No es un crecepelo, es un complemento alimenticio

La publicidad que acompa?a a los complementos alimenticios es enga?osa, compleja y, en ocasiones ilegal. El 81% de los anuncios sobre estos productos mencionan la prevenci¨®n o tratamiento de alguna enfermedad, algo que est¨¢ prohibido. La organizaci¨®n de consumidores Ceaccu ha analizado m¨¢s de 50 webs donde se promocionaban 75 complementos alimenticios y en 36 casos ha encontrado irregularidades que han sido denunciadas ante el Ministerio de Sanidad. ?Qu¨¦ son los complementos alimenticios? Son c¨¢psulas, pastillas, ampollas, que se venden en farmacias, herbolarios o gimnasios para bajar de peso, frenar la ca¨ªda del cabello, controlar la depresi¨®n o la ansiedad, dormir mejor. Pero en realidad no son m¨¢s que complementos alimenticios, es decir, vitaminas, prote¨ªnas o hierbas ¡°cuyo uso debe estar destinado en exclusiva a corregir peque?as carencias diet¨¦ticas en situaciones concretas y bajo supervisi¨®n m¨¦dica o farmac¨¦utica¡±, ha explicado Paula Saiz de Bustamante, autora de este estudio de Ceaccu.

Bien al contrario, la mayor¨ªa de estos productos se publicitan con alegaciones de enorme complejidad cient¨ªfica y algunos incluso mencionan su capacidad para prevenir o tratar enfermedades como el c¨¢ncer. ¡°En realidad, muchos de ellos tienen una dosis tan baja del principio activo que apenas sirven como placebo, pero los consumidores deben saberlo y, en tiempos de crisis, podr¨ªan ahorrar prescindiendo de estos productos. La cifra que mueve este mercado en Europa es de 1.500 millones de euros y en Espa?a se gastan 155 euros por habitante y a?o¡±, ha explicado la presidenta de Ceaccu, Isabel ?vila.

Entre los productos que incumplen el real decreto sobre complementos alimenticios han citado Oikos cromo vital, vendido en la web Farmacia Internacional, donde se asegura su eficacia para la ¡°circulaci¨®n, diabetes, obesidad¡±. O la web de Natural Life ¡°donde se venden numerosos productos asegurando su acci¨®n para tratar o prevenir enfermedades. El Quercetin 500 MG, vendido en la web Leaderfarma por su eficacia en la ¡°prevenci¨®n de enfermedades cardiovasculares y como escudo frente a diversos c¨¢nceres, alergias, ¨²lceras o enfermedades v¨ªricas¡±. Ni un milagro podr¨ªa hacer tanto.

En Espa?a se gastan 155 euros por habitante y a?o en este tipo de productos

Para colmo, muchos de estos productos que se compran a trav¨¦s de Internet pasan de un pa¨ªs a otro sin pasar por los controles establecidos en el pa¨ªs de destino, en este caso Espa?a y con el etiquetado en ingl¨¦s. La ley obliga a demostrar que en la dosis adecuada los complementos alimenticios son inocuos, pero hay dos sombras sobre esto. La primera es que el consumo de estos productos no necesita control m¨¦dico, por tanto, los ciudadanos compran y toman lo que les parece, lo que les recomiendan sus familiares y amigos, en un 28% de los casos. La segunda es a¨²n peor. ¡°Pueden tener efectos secundarios, se conoce que la vitamina A no es buena en exceso, ni el ¨¢cido f¨®lico, ni el hierro, por ejemplo¡±, ha citado Saiz de Bustamante. Curiosamente, son los consumidores que llevan una dieta m¨¢s correcta los que toman estos productos, por tanto, en su caso constituir¨ªa una sobredosis, porque ya ingieren con los alimentos el aporte vitam¨ªnico adecuado, han explicado en Ceaccu. ¡°Por eso reclamamos a las Administraciones que se incorpore en el etiquetado una advertencia sobre los posibles riesgos de una dosis excesiva y los perjuicios de determinadas interacciones¡±.

A decir verdad, el consumidor no sabe que lo que est¨¢ tomando no es m¨¢s que un complemento alimenticio que apenas puede servirle para complementar ciertas carencias en su dieta, que no han de ser muy graves, porque si lo fueran tendr¨ªan que ser tratadas con medicamento. El consumidor, ha explicado ?vila, cree que toma algo eficaz para la ca¨ªda del cabello, para perder peso, para las u?as, y, si est¨¢ enfermo, la desesperaci¨®n tambi¨¦n puede conducirle a creer que eso le ayudar¨¢ a tratar su dolencia. Pero no son medicamentos. Por m¨¢s que el champi?¨®n del sol se venda como indicado para patolog¨ªas de origen tumoral, h¨ªgado, huesos, psoriasis, lupus, candidiasis, alergias tiroiditis¡­ Sin embargo, hay ciudadanos que creen (un 70% de los m¨¢s de 1.000 encuestados por Ceaccu) que estos productos fomentan la salud, que los beneficios que preconizan est¨¢n demostrados (un 83,7%) y conf¨ªan en que no tendr¨¢n efectos secundarios (el 71%); Un porcentaje nada desde?able del 58% los considera una manera eficaz de prevenir enfermedades. Lo que quiere decir que el mensaje, por m¨¢s que ilegal, cala entre la gente. La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria recibe miles de alegaciones para obtener el permiso oficial. ¡°Miles de ellas son rechazadas, pero hay tantas¡­¡±, ha dicho Isabel ?vila.