¡°Los reptiles llevan una vida sin prisas¡±
El cuidador del terrario de Barcelona durante m¨¢s de 29 a?os trabaja con anacondas, pero tiene miedo a las ara?as
Pregunta. He visto muchas monedas en el agua de los cocodrilos. Y luego dir¨¢n que hay crisis.
?Respuesta. La gente las lanza, no hay forma de que no lo hagan.
P. ?Qui¨¦n las recoge? Ser¨¢ un verdadero valiente.
R. Las sacamos al cambiar el agua. Te explicar¨¦ una historia: una vez vimos que alguien se hab¨ªa metido en el recinto de los alig¨¢tores. Hab¨ªa huellas en el barro. Result¨® ser un mendigo que hab¨ªa recuperado un mont¨®n de monedas ante las fauces de los animales. Lo detuvieron al salir, empapado y con los bolsillos llenos. Le quitaron el dinero. Yo no lo hubiera hecho. Aquel hombre se merec¨ªa esas monedas.
P. ?C¨®mo se manipula a un cocodrilo?
R. Cuando llegu¨¦ aqu¨ª hace casi treinta a?os se hac¨ªa a lo bruto, en plan el cazador de cocodrilos. Nos tir¨¢bamos al cuello y entre varios lo inmoviliz¨¢bamos. Era una escena muy dram¨¢tica. No pasaban m¨¢s cosas porque san Francisco velaba por nosotros. Hoy los hacemos meterse en un tubo o los dormimos, aunque la anestesia para cocodrilos no es muy buena...
P. He visto que tienen a la anaconda mudando. Los indios de La Apaya colombiana temen a la anaconda. ?Hacen bien?
R. S¨ª. Son muy grandes. De tanto en tanto llegan noticias de que han atacado a alguien. Tambi¨¦n pasa con la pit¨®n reticulada.
P. ?Qu¨¦ consejo le dar¨ªa a Frank de la Jungla?
R. Que no le muerdan tanto. Es que le muerden todos los animales. Eso no puede ser bueno.
P. A usted tambi¨¦n le han mordido.
R. Me mordi¨® un cocodrilo. Un caim¨¢n juvenil, peg¨® un salto impresionante desde una cubeta y me atrap¨® la mano. Aqu¨ª tengo la cicatriz.
P. ?A ver? Jo, que da?o.
R. El caim¨¢n se qued¨® colgando, no se soltaba, fue una sangr¨ªa.
P. ?C¨®mo son los cocodrilos de cerca, dientes aparte?
R. Son agresivos, pero tambi¨¦n muy comunicativos. Hay cuidado parental. Las cr¨ªas llaman a las madres. Estas las transportan cuidadosamente en sus mand¨ªbulas. Por otro lado, tuvimos el caso de aquella pareja que llevaban treinta a?os juntos, sin problemas, y un d¨ªa ¨¦l la mat¨® a ella. Mi teor¨ªa es que al envejecer ella ces¨® de segregar hormonas y el macho dej¨® de reconocerla como hembra y la atac¨®. En fin, muy triste.
Perfil
La jornada con Manel Arest¨¦ (Barcelona, 1957) en el zoo del terrario de Barcelona, donde lleva 29 a?os y ha visto de todo, es intensa: hemos asistido al almuerzo de las cr¨ªas de drag¨®n de Komodo (se las ve komodas,le digo al bi¨®logo, que parece dudar si lanzarme a las pitones que copulan alegremente). Los dragones se alimentan de ancas de rana ba?adas en huevo. "Luego iremos a coger un cocodrilo". ?Yupi!
P. ?Y las serpientes?
R. Son misteriosas, impredecibles, van a lo suyo. Las hay inofensivas como gatitos y otras que te env¨ªan al otro barrio solo con escupirte.
P. Provocan miedo.
R. Despiertan filias y fobias. Al que le gustan le gustan con pasi¨®n. Esa ambivalencia ya est¨¢ en las mitolog¨ªas, donde pueden ser seres malignos o salv¨ªficos, representar la luz o la oscuridad. En muchos mitos son seres guardianes. Hay gente que viene aqu¨ª a curarse la fobia. Por cierto, ?has visto el caso de ese alem¨¢n al que mat¨® una v¨ªbora a la que manipulaba en una demostraci¨®n para gente con fobia? Desde luego no se habr¨¢n curado...
P. ?Es nuestra parte primate la que nos hace temerlas?
R. No creo que haya un miedo cong¨¦nito pero indudablemente s¨ª una predisposici¨®n a aprender a tenerles miedo.
P. ?Tiene usted miedo a alg¨²n animal?
R. ?Y tanto! A las ara?as. No me hace gracia coger una migala. Una cobra tampoco, por supuesto. Pero una ara?a no tengo necesidad.
P. ?Qu¨¦ lecci¨®n nos ofrecen los reptiles?
R. No sabr¨ªa decirte, son tan distintos. La suya es una vida sin prisas.
P. ?Sufren en el zoo, cautivos?
R. De hecho, imagino que sufren menos que en libertad. Tienen alimento, pareja, no los depredan. Los reptiles no son muy exigentes. ?Se aburren? Quiz¨¢ s¨ª, pero me parece que eso es proyectarnos en ellos, antropomorfizar. No digo que todo en los zoos sea ideal y me parece muy respetable que se los critique, pero aqu¨ª hacemos un buen trabajo criando especies en peligro como los tritones del Montseny o la rana gigante de la isla caribe?a de Montserrat, a la que inmunizamos antes de soltarla en su h¨¢bitat plagado de hongos invasores que la matar¨ªan.
P. ?Hay cocodrilos en las cloacas del poder?
R. Muchos, demasiados. Si salieran todos... eso s¨ª da miedo de verdad.
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