La Generalitat maneja un informe que prev¨¦ privatizar 18 hospitales

La Generalitat de Catalu?a tiene en sus despachos un plan privatizador de la sanidad p¨²blica que, de llevarse a cabo, dejar¨¢ en manos de empresas con af¨¢n de lucro al menos 13 grandes instituciones sanitarias p¨²blicas. Estas entidades, principalmente consorcios, tienen asignada una poblaci¨®n de m¨¢s de dos millones de habitantes y, en su conjunto, gestionan 18 hospitales, 46 centros de atenci¨®n primaria y casi un centenar de otros dispositivos asistenciales. EL PA?S ha tenido acceso al borrador del plan ¡ªtitulado Aproximaci¨®n a un nuevo planteamiento estrat¨¦gico para las empresas p¨²blicas y consorcios de salud de la Generalitat¡ª, fechado en junio de 2011, y que tambi¨¦n prev¨¦ la venta de entidades p¨²blicas. El documento ha sido redactado por la consultora PricewaterhouseCoopers (PWC) e incluye una lista de empresas susceptibles de participar en la privatizaci¨®n ¡ªCapio Sanidad, Grupo Ribera Salud, USP, HM Hospitales...¡ª. Los autores tambi¨¦n dejan caer un consejo: ¡°Nuestra recomendaci¨®n es una entrada de capital privado en dos fases para diluir el impacto pol¨ªtico y social¡± del plan.

Las entidades cuya gesti¨®n es susceptible de ser privatizada, seg¨²n el documento, son los consorcios de Terrassa, Sabadell, Maresme (Matar¨®), Vic, L'Anoia (Igualada), L'Alt Pened¨¨s, Integral (en el Baix Llobregat), adem¨¢s de los hospitales barceloneses Cl¨ªnic, Sant Pau, Mar y Pere Virgili, entre otros.

Preguntado sobre el documento, el Departamento de Salud de la Generalitat asegura que se trata solo de un ¡°planteamiento te¨®rico¡± y rechaza que vaya a ¡°privatizar ninguna empresa p¨²blica o consorcio¡±. Salud, sin embargo, no ofrece una respuesta clara sobre las razones por las que encarg¨® el documento y asegura, en contra de lo que dice el propio texto, que este surgi¨® de ¡°una propuesta de PWC¡±. La Generalitat se ha negado a informar del coste del plan para las arcas p¨²blicas.

Esta es la segunda filtraci¨®n en 14 meses de documentos que se?alan hacia la privatizaci¨®n del sistema sanitario catal¨¢n, cuyo consejero, Boi Ruiz, procede de la patronal Uni¨® Catalana d¡¯Hospitals. En octubre de 2011, este diario avanz¨® otro plan ¡ªLa gobernanza del ICS¡ª que preve¨ªa trocear el Instituto Catal¨¢n de la Salud ¡ªque agrupa los ocho grandes hospitales y cerca de 300 centros de atenci¨®n primaria que gestiona la Generalitat¡ª en 20 sociedades que iban a ser abiertas al capital privado. Salud neg¨® entonces que pensara aplicarlo en ese sentido. La divisi¨®n del ICS ya ha empezado, aunque las nuevas sociedades hijas siguen siendo, hasta la fecha, enteramente p¨²blicas.

Salud asegura que el proyecto es un ¡°planteamiento te¨®rico¡±

En la peculiaridad del sistema sanitario catal¨¢n, ambos planes son complementarios y ofrecen a la Generalitat ¡ªgobernada por CiU¡ª una hoja de ruta bien definida hacia una masiva entrada del capital privado en la sanidad p¨²blica catalana, cuya principal caracter¨ªstica es la separaci¨®n entre qui¨¦n la financia ¡ªel CatSalut, organismo del Departamento de Salud¡ª y qui¨¦n presta la asistencia, los denominados proveedores. Entre ellos est¨¢ el ICS, pero tambi¨¦n un amplio abanico de entidades p¨²blicas y privadas que cuentan con plena autonom¨ªa de gesti¨®n.

Aunque Salud reniegue de ellos, los dos documentos filtrados dan respuesta a lo que para sus responsables pol¨ªticos son los dos grandes problemas de la sanidad catalana actual. El primero es el gran tama?o y la supuesta rigidez de gesti¨®n del ICS, heredero de la vieja Seguridad Social que gestionaba los hospitales espa?oles. De ah¨ª el deseo en La gobernanza del ICS de trocear e introducir nuevas formas de gesti¨®n en ¨¦l.

El segundo problema que los responsables sanitarios ven al sistema tiene que ver con la deuda p¨²blica y la situaci¨®n laboral de sus trabajadores. En su origen, las deudas de consorcios y empresas p¨²blicas sanitarias no computaban como de la Generalitat. Tampoco las condiciones de sus trabajadores eran equiparables con la de los funcionarios del ICS. Pero esta situaci¨®n ha cambiado con la normativa europea de contabilidad y la creciente equiparaci¨®n de condiciones para todos los empleados sanitarios, como se ha visto con la aplicaci¨®n universal de la reducci¨®n salarial del 5%.

El departamento catal¨¢n rechaza aplicar el estudio encargado a PWC

Para PWC, ambas tendencias ¡°atentan contra los principios fundacionales¡± del sistema catal¨¢n y se impone como objetivo hallar f¨®rmulas que devuelvan a los hospitales tal autonom¨ªa que rompa la equiparaci¨®n laboral y evite a la Generalitat asumir las deudas de los centros sanitarios.

La cuesti¨®n es que ello es imposible sin recurrir a una doble estrategia de privatizaci¨®n que, por un lado, pasa por vender empresas p¨²blicas y, por otro, por entregar a la gesti¨®n privada los hospitales cuya venta no es posible cuando, por ejemplo, el edificio es propiedad de otras instituciones como Ayuntamientos o la Seguridad Social. Y es aqu¨ª donde confluyen los dos planes de los que reniega Salud, ya que la f¨®rmula ser¨ªa aplicable tanto a consorcios como a las sociedades hijas del ICS.

La venta de organismos p¨²blicos debe hacerse, seg¨²n PWC, en dos fases. ¡°El primer paso consiste en transformar las entidades de derecho p¨²blico en sociedades mercantiles¡± propiedad del CatSalut. Luego, ¡°el CatSalut podr¨¢ (...) enajenar los t¨ªtulos de la sociedad o incluso perder su posici¨®n mayoritaria para dar entrada a terceros¡±. Para ello, PWC contempla dos posibilidades: la subasta p¨²blica o la enajenaci¨®n directa, aunque se?ala que ¡°la subasta p¨²blica es el procedimiento general¡±.

Para los hospitales, PWC propone la separaci¨®n entre patrimonio y gesti¨®n, y la privatizaci¨®n de esta ¨²ltima. ¡°Se pretende que el patrimonio siga en manos p¨²blicas y que la gesti¨®n de los servicios sanitarios se encomiende a un tercer gestor que asuma los riesgos \[y los beneficios\] de su explotaci¨®n¡±. Tras analizar varias opciones, PWC se inclina por elegir la concesi¨®n administrativa y el concierto como f¨®rmulas deseables ya que permiten ¡°que las p¨¦rdidas que en su caso puedan derivarse no puedan computarse como deuda de la Generalitat¡±.

El documento llega incluso a plantear la duraci¨®n de los contratos, que ser¨ªa de ¡°10 a?os salvo que dicho contrato comprenda tambi¨¦n la ejecuci¨®n de obras, en cuyo caso podr¨ªa ser de hasta 50 a?os¡±.

La adjudicaci¨®n de servicios p¨²blicos esenciales a operadores privados tiene, sin embargo, un riesgo que PWC no oculta: ¡°Un concesionario deficitario puede poner en riesgo la salud de las personas, [por lo que] es l¨®gico pensar que en ese supuesto la Generalitat intervendr¨ªa r¨¢pidamente el servicio¡±. Esta ¨²ltima posibilidad ¡ªconocida como la ¡°privatizaci¨®n de los beneficios y socializaci¨®n de las p¨¦rdidas¡±¡ª es la que ha motivado que este tipo de concesiones hayan sido a menudo objeto de duras cr¨ªticas.