Una cabeza de repuesto
La biolog¨ªa del desarrollo empieza a entender las claves de la regeneraci¨®n de ¨®rganos en gusanos
Perder la cabeza no supone un gran problema en el mundo de las planarias, o gusanos planos de vida libre. Cuando a uno de estos individuos le cortan la cabeza, les crece otra y santas pascuas. Los bi¨®logos llevan un siglo mirando con envidia esta prodigiosa capacidad de regeneraci¨®n que muestran estos gusanos y, en menor medida, otros animales como peces, lagartijas y ajolotes mexicanos, que no solo pueden regenerar los miembros perdidos, sino tambi¨¦n ¨®rganos internos como el coraz¨®n.
El bi¨®logo del desarrollo Yoshihiko Umesono, del Instituto Riken en Kobe, Jap¨®n ¨Cun centro del que oiremos hablar a menudo en los pr¨®ximos a?os¡ª y sus colegas del Instituto Max Planck de Biolog¨ªa Molecular y Celular, en Dresde, y las universidades de Illinois y San Francisco presentan en tres trabajos en?Nature unas investigaciones que penetran en la l¨®gica m¨¢s profunda de la regeneraci¨®n, en sus claves gen¨¦ticas y celulares. Todo ello en las planarias.
Regenerar una cabeza humana no entra de momento en los planes de nadie ¨Ccasi se dir¨ªa que por fortuna¡ª, pero entender las claves biol¨®gicas del fen¨®meno puede ofrecer alg¨²n d¨ªa importantes claves de la reparaci¨®n de ¨®rganos en general. Emular o ¡®domesticar¡¯ los procesos naturales de regeneraci¨®n puede verse, al fin y al cabo, como el santo grial de la medicina regenerativa. De ah¨ª el nombre de esta disciplina. La historia de la ciencia muestra que entender a fondo un fen¨®meno es siempre el pre¨¢mbulo de sus aplicaciones tecnol¨®gicas.
Hay planarias y planarias. Algunas de estas especies de gusanos muestran una capacidad de regeneraci¨®n completa ¨Cincluida la cabeza¡ª, mientras que otras solo aciertan a reparar otras partes menos nobles del cuerpo. Esa diferencia es a menudo un buen punto de entrada si uno busca las claves un proceso. Los cient¨ªficos han encontrado los componentes de las primeras planarias (genes, mol¨¦culas o c¨¦lulas) que pueden conferir a las segundas planarias la capacidad de regenerar la cabeza.
El nombre del asesino ¨Cel sistema biol¨®gico que subyace a la capacidad de regenerar la cabeza¡ª es Wnt/beta-catenina, uno de los sistemas de se?alizaci¨®n fundamentales en todos los animales desde las medusas a los lectores, pero esa es una cuesti¨®n compleja en la que no nos conviene entrar. Al menos mientras no sepamos regenerar una cabeza.
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