El virus del Nilo se hace global
El pat¨®geno ocupa casi todo EE UU y afecta tambi¨¦n al sureste de Europa La mundializaci¨®n y el calentamiento favorecen la expansi¨®n de ciertas dolencias
El concepto de enfermedad tropical (m¨¢s bien ecuatorial) est¨¢ en entredicho. La combinaci¨®n entre calentamiento global y viajes intercontinentales ha facilitado que pat¨®genos exclusivos de zonas c¨¢lidas y remotas se hayan asentado en otras latitudes. El caso de mayor ¨¦xito es el virus del Nilo Occidental, un microorganismo que se detect¨® por primera vez en 1937 en Uganda, cerca de una de las fuentes del gran r¨ªo africano, y que ha colonizado ya EE UU, donde ha causado 1.590 infecciones en humanos y 66 muertos este a?o.
La situaci¨®n es tan peligrosa que ayer se inici¨® la fumigaci¨®n de Nueva York, a 4.500 kil¨®metros del ecuador. El rociado buscaba frenar una transmisi¨®n que cuando afecta al ser humano, mediante la picadura de un mosquito, puede derivar en una enfermedad grave conocida como encefalitis equina, una patolog¨ªa que provoca da?os neurol¨®gicos permanentes e incluso la muerte.
¡°La medida de fumigar Manhattan no ocurr¨ªa desde el a?o 2000¡±, explica una portavoz del Departamento de Salud de Nueva York, Alexandra Waldhorn. ¡°Se han cargado camiones con una mezcla compuesta de Anvil [un pesticida sint¨¦tico] que se ha comenzado a rociar en bajas concentraciones en Central Park, Clinton, Lincoln Square, el Upper West Side y sobre el valle de Manhattan¡±, a?ade.
A pesar de estas medidas, Nueva York no es uno de los Estados m¨¢s afectados por el brote: hasta el viernes, 13 personas han resultado infectadas y dos han fallecido. ¡°En 48 de los 50 Estados que conforman el pa¨ªs se han reportado casos en humanos o aves. Tan solo Hawai y Alaska est¨¢n libres de infecciones. Al menos en 43 de ellos se ha contabilizado un caso en humanos¡±, dijo Lyle Petersen, directora de la divisi¨®n de enfermedades infecciosas del CDC (Centro de Control de Enfermedades). Este es el mayor n¨²mero de casos desde la primera detecci¨®n del virus en EE UU, en 1999. Alrededor del 70% de los casos se ha dado en seis Estados: Tejas (Dallas ya ha sido fumigada), Misisipi, Dakota del Sur, Oklahoma, Luisiana y Michigan.
¡°Si hay 100 personas infectadas con el virus, s¨®lo el 20% sufrir¨¢ s¨ªntomas. El resto no sabr¨¢ que ha sido infectada¡±, explica Jean Lim, experta en virus del nilo occidental y profesora asistente en el Departamento de Microbiolog¨ªa de la Escuela de Medicina Mount Sinai, una de las instituciones l¨ªderes en EE UU en el estudio de virus. ¡°Los s¨ªntomas var¨ªan de moderados a severos. Entre los m¨¢s graves est¨¢ la meningitis, la par¨¢lisis, y la encefalitis, que pueden ocurrir cuando el virus entra en el sistema nervioso central. Un 10% de los pacientes con encefalitis fallece. Hay muchos factores que contribuyen al desarrollo de los s¨ªntomas: edad avanzada, inmunosupresi¨®n y factores gen¨¦ticos. Cabe destacar que no hay tratamiento espec¨ªfico para la infecci¨®n, ni tampoco hay vacunas¡±.
¡°No sabemos mucho de a qu¨¦ obedece la susceptibilidad de los humanos al virus", a?ade. "Hay razones gen¨¦ticas, desde luego, pero aun no est¨¢n caracterizadas. Hay centros de estudio que se centran en el virus en s¨ª mismo. En nuestro laboratorio tratamos de entender por qu¨¦ unos individuos presentan s¨ªntomas severos y otros, no. Estudiamos la respuesta inmune al virus, y los genes que se consideran cruciales para tratar de controlar la infecci¨®n viral. Reproducimos la infecci¨®n de virus del nilo occidental en ratones, para poder estudiar el papel de genes espec¨ªficos en las labores de control de la infecci¨®n. Cuando el virus llega al cerebro, hay una serie de c¨¦lulas inmunes que tambi¨¦n migran al cerebro, para tratar de controlar la infecci¨®n. Nosotros estudiamos esos movimientos al nivel molecular¡±.
¡°Desconocemos la causa exacta de este brote¡±, asegura v¨ªa telef¨®nica Candice Hoffmann, portavoz del CDC. Entre los posibles factores se encuentran el calor que se registra desde el mes de junio, el aumento de las poblaciones de mosquitos, las elevadas temperaturas del pasado invierno ¡ªuno de los m¨¢s c¨¢lidos de la historia de EE UU¡ª, y la falta de lluvia.
Europa no se libra de esta invasi¨®n del virus del Nilo. El Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC) registr¨® el a?o pasado 130 casos en humanos dentro de la UE, y otros 207 en pa¨ªses vecinos. Este a?o van 115 y 224, respectivamente, pero la estaci¨®n no ha terminado. El grueso de la enfermedad est¨¢ en Grecia (106 casos este a?o, problema que se repite cada verano) y Rusia (202). Estas cifras se refieren a casos en humanos. En animales son muchos m¨¢s y en los ¨²ltimos a?os los ha habido en Espa?a, Portugal e Italia, entre otros.
Grecia tiene un foco estable que se reactiva cada verano
La causa de esta expansi¨®n es mixta. ¡°Por un lado est¨¢ el calentamiento; por otro, los cambios en el entorno¡±, explica Juan Mart¨ªnez Hern¨¢ndez, profesor colaborador de la Escuela Nacional de Sanidad. En el caso del virus del Nilo, tanto el reservorio (donde habita) como el vector que lo transmite son muy comunes: se trata de p¨¢jaros y mosquitos culex ¡ª¡°el com¨²n¡±, matiza este experto en enfermedades tropicales¡ª. Por eso ¡°no tiene freno¡±.
¡°Obviamente, esto est¨¢ relacionado con el calentamiento¡±, dice Mart¨ªnez. Ha hecho que el virus del Nilo, y tambi¨¦n la malaria, se hayan asentado en Grecia. Incluso un virus propio del ?ndico, como el Chikungunya, ha causado un brote en R¨¢vena (Italia).
Las perspectivas no son halag¨¹e?as. Otra clase de mosquitos, los aedes, responsables de transmitir, entre otras enfermedades, la fiebre amarilla y la malaria, tambi¨¦n aparecen peri¨®dicamente por Europa. Uno de ellos, el albopictus (el mosquito tigre) ocupa ya la cuenca del Mediterr¨¢neo. ¡°Influyen las construcciones en humedales, la falta de depredadores¡±, dice el experto espa?ol. ¡°Aunque los mosquitos no vuelan mucho, el salto entre continentes se ha vuelto demasiado f¨¢cil¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.