Sentido com¨²n y t¨ªtulos universitarios

Hace un par de semanas el Tribunal Supremo dict¨® sentencia sobre un tema que, a quien lea este texto, podr¨ªa parecerle m¨¢s de sentido com¨²n que de justicia. B¨¢sicamente, el Tribunal Supremo anul¨® -parcialmente- un real decreto que permit¨ªa otorgar los mismos t¨ªtulos que imparte la Universidad a instituciones no universitarias. En concreto, se trataba de los t¨ªtulos de las Escuelas Superiores de Artes Pl¨¢sticas, de Conservaci¨®n y Restauraci¨®n de Bienes Culturales, de Dise?o, de M¨²sica; de Danza y de Arte Dram¨¢tico. Y, por si no fuera suficiente, esa misma norma conten¨ªa la posibilidad de impedir que las universidades pudieran ofrecer t¨ªtulos coincidentes en esos ¨¢mbitos, sin tener en cuenta que algunos de estos ya ven¨ªan haci¨¦ndolo en las facultades de Bellas Artes desde que estas se incorporaron a la Universidad, hace m¨¢s de 30 a?os.

En apenas dos p¨¢rrafos de un Bolet¨ªn Oficial del Estado, se hab¨ªa conseguido identificar a las escuelas con las universidades y cercenar las competencias que a estas les asigna la Constituci¨®n. Y se preguntar¨¢n c¨®mo... Pues no a trav¨¦s de un sistema de acreditaci¨®n de sus t¨ªtulos, ni de centros y profesores; ni tampoco por un proceso de adscripci¨®n de cada escuela a una universidad. No con las mismas exigencias de calidad que tienen todos los estudios universitarios, sino mucho m¨¢s f¨¢cil: por decreto. Los t¨ªtulos que se habr¨ªan otorgado de este modo irregular, tal y como ha entendido el Tribunal Supremo al impedirlo, habr¨ªan sido de grado en Artes Pl¨¢sticas, en Dise?o, en Conservaci¨®n y Restauraci¨®n de Bienes Culturales, en M¨²sica, en Teatro y en Danza. Afortunadamente, el Tribunal Supremo ha devuelto el sentido com¨²n a este asunto.

Se hab¨ªa conseguido identificar a las escuelas art¨ªsticas superiores con las universidades por decreto

En el amplio recorrido que tenemos las facultades de Bellas Artes, hemos comprobado, sin ninguna duda, que la Universidad es el espacio m¨¢s propicio para el desarrollo interdisciplinar del Arte y de su Conservaci¨®n y Restauraci¨®n; que esta ubicaci¨®n nos permite estar en relaci¨®n permanente con otros ¨¢mbitos del conocimiento human¨ªstico, cient¨ªfico y tecnol¨®gico, y alcanzar as¨ª el m¨¢ximo nivel. Al mismo tiempo, las ense?anzas art¨ªsticas, por su car¨¢cter transversal y su potencial de innovaci¨®n resultan decididamente enriquecedoras para la Universidad.

Puesto que hasta el a?o 1978 ocup¨¢bamos el mismo ¨¢mbito acad¨¦mico que las escuelas superiores, ya que nuestros or¨ªgenes fueron los mismos, conocemos muy bien el cambio que supone haber entrado en la Universidad. Las facultades de Bellas Artes acreditamos la calidad de nuestras ense?anzas mediante los mismos procedimientos que lo hacen el resto de facultades y centros universitarios: sometemos nuestras titulaciones a la exhaustiva revisi¨®n de la Agencia Nacional de Evaluaci¨®n de la Calidad (ANECA), tal como se exige para el resto de los t¨ªtulos espa?oles del Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior. Adem¨¢s, la Universidad ofrece a sus estudiantes la posibilidad de realizar un recorrido completo y coherente desde el grado al doctorado, en una misma l¨ªnea de especializaci¨®n progresiva y con un reconocimiento asociado al prestigio de la instituci¨®n.

Afortunadamente, el Tribunal Supremo ha devuelto el sentido com¨²n a este asunto

No se trata por tanto de una cuesti¨®n meramente sem¨¢ntica, relacionada exclusivamente con la denominaci¨®n de los t¨ªtulos. No habr¨ªa sido justo ni comprensible que, por una v¨ªa paralela, se hubiera permitido a otras instituciones que siguen otras reglas diferentes otorgar t¨ªtulos con la misma denominaci¨®n que tienen los t¨ªtulos universitarios.

Por ello, con el fin de evitar la confusi¨®n y defender su autonom¨ªa, presentaron recursos las Universidades de Granada, de M¨¢laga, de Sevilla, Polit¨¦cnica de Valencia y Complutense de Madrid?, gracias a lo cual el Tribunal Supremo se ha pronunciado dictando una sentencia que clarifica el mapa educativo de las ense?anzas art¨ªsticas, reservando la denominaci¨®n de grado para los t¨ªtulos universitarios.

Ante la noticia de la sentencia, ha sido necesario informar que no afecta a los Grados Universitarios de ninguna de las facultades de Bellas Artes pues, naturalmente, la denominaci¨®n de grado en relaci¨®n a las ense?anzas art¨ªsticas se asocia directamente con nuestras ense?anzas, lo que demuestra el componente de confusi¨®n que conten¨ªa el real decreto.

Nos parece l¨®gico que se cuestione si tiene sentido mantener dos estructuras paralelas

No obstante, algunas escuelas han entendido que la sentencia, m¨¢s que un problema, supone una oportunidad para pedir su adscripci¨®n a la Universidad, y abre definitivamente la v¨ªa para que tambi¨¦n los estudios de danza, arte dram¨¢tico y m¨²sica entren en la Universidad y se produzca la normalizaci¨®n plena de las ense?anzas art¨ªsticas superiores. Nos parece l¨®gico que se cuestione si tiene sentido mantener dos estructuras paralelas que, adem¨¢s de conducir a parad¨®jicas, confusas y conflictivas situaciones, como la ahora vivida, conllevan un coste econ¨®mico de dif¨ªcil justificaci¨®n.

En todo caso, reconocemos la labor que realizan las escuelas superiores de ense?anzas art¨ªsticas y entendemos que esta sentencia no niega su funci¨®n, sencillamente afirma lo evidente: que no son centros universitarios y que en eso estriban notables diferencias. A partir de ah¨ª, sigamos caminando, encontr¨¢ndonos cuantas veces sea necesario y ayud¨¢ndonos a crecer, si llegara el caso.

Firman este art¨ªculo los decanos de las facultades de Bellas Artes de las universidades de Granada (V¨ªctor Medina), Sevilla (Mar¨ªa Teresa Carrasco), M¨¢laga (Salvador Haro), Polit¨¦cnica de Valencia (Jos¨¦ Luis Cueto), Barcelona (Salvador Garc¨ªa), Pa¨ªs Vasco (Josu Rekalde), Miguel Hern¨¢ndez (Jos¨¦ Vicente Mart¨ªn), La Laguna (Alfonso Ruiz), Murcia (Juan Romera), Vigo (Juan Carlos Meana), Zaragoza (Luisa Esteban) y Salamanca (Jos¨¦ Manuel Prada)