El tuit que surgi¨® del fr¨ªo para mentir
Un mensaje falso de un falso Le Carr¨¦ ilustra la capacidad de Twitter para amplificar mentiras J.K. Rowling o Megan Fox fueron dadas por muertas ?Se pueden controlar los riesgos?
Hay dos noticias que siempre ser¨¢n verdad: la del nacimiento y la de la muerte.
El 28 de diciembre, en su cuenta de Twitter, el futbolista Gerard Piqu¨¦ cont¨® que hab¨ªa nacido su primer hijo, con la cantante Shakira. Era una broma. El 2 de enero, desde una cuenta que dec¨ªa que era de John Le Carr¨¦, el autor celebrado de El esp¨ªa que surgi¨® del fr¨ªo, se divulgaba ¡°la terrible noticia¡± de la muerte en accidente de la tambi¨¦n celebrad¨ªsima escritora J. K. Rowling. En mayo de 2011, un tuit avis¨® de la muerte de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez. Y ayer mismo otro tuit explic¨® la muerte, asimismo falsa, de la actriz Megan Fox.
Otras veces estas bromas han sido veniales. Garc¨ªa M¨¢rquez envi¨® supuestamente un testamento que nunca existi¨® y Mario Vargas Llosa, que no ha escrito una sola vez en la vida un cooreo electr¨®nico, apareci¨® como autor de un imposible poema sobre las mujeres.
Pasaron algunos minutos hasta que se supo que, por supuesto, no se hab¨ªa matado la autora de la serie Harry Potter ni Le Carr¨¦ ten¨ªa esa cuenta de Twitter. Pero hasta que fue mentira, los que creyeron que no era el falsificador sino alguien de buena fe quien expresaba con tanto compungimiento la ¡°terrible news¡± tuvieron que poner en marcha la maquinaria de verificaci¨®n. En el pasado hubo casos c¨¦lebres. Dijeron que Mark Twain hab¨ªa muerto; ¨¦l explic¨® con humor que ese hecho era prematuro. Eso mismo dijo el Nobel mexicano Octavio Paz en una llamada a la televisi¨®n de su pa¨ªs, que hab¨ªa divulgado falsamente la m¨¢s inevitable de las noticias...
?C¨®mo podemos defendernos de esta posibilidad abierta a la falsificaci¨®n? Le pregunt¨¦ a tuiteros, algunos de ellos periodistas. Carmen del Riego, presidenta de la Asociaci¨®n de la Prensa de Madrid, me dijo que la Red es libre, ¡°y por eso tenemos que correr el riesgo de que nos enga?e¡±. Estamos indefensos, cree ella, ¡°ante la gente sin escr¨²pulos que tienen unas intenciones ocultas¡±. Pero ¡°los indefensos ante los desaprensivos no somos los periodistas, que sabemos que lo que se dice en Twitter es un dato que hay que corroborar. Los que est¨¢n indefensos son los ciudadanos a los que les llega informaci¨®n, veraz en unos casos, manipulada en otros, y muchas veces lo que quieren o¨ªr¡±. ¡°Deber¨ªan saber [los ciudadanos] que no todo en Twitter es espont¨¢neo, que hay profesionales dedicados a dirigir informaci¨®n, debates y estados de opini¨®n. Yo he visto¡±, revela, ¡°c¨®mo llegan a amigos m¨ªos informaciones falsas sobre la pol¨ªtica y los pol¨ªticos, que los ciudadanos quieren o¨ªr en las actuales circunstancias. Aunque sean falsas¡±.
Gaby Castellanos es la directora general de SrBurns, una agencia especialista en redes sociales, y desde los 16 a?os (naci¨® en 1970, en Caracas) se dedica a la publicidad. Ella explica qu¨¦ siente ante casos como el que ocurri¨® a trav¨¦s de la falsa identidad de Le Carr¨¦. ¡°En realidad¡±, dice, ¡°Twitter es como todos los medios, lo que importan son las fuentes. Suele pasar mucho tambi¨¦n en el mundo del coraz¨®n. ?Cu¨¢ntas veces no han matado en el mundo offline a Miguel Bos¨¦, Alejandro Sanz, Luis Miguel? Y las fuentes se supon¨ªa que eran fiables... Ahora lo que ocurre es que Twitter, al ser un medio de comunicaci¨®n libre, donde cualquiera puede hablar, cualquier noticia puede ser verdad seg¨²n quien la diga. Lo importante son las fuentes¡±.
Pero, ?c¨®mo nos defendemos de la falsedad? Dice Gaby Castellanos: ¡°Nuestro criterio y conocimiento son indispensables. Es como si un medio de comunicaci¨®n nos da su opini¨®n del Gobierno: comprobamos la informaci¨®n y creamos nuestra propia opini¨®n. El mundo online no tiene ninguna diferencia con respecto al mundo offline, sino en que la informaci¨®n no est¨¢ solo centralizada en medios de pago sino en personas, y ah¨ª importa nuestro criterio de fiabilidad o la reputaci¨®n y credibilidad que se han creado¡±.
Pilar del R¨ªo recuerda que tambi¨¦n hay bulos fuera de Twitter
?Qu¨¦ fall¨® en el caso del falso Le Carr¨¦ y en tantas falsedades? Pilar del R¨ªo, presidenta de la Fundaci¨®n Saramago, periodista y usuaria de este sistema, cree que ¡°bromistas de mal gusto hay en todas partes, desde los chismorreos a los globos sondas de gobiernos y empresas¡±. Y por tanto, cree ella, ¡°no hay que ir a Twitter para encontrar falsedades publicadas: est¨¢n los libelos, y en la red de oportunismos, la pura maldad y la necesidad de satisfacer el ego escondido tras un nombre que convoque, ya que a cara descubierta no conseguir¨ªa atenci¨®n¡±.
En ese sentido, ella recuerda que desde que muri¨® su marido, el Nobel Jos¨¦ Saramago, hace dos a?os, ¡°circula por Internet un montaje con un supuesto texto suyo en el que define el concepto hijo, y no hay manera de pararlo, pese a los mil desmentidos que se han hecho. Si Jos¨¦ Saramago viera que se le atribuyen esas palabras se volver¨ªa a morir; est¨¢n en contradicci¨®n con lo que escribi¨® toda su vida y hasta hay gente que se emociona ley¨¦ndolo. En fin¡±.
Entonces, ?c¨®mo nos defendemos, Pilar del R¨ªo? ¡°Tenemos ante Twitter el mismo grado de indefensi¨®n que ante un programa de televisi¨®n o una noticia en un peri¨®dico. Que digan que han dado un golpe de Estado en Portugal en Twitter circula un poco, alg¨²n medio lo rebota, pero en seguida cae por su propio peso. Que atribuyan una muerte es terrible, pero queda ah¨ª en la vulgaridad de quien no tiene nada m¨¢s importante en la vida que circular mentiras, pero, frente a una l¨ªnea editorial que cuenta el mundo de acuerdo con sus intereses concretos, ?c¨®mo nos defendemos?¡±.
Carmen del Riego alerta contra los profesionales de la falsedad
El periodista Fernando Berl¨ªn, director de Radiocable y tuitero, recuerda que ¡°la propagaci¨®n del rumor es anterior al nacimiento de Twitter, aunque con las redes sociales ha adquirido una nueva dimensi¨®n¡±. La asignatura pendiente, para ¨¦l, no est¨¢ en la herramienta, sino ¡°en las cautelas en las que debemos entrenar a los ciudadanos¡±.
La comprobaci¨®n de las noticias es el fundamento del oficio. Ah¨ª tambi¨¦n. ?Y estamos indefensos? ¡°Cada vez estamos m¨¢s preparados para dudar porque la experiencia nos ha vuelto muy esc¨¦pticos¡±. Eso, la relaci¨®n del ciudadano con el instrumento Twitter, ¡°ser¨¢ cada vez m¨¢s intenso¡±, dice Berl¨ªn. Twitter, avisa, ¡°etiqueta algunas cuentas¡± para avisar de la garant¨ªa de su pertenencia. ¡°Eso no evita que puedan cometer el error de propagar un rumor, pero s¨ª dificulta que alguien lo haga en su nombre¡±.
La red tambi¨¦n dio por muertos a Paris Hilton, Morgan Freeman o Kesha
Sandra Barneda, periodista tambi¨¦n, ahora en El Gran Debate, de Telecinco, es usuaria de Twitter. Cree que esta herramienta ¡°vive un momento de gran plenitud¡± pero puede estancarse por culpa de los llamados ¡°fake followers [falsos seguidores] y la falta de control... Es un medio con el que comunicarse, pero sus armas pueden ser mal usadas, como cualquier medio¡±.
Y ante esas malformaciones del instrumento, ?qu¨¦ hacer? ¡°En la red todo sucede con mucha celeridad y no se han puesto los medios suficientes para atajar el quebrantamiento del honor y la ¨¦tica. No me gusta hablar de l¨ªmites, pero s¨ª de estar en las mismas condiciones para la partida. La red es un universo maravilloso e infinito, y del mismo modo que contamos con un DNI, deber¨ªa tener que identificarse la persona antes de publicar algo en la red... Si los serial killers se controlan, los imagen killers de la red tambi¨¦n deber¨ªan ser perseguidos y no solo cuando son denunciados por los afectados. ?Vamos retrasados! Tres pasos hacia atr¨¢s y no hay que confundir la libertad con el todo vale¡±.
Tito Exp¨®sito, editor de Baile del Sol, usa Twitter para divulgar sus novedades; entiende que antes de la red ya se produc¨ªan estos rumores y estas malformaciones de la informaci¨®n. Y establece un mecanismo de defensa, el mismo que habr¨ªa que usar ante la informaci¨®n general: ¡°Cuanto m¨¢s amplia sea esta, m¨¢s fuentes se consulten y m¨¢s se contraste lo que se lee, menos cabida tendr¨¢n las desinformaciones, pero no son absolutamente evitables, siempre nos colar¨¢n alguna¡±. ¡°De cualquier forma¡±, a?ade, ¡°preferimos eso a una red controlada por la censura y los poderes medi¨¢ticos¡±.
¡°Cada vez estamos m¨¢s preparados para dudar¡±, se?ala Fernando Berl¨ªn
¡°La falsa noticia de la muerte de J. K. Rowling en Twitter no es noticia¡±, explica Joan Mayans, antrop¨®logo especializado en aspectos sociales, empresariales y culturales de la sociedad digital. ?l recuerda: ¡°S¨®lo durante 2012 Twitter ha propagado las muertes de Morgan Freeman, Bill Cosby, Kesha, Chris Brown, Paris Hilton o Adam Sandler, entre otros. En muchas ocasiones, aludiendo a la causa de muerte m¨¢s fortuita e inesperada: el accidente de circulaci¨®n¡±.
Otro aspecto relevante de la noticia, explica Mayans, ¡°es la usurpaci¨®n de la cuenta del colega de la supuesta difunta, John Le Carr¨¦... Tampoco esto es noticia, ya que la usurpaci¨®n de cuentas de Twitter es un fen¨®meno constante. Podemos decir incluso que, desde que existe Internet, la usurpaci¨®n de identidades digitales ¡ªel llamado spoofing¡ª est¨¢ a la orden del d¨ªa¡±. Y agrega: ¡°Lo que ponen en cuesti¨®n casos como el del death hoax de Rowling es la metodolog¨ªa de trabajo de los periodistas y de los medios. Si las fuentes se comprueban correctamente, es muy dif¨ªcil que estos falsos RIP pasen por ver¨ªdicos¡±.
Mayans habla de las usurpaciones de identidad. ¡°En Internet, lo m¨¢s preciado y, a la vez, lo m¨¢s d¨²ctil, es la identidad con la que nos presentamos. Las identidades digitales son maleables, fr¨¢giles y escurridizas. Por eso es tan interesante el juego que hacemos ¡ªtodos¡ª con ellas, al edulcorarlas, travestirlas o modificarlas de cualquier manera. Nuestra sociedad a¨²n est¨¢ aprendiendo a digitalizarse y nuestra transformaci¨®n en sujetos digitales a¨²n tiene muchos cap¨ªtulos por escribir¡±.
Que alguien se dedique a usurpar cuentas de famosos, estima el antrop¨®logo, ¡°no es m¨¢s que una vistosa manera de fijar nuestra atenci¨®n sobre este proceso de digitalizaci¨®n del yo¡±.
Garc¨ªa M¨¢rquez, blanco tantas veces de las aberrantes falsedades, dijo ante periodistas el 7 de octubre de 1996: ¡°La mejor noticia no es siempre la que se da primer sino muchas veces la que se da mejor¡±.
Para dar bien las noticias de la muerte falsa de muchos de los afectados por este virus, los suplantadores de identidades tendr¨¢n que esperar su tiempo si lo que quieren es hacer periodismo y no burla del periodismo, o sea, periodismo prematuro, que es la peor cara, la m¨¢s fr¨ªa, la m¨¢s mentirosa, del periodismo.
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