El Gobierno dar¨¢ un a?o a Garo?a para pedir la reapertura

El secretario de Estado de Energ¨ªa, Alberto Nadal, ha firmado el ¡°cese definitivo de la explotaci¨®n de la central nuclear de Santa Mar¨ªa de Garo?a¡± que entrar¨¢ en vigor el domingo. La nuclear, la segunda que cierra en Espa?a despu¨¦s de Zorita, tiene a¨²n una posibilidad de seguir abierta si as¨ª lo solicitan sus due?os, Endesa e Iberdrola, y lo aprueba el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).

En otro real decreto?que ha preparado Industria sobre combustible nuclear se establece que el cierre de las centrales solo ser¨¢ definitivo cuando se produzca por motivos de seguridad. Si es, como en el caso de Garo?a, por motivos econ¨®micos, las empresas tendr¨¢n un a?o para pedir seguir operando. El Gobierno devuelve la decisi¨®n sobre Garo?a a las el¨¦ctricas. Aunque en la forma mantiene su compromiso pronuclear, en la pr¨¢ctica el futuro de la central no queda despejado.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, anunci¨® tras el Consejo de Ministros que el Gobierno ¡°va a iniciar las modificaciones normativas necesarias¡± para ¡°contribuir¡± a que pueda continuarse la actividad de la instalaci¨®n ¡°si as¨ª fuera posible¡±.

Este traje legal a la medida de Garo?a est¨¢ ya en marcha en el ¡°proyecto de real decreto para la gesti¨®n responsable y segura del combustible nuclear gastado y los residuos radiactivos¡±. All¨ª, en un texto sobre la empresa p¨²blica Enresa, modifica las condiciones de cierre de las nucleares. Establece que el cese de la actividad tendr¨¢ ¡°car¨¢cter definitivo cuando haya estado motivado por razones de seguridad nuclear o de protecci¨®n radiol¨®gica. En otro caso, el titular podr¨¢ solicitar, a fin de reanudar la actividad, la renovaci¨®n de la autorizaci¨®n de explotaci¨®n dentro del plazo de un a?o¡±.

Y ese es el caso de Garo?a.?La orden ministerial de cierre que hoy publicar¨¢ el Bolet¨ªn Oficial del Estado, de 13 folios y a la que ha tenido acceso este diario, insiste en que el cierre se produce ¡°por razones econ¨®micas¡±.

La decisi¨®n sobre el futuro de Garo?a vuelve as¨ª a las el¨¦ctricas, que en septiembre dejaron pasar el plazo que el Gobierno del PP les puso en bandeja para que funcionara hasta 2019. Para ello, Garo?a debe realizar enormes inversiones derivadas de las nuevas exigencias de seguridad que se impusieron tras el accidente de Fukushima (en Jap¨®n, en 2011), adem¨¢s de las que les impuso el CSN en 2009 si quer¨ªa operar hasta 2019.

Que las el¨¦ctricas tengan un nuevo plazo para pedir la pr¨®rroga no implica que el camino de Garo?a est¨¦ despejado. Para funcionar hasta 2019, las inversiones exigidas dif¨ªcilmente ser¨ªan rentables, seg¨²n fuentes del sector. Y si Garo?a pide una nueva licencia de otros 10 a?os, el CSN estima que la evaluaci¨®n necesitar¨ªa m¨¢s de dos a?os, tiempo en que la central deber¨ªa estar parada.

La planta est¨¢ en situaci¨®n de parada fr¨ªa y sin el combustible en el reactor desde diciembre, cuando las el¨¦ctricas argumentaron que los nuevos impuestos imped¨ªan la rentabilidad de la planta.

Garo?a, conectada a la red en 1971, es la m¨¢s peque?a y antigua del parque nuclear espa?ol. Su producci¨®n el¨¦ctrica es prescindible, sobre todo, por el exceso de potencia instalada en Espa?a, pero se ha convertido en un s¨ªmbolo pol¨ªtico desde que en 2009 el Gobierno de Zapatero decidi¨® darle cuatro a?os m¨¢s de vida y Rajoy anunci¨® que la mantendr¨ªa abierta.