Los observadores de lluvias de estrellas fugaces se dan cita en La Palma
Arranca el proyecto de un observatorio para el astroturismo en la isla canaria
En La Palma se iniciar¨¢ en 2013 el desarrollo de un centro de astronom¨ªa para aficionados que aproveche la calidad de uno de los mejores cielos de Europa para la observaci¨®n. Con el objetivo de fomentar el astroturismo, el cabildo insular espera disponer de los fondos para iniciar el proyecto, que se ubicar¨¢ en la explanada del antiguo vertedero de Mendo, a 1.200 metros de altura, en un enclave natural protegido. El anuncio lo hicieron las autoridades locales con motivo de la reciente celebraci¨®n, por primera vez en Espa?a, del Congreso Internacional de Meteoros, una reuni¨®n anual de astr¨®nomos aficionados y profesionales especializados en la observaci¨®n de lluvias de estrellas fugaces, como las Perseidas, y otros fen¨®menos astron¨®micos.
El observatorio para aficionados es un viejo sue?o que ahora por fin parece ponerse en marcha, aunque sin plazos todav¨ªa. La isla canaria ya ha dado el primer paso este a?o al acreditarse preliminarmente como destino Starlight. La iniciativa Starlight, apoyada por la ONU, es un programa de defensa de la calidad del cielo nocturno, como patrimonio cient¨ªfico cultural y medioambiental de la humanidad. La Palma dispone de la ley canaria de protecci¨®n del cielo, prevista para garantizar el funcionamiento del observatorio profesional del Roque de los Muchachos, cuya aplicaci¨®n debe, sin embargo, mejorar, seg¨²n algunos de los expertos presentes en el congreso. El lugar pensado para el observatorio es tambi¨¦n id¨®neo para la pr¨¢ctica del parapente, otro turismo especializado a captar, seg¨²n el cabildo insular.
Los m¨¢s de un centenar de participantes en el congreso intercambiaron informaciones sobre la entrada de b¨®lidos en la atm¨®sfera terrestre, la identificaci¨®n de nuevas lluvias de estrellas y, sobre todo, las c¨¢maras y otros instrumentos y las aplicaciones inform¨¢ticas que se desarrollan continuamente para su observaci¨®n y han dado como resultado un gran aumento en los datos disponibles. En Espa?a caen entre dos y tres meteoritos al a?os, explica Francisco Oca?a (Universidad Complutense de Madrid), de Red Espa?ola de B¨®lidos y Meteoritos, aunque resulte mucho m¨¢s complicado buscar los fragmentos que en el vecino Marruecos. El Museo de Historia Natural de Londres compr¨® el a?o pasado un fragmento (de m¨¢s de un kilogramo), de los 50 encontrados, de un meteoroide marciano ca¨ªdo el 18 de julio de 2011 en el desierto marroqu¨ª (junto a Tissint), a raz¨®n de 1.200 d¨®lares (1.000 euros) el gramo, seg¨²n los datos presentados en La Palma por Abderrahmane Ibhi, lo que supuso batir el r¨¦cord Guinness de valoraci¨®n de un meteorito.
Asteroides cercanos a la Tierra
Las observaciones, indica Oca?a, pueden llevar tambi¨¦n a localizar asteroides cercanos a la Tierra, posiblemente peligrosos, objeto de programas internacionales en la actualidad. Esa es una de las razones por las que la ESA prepara incluir en el suyo una base de datos de b¨®lidos sin l¨ªmite inferior de tama?o. Con telescopios de un metro de di¨¢metro y sat¨¦lites se pretende establecer el puente entre los asteroides con ¨®rbita cercana a la Tierra y los flujos de meteoros. No existe un l¨ªmite preciso, explic¨® Gerhard Drolshagen: ¡°Algunos dicen que los asteroides son los cuerpos de m¨¢s de un metro de di¨¢metro, nuestro objetivo es detectar los menores y predecir el lugar de impacto en la atm¨®sfera en forma de b¨®lidos¡±.
¡°Con la llegada de la electr¨®nica dom¨¦stica, barata y fiable, la inform¨¢tica personal, y los nuevos y r¨¢pidos desarrollos en imagen digital e Internet, las posibilidades de los astr¨®nomos aficionados se han multiplicado exponencialmente¡±, recuerda ?ngel G¨®mez Rold¨¢n, director de la revista ¡°Astronom¨ªa¡±. Los aficionados ya hacen astrometr¨ªa y fotometr¨ªa, se atreven a calcular la composici¨®n de los cuerpos entrantes, su densidad y su ¨®rbita, para intentar conocer el origen de esos fragmentos, normalmente desprendidos de cometas y posiblemente asteroides, que terminan explotando en la atm¨®sfera (iluminando a veces la noche) o cayendo a tierra como meteoritos. Expertos del Instituto SETI y la NASA comentaron, por ejemplo, el funcionamiento de un sistema de 20 c¨¢maras, con la colaboraci¨®n de astr¨®nomos aficionados, que ha permitido calcular 47.000 ¨®rbitas en un a?o.
Al aumentar mucho las observaciones fiables en todo el mundo, ha aumentado tambi¨¦n el cat¨¢logo de lluvias de estrellas de la Uni¨®n Astron¨®mica Internacional, que ya cuenta con 95 identificadas. La ionizaci¨®n que causan los meteoros permite detectarlos asimismo con radares potentes, explic¨® Johan Kero (Instituto Sueco de F¨ªsica Espacial), que utiliza instrumentos en el norte de Suecia pensados para observar las auroras boreales. La Uni¨®n Europea apoya la construcci¨®n en la misma zona de un nuevo radar en tres dimensiones para observar meteoros.
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