Luz verde a los experimentos de la gripe mutante
El comit¨¦ de bioseguridad de EE UU cambia de opini¨®n y se?ala que no supone riesgo Los investigadores dicen que la informaci¨®n es clave para conocer el mecanismo de contagio
Los dos famosos experimentos en los que los cient¨ªficos crearon unas cepas mutantes del peligroso virus de la gripe aviar H5N1 no suponen tanto riesgo de convertirse en libro de instrucciones de bioterrorismo como parec¨ªa. El comit¨¦ asesor estadounidense sobre esta materia, que hace cuatro meses recomend¨® censurar los detalles de esos estudios para evitar su replicaci¨®n, ha dado un giro de 180 grados. Ahora aconseja que se publiquen dichos datos atendiendo a los beneficios que reportar¨¢n para la investigaci¨®n de los mecanismos de transmisi¨®n del pat¨®geno y para estar mejor preparados si surge una epidemia.
La decisi¨®n adoptada por el Comit¨¦ Nacional Cient¨ªfico Asesor sobre bioterrorismo (NSABB, en sus siglas en ingl¨¦s) se hizo p¨²blica el viernes con un nuevo comunicado en el se dictamina que los datos de los experimentos descritos ¡°no parece que proporcionen informaci¨®n que pudiera permitir directamente el uso indebido de la investigaci¨®n, de modo que se pusiera en peligro la salud o la seguridad nacional¡±.
Las conclusiones de este comit¨¦ de expertos no son de obligado cumplimiento para las autoridades estadounidenses, pero, como se?ala la revista cient¨ªfica Science, ¡°se espera que tengan un peso sustancial en las decisiones del Departamento de Salud y Servicios Humanos¡±. Pese a que uno de los dos grupos trabaja en Holanda, la pol¨¦mica se ha polarizado en EE UU porque sus instituciones federales financian estos experimentos.
Ron Fouchier (Centro M¨¦dico Erasmus, en Rotterdam) y Yoshihiro Kawaoka (Universidad de Wisconsin, EE UU), con sus respectivos colaboradores, lograron hacer en laboratorio lo que se tem¨ªa que pudiera hacer la naturaleza por s¨ª misma, pero que hasta ahora no ha hecho. El virus H5N1, conocido como la gripe aviar, es altamente letal (han muerto m¨¢s de la mitad de los casi 600 personas que la han contra¨ªdo desde que apareci¨®, en 2003). Pero, a diferencia de la gripe normal, se transmite mal en humanos. Si una mutaci¨®n natural produjese una cepa con la capacidad mort¨ªfera de la gripe aviar y la f¨¢cil transmisi¨®n por las v¨ªas respiratorias de la gripe com¨²n, el resultado podr¨ªa ser una pandemia que podr¨ªa llevarse por delante millones de vidas. Fue este temor lo que provoc¨® el acopio masivo de antivirales (el famoso Tamifl¨²) en muchos pa¨ªses. Pero la naturaleza no ha producido ese monstruo y el H5N1 sigue siendo un virus con una alta tasa de mortalidad, pero que malamente se contagia de persona a persona.
Las investigaciones de Fouchier y Kawaoka se orientan precisamente a desvelar los secretos de la transmisi¨®n del virus y han construido, por ingenier¨ªa gen¨¦tica, mutantes especiales. El pat¨®geno de Wisconsin infecta mam¨ªferos (hurones utilizados como modelos de laboratorio) por las v¨ªas respiratorias, pero apenas mata a los individuos afectados. El mutante de Fouchier, sin embargo, tiene ambas capacidades: se transmite f¨¢cilmente y la mortalidad es alta.
Cuando estos dos equipos describieron sus trabajos y resultados en art¨ªculos para ser publicados en las dos prestigiosas revistas cient¨ªficas Nature y Science, saltaron las alarmas. ?Podr¨ªa ser utilizada esa informaci¨®n con fines bioterroristas? ?Podr¨ªa un grupo repetir el trabajo, crear las supercepas mort¨ªferas de H5N1 y liberarlas entre la poblaci¨®n mundial para causar estragos? ?Y si los virus sal¨ªan accidentalmente de los laboratorios?
Los expertos del NSABB recomendaron el pasado mes de diciembre no hacer p¨²blicos los detalles de esas dos investigaciones, sino solo las conclusiones generales. Para muchos cient¨ªficos eso era pura y llanamente censura de unos resultados que, como reconoce ahora el comit¨¦ de bioseguridad de EE UU, pod¨ªan ser muy ¨²tiles para conocer a fondo los mecanismos de transmisi¨®n del virus y poder afrontar m¨¢s eficazmente una hipot¨¦tica epidemia.
Fouchier explic¨® que se hab¨ªan tomado todas las medidas de seguridad debidas en el laboratorio para evitar una fuga del virus y que, adem¨¢s, se hab¨ªan utilizado t¨¦cnicas est¨¢ndar de ingenier¨ªa gen¨¦tica, por lo que no ser¨ªa dif¨ªcil, a partir de los resultados, repetir el trabajo. Pese a ello, Fouchier y Kawaoka, a finales de enero, asumieron una moratoria de dos meses en sus experimentos y publicaciones para dar un margen de soluci¨®n a la controversia. En febrero, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud se manifest¨® a favor de la publicaci¨®n de los trabajos ¨ªntegros, porque los beneficios para la salud p¨²blica que conllevan pesan m¨¢s que los te¨®ricos riesgos.
Ahora, el NSABB ha revisado el asunto y anuncia que sus expertos aconsejan, por unanimidad, que se d¨¦ a conocer el trabajo completo de Kawaoka. En cuando al de Fouchier, recomienda, por 12 votos a favor y seis en contra, ¡°la comunicaci¨®n de los datos, m¨¦todos y conclusiones presentados en el manuscrito revisado¡±.
Paul Klein, presidente del comit¨¦, niega que esta nueva postura sea una ¡°revocaci¨®n de las propias conclusiones¡± anteriores, como lo definen Science y The New York Times, y declara al diario estadounidense que los manuscritos revisados ahora son diferentes de los originales. ¡°Si se hubieran presentado al principio, el comit¨¦ no habr¨ªa recomendado eliminar ning¨²n detalle¡±, a?ade Klein.
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