La Conchichina y Benidorm

Dejando a un lado las repercusiones econ¨®micas ¡ªque un espa?ol no veranee en Espa?a no significa que no deje dinero aqu¨ª: ?d¨®nde quedan si no las agencias de viaje, los portales web, los gu¨ªas que acompa?an a grupos organizados, las editoriales que publican gu¨ªas y revistas del ramo, las empresas receptoras en los diversos pa¨ªses de destino, que muchas veces son de capital espa?ol y con empleados espa?oles, etc¨¦tera?¡ª, la perogrullada del ministro Soria invit¨¢ndonos a que veraneemos ¡°siempre¡± en Espa?a, so pena de que nos piquen los mosquitos y nos llevemos decepciones ¡ªporque para bonito, bonito, mi pueblo¡ª, me retrotrae a discursos patrioteros que cre¨ª que no tendr¨ªa que volver a escuchar.

Que un ministro de Turismo fomente el turismo nacional y ensalce las bellezas de nuestro pa¨ªs entra dentro de su sueldo; coincido con ¨¦l, adem¨¢s, en que la diversidad y variedad de atractivos que ofrece Espa?a es poco com¨²n, pero que lo haga diciendo que ¡°los equivocados somos nosotros¡± por irnos a ¡°lugares rec¨®nditos del mundo¡± es de un chusco que sorprende a estas alturas de partido.

No, se?or Soria. Uno no viaja al extranjero solo por ser esnob y vacilar a los amigos colgando fotos en el Facebook. Viajar es cultura. Viajar enriquece. Viajar te abre horizontes, te ense?a que hay otras muchas oportunidades, otras formas de vida. Viajar a ¡°lugares rec¨®nditos¡± muestra a quien lo quiera ver que existen muchos mundos y que cada uno, con sus particularidades, sus costumbres, sus lenguas o religiones son tan dignos de respeto como el nuestro. Viajar te hace tolerante; o al menos, deber¨ªa: hay quien viaja solo para confirmar sus prejuicios, pero esos, por fortuna, son minor¨ªa. Viajar al extranjero, a lugares cuanto m¨¢s raros y diferentes de Espa?a, mejor, deber¨ªa de ser una asignatura obligatoria desde secundaria.

En tiempos como los actuales, en que reconocemos que de esta crisis profunda solo podremos salir innovando, inventando y creando nuevas industrias, incitar a la gente a que no salga porque lo nuestro es m¨¢s bonito que lo suyo es tan absurdo como el ¡°que inventen ellos¡±.

Por fortuna, nuestros j¨®venes viajan hoy much¨ªsimo m¨¢s de lo que lo hicimos usted o yo en nuestra juventud. Viven en un mundo globalizado, se comunican al instante con gente de cualquier nacionalidad, comparten ideas y archivos y por 10 euros se compran un billete de avi¨®n y se presentan en ?msterdam o en Mosc¨² dispuestos a dormir en un sof¨¢ con tal de ver, conocer, aprender, comparar y compartir. Ser¨¢n ellos, y su visi¨®n m¨¢s globalizada de un mundo que conocen de primera mano, los que nos saquen de la crisis. No el construir m¨¢s apartamentos en Benidorm.

Ah, por cierto: Espa?a es un lugar maravilloso para veranear, sin duda, pero puedo decirle unos cuantos sitios del mundo donde el agua del mar est¨¢ tan caliente como aqu¨ª, y adem¨¢s es m¨¢s limpia. Otros cuantos donde las puestas de sol son tan bonitas y adem¨¢s los chiringuitos, los bares y las verbenas no hacen ruido a las tres de la madrugada. Otros muchos en los que es f¨¢cil disfrutar de arte, patrimonio o parajes naturales con ¡°temperaturas por debajo de 35 y 40 grados¡± y adem¨¢s est¨¢n mejor conservados que los nuestros. Y muchos m¨¢s donde tienen una excelente gastronom¨ªa a precios m¨¢s baratos que los de Espa?a.

Pero mejor que cont¨¢rselos, le invito a viajar y descubrirlos usted mismo.