¡°La gente joven tiene que moverse, siempre fue as¨ª¡±
La presidenta el Comit¨¦ Cient¨ªfico del Consejo Europeo de Investigaci¨®n destaca la importancia del sistema de selecci¨®n de los mejores
Helga Nowotny es una mujer menuda, jovial y todo lo en¨¦rgica y resolutiva que haga falta. Se le nota enseguida. A sus 75 a?os, y con un curr¨ªculo impresionante de investigaci¨®n y distinciones, esta soci¨®loga austriaca preside el Comit¨¦ Cient¨ªfico del Consejo Europeo de Investigaci¨®n (ERC), formado por 22 expertos seleccionados por su prestigio, sin ninguna representaci¨®n por pa¨ªses. Nowotny tiene una agenda medida al minuto durante la celebraci¨®n del quinto aniversario del ERC, pero no pierde la sonrisa c¨¢lida durante la conversaci¨®n. Ante una mesa con caf¨¦ y pastas, en un peque?o sal¨®n del Albert Hall de Bruselas, charla sobre la ciencia y sobre Europa.
¡°Tenemos una visi¨®n muy clara del objetivo del ERC: se trata de encontrar a los mejores investigadores y asignarles una financiaci¨®n considerable para sus proyectos, y esto es importante sobre todo en el caso de los j¨®venes, para que puedan poner en marcha cuanto antes sus propios equipos de investigaci¨®n¡±, explica.
Describe la importancia del sistema de selecci¨®n de los mejores a trav¨¦s de 25 paneles de expertos independientes y unos 1.400 evaluadores. En la ¨²ltima convocatoria resultaron elegidas 266 propuestas, de las que 13 eran espa?olas. Cada una recibe un m¨¢ximo de 3,5 millones de euros.
Hace calor en la sala y Nowotny, al no poder abrir las ventanas, pide mantener la puerta abierta, casi como un s¨ªmbolo de la claridad y transparencia de funcionamiento de ese ERC, ¡°tan absorbente y apasionante¡± para ella. ¡°Le dedico a esto el 80% de mi tiempo, pero no soy funcionaria, ninguno lo somos en el Consejo; mi puesto est¨¢ en Viena, en la Fundaci¨®n para la Ciencia y la Tecnolog¨ªa¡±. Nowotny es una experta reconocida internacionalmente, con decenas de estudios publicados acerca de la relaci¨®n entre ciencia y sociedad.
La financiaci¨®n plurianual y el compromiso de la comisi¨®n europea con la I+D mantienen al ERC a salvo de los zarpazos de la crisis, pero la situaci¨®n es complicada en algunos pa¨ªses. ?Qu¨¦ aconsejar¨ªa a los j¨®venes interesados en seguir una carrera cient¨ªfica pero que se puedan sentir abrumados por los recortes en su pa¨ªs? ¡°Les dir¨ªa que la gente joven tiene que moverse, que siempre ha sido as¨ª, y si no hay condiciones apropiadas en su pa¨ªs, la gente se ir¨¢ a otro sitio. Si uno cree que tiene las condiciones adecuadas, el empuje y la curiosidad para ser cient¨ªfico, que intente llegar al mejor sitio para lograrlo. Hay que ser persistente, no abandonar...¡±.
No es habitual que una mujer dirija una instituci¨®n cient¨ªfica como esta. ?Tiene el ERC alg¨²n criterio para incentivar la presencia femenina en sus programas? ¡°Seguimos exclusivamente el criterio de la calidad cient¨ªfica de los proyectos¡±, responde. El n¨²mero de cient¨ªficas que logran esas ayudas tan solicitadas es manifiestamente inferior al de los cient¨ªficos. Pero algo est¨¢ cambiando. ¡°En el programa de los j¨®venes, las mujeres son el 27%, y en el de los veteranos, solo el 14%, as¨ª que la situaci¨®n mejora¡±, dice. Pero todav¨ªa hay muchas diferencias por pa¨ªses y por ¨¢reas, recalca. ¡°En f¨ªsica y en ingenier¨ªa la presencia de las mujeres es inferior, mientras que es superior en ciencias sociales y en ciencias de la vida¡±.
No ha probado el caf¨¦ ¡ª¡°demasiados ya esta ma?ana¡±¡ª, ni las pastas. Se recoloca al cuello una ligera bufanda para la foto, posa un minuto con soltura y sigue con su agenda apretada.
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