicas son piezas clave para acelerar la transferencia de todo este conocimiento al cuidado de la salud del individuo y de la poblaci¨®n.

El Banco Nacional de ADN se convierte en Centro de Recursos Biol¨®gicos y se crea una red de biobancos hospitalarios

Los ciudadanos, informados adecuadamente, donan de forma consciente una parte de su cuerpo

Los biobancos no custodian ni procesan muestras y datos para almacenarlos de forma indefinida, sino para ponerlos a disposici¨®n de los investigadores

?Pero qu¨¦ es un biobanco? Los biobancos son establecimientos p¨²blicos o privados sin ¨¢nimo de lucro, en los que se custodian colecciones de muestras biol¨®gicas concebidas para fines de investigaci¨®n biom¨¦dica; en ellos, las muestras contienen adem¨¢s informaci¨®n asociada relevante y se organizan con criterios de calidad, orden y destino. Hoy, los biobancos se han convertido en plataformas tecnol¨®gicas esenciales para el desarrollo de la investigaci¨®n biom¨¦dica ya que proporcionan a los investigadores un gran n¨²mero de muestras biol¨®gicas unidas a los datos (epidemiol¨®gicos, cl¨ªnicos, gen¨¦ticos, ambientales, de h¨¢bitos del donante, etc¨¦tera) que sean relevantes para el investigador.

Como reflejo de este inter¨¦s, en los ¨²ltimos a?os hemos asistido a un incremento notable de iniciativas en este campo que han conducido a la creaci¨®n de biobancos y redes de biobancos progresivamente m¨¢s avanzadas, complejas y sofisticadas, tanto en Espa?a como en el resto de Europa y otros pa¨ªses de nuestro entorno cient¨ªfico. Especial menci¨®n merece en nuestro medio la creaci¨®n en 2003 del Banco Nacional de ADN, promovido por la Fundaci¨®n Genoma Espa?a, as¨ª como los bancos de las redes de investigaci¨®n promovidas por el Instituto de Salud Carlos III (por ejemplo, el programa de bancos de tumores de la Red Tem¨¢tica de Investigaci¨®n Cooperativa en C¨¢ncer), refrendadas en 2009 por el impulso del Gobierno (a trav¨¦s del Ministerio de Ciencia e Innovaci¨®n) a la transformaci¨®n del Banco Nacional de ADN en Centro de Recursos Biol¨®gicos y a la creaci¨®n de una red de biobancos hospitalarios, respectivamente.

En Espa?a, los ciudadanos (pacientes y donantes potenciales) conf¨ªan en la investigaci¨®n biom¨¦dica, una de las profesiones m¨¢s valoradas en las encuestas de opini¨®n. La generosidad y solidaridad de la poblaci¨®n, junto a una mayor educaci¨®n sanitaria y la garant¨ªa del cumplimiento de los est¨¢ndares ¨¦ticos, posibilitan que el ciudadano comprenda y asuma la naturaleza de la investigaci¨®n biom¨¦dica y acepte cada vez m¨¢s f¨¢cilmente donar sus muestras para un biobanco. As¨ª, los ciudadanos, informados adecuadamente, donan de forma consciente una parte de su cuerpo (la muestra biol¨®gica) e informaci¨®n sobre su persona, apoyando de forma imprescindible y decidida la investigaci¨®n. Sin el donante y el apoyo de la sociedad, no existir¨ªan los biobancos.

Por eso los biobancos no custodian ni procesan muestras y datos asociados a las mismas para almacenarlos de forma indefinida, sino para ponerlos a disposici¨®n de los investigadores; por otra parte, el biobanco debe asegurar la utilizaci¨®n racional y eficiente de estos recursos, dentro de un marco ¨¦tico y legal ¨®ptimo, a lo que le ayudan dos ¨®rganos consultivos externos (comit¨¦ cient¨ªfico y ¨¦tico); adem¨¢s, la actividad del biobanco debe ser evaluada. Esta es la manera en que el biobanco apoya la investigaci¨®n de calidad. La noci¨®n de biobanco, por ello, va mucho m¨¢s all¨¢ del concepto de un "repositorio de muestras" y habitualmente promueve interacciones extremadamente din¨¢micas entre grupos cl¨ªnicos, preocupados por dar soluciones a los problemas que aquejan a sus pacientes, y grupos de investigadores (b¨¢sicos, traslacionales y aplicados) que utilizan las muestras e informaci¨®n generada en torno a cada donante, para aportar respuestas a dichos problemas.

Es necesario definir de antemano los objetivos que debe cumplir cada biobanco. Por un lado, la puesta en marcha de un biobanco requiere una masa cr¨ªtica cient¨ªfica en su entorno, que asegure la utilizaci¨®n eficiente de sus recursos y que ayude a definir el tipo de informaci¨®n y de muestras que se requerir¨¢n. Otro factor cr¨ªtico es la planificaci¨®n y disponibilidad de los recursos necesarios para el desarrollo y mantenimiento del biobanco en el cumplimiento de sus objetivos. Insistimos en la necesidad de planificaci¨®n, ya que el dise?o de un biobanco debe prever qu¨¦ investigaci¨®n se realizar¨¢ una vez transcurrido alg¨²n tiempo desde su creaci¨®n y qu¨¦ necesidades metodol¨®gicas y tecnol¨®gicas se derivar¨¢n de los problemas candentes en ese momento. Por ello conviene asociar los biobancos a otras plataformas que contribuyan a impulsar la innovaci¨®n tecnol¨®gica. De la planificaci¨®n y apuestas concretas que las instituciones est¨¢n realizando en estos momentos, depender¨¢ en el futuro gran parte del ¨¦xito de los biobancos en el apoyo de la investigaci¨®n y de su traslaci¨®n a la pr¨¢ctica, cubriendo las expectativas de la sociedad en general, y de los donantes e investigadores en particular.

Alberto Orfao es director del Banco Nacional de ADN e investigador principal del Centro de Investigaci¨®n del C¨¢ncer de Salamanca; Enrique de ?lava es coordinador del programa de Banco de Tumores de la RTICC e investigador principal del Centro de Investigaci¨®n del C¨¢ncer de Salamanca