Tibio acuerdo mundial para limitar las emisiones a¨¦reas de CO2

Bruselas celebr¨® ayer el acuerdo mundial alcanzado en la Organizaci¨®n de Aviaci¨®n Civil Internacional (OACI), que decidi¨® apoyar la reducci¨®n de las emisiones de CO2 de las compa?¨ªas a¨¦reas, pese a que la declaraci¨®n fue muy vaga y las decisiones quedan emplazadas a la asamblea de 2016. ¡°Es una buena noticia para los pasajeros, para la industria a¨¦rea, pero sobre todo para el planeta¡±, se?al¨® el comisario europeo de Industria, Siim Kallas. La Comisi¨®n reconoci¨® que el acuerdo no es perfecto, pero se felicit¨® porque ¡°sin la insistencia de la Uni¨®n Europea, no hubiera sido posible¡±, declar¨® la comisaria para el cambio clim¨¢tico, Connie Hedegaard.

El l¨ªmite del que habl¨® ayer la OACI deber¨ªa entrar en vigor en 2020, pero con el mecanismo que se decida en 2016. ¡°Todav¨ªa tenemos que detallar algunos aspectos de aqu¨ª a 2016¡±, declar¨® Kallas, ¡°pero hemos demostrado seriedad cuando se trata de abordar el impacto medioambiental de la aviaci¨®n¡±. El comisario se felicit¨® tambi¨¦n por ¡°haber evitado un conflicto entre socios comerciales¡±, en referencia a las quejas de distintas compa?¨ªas cuando, en 2011, Bruselas decidi¨® cobrar una tasa por las emisiones de CO2 a todas las compa?¨ªas cuyos vuelos atravesaran el espacio a¨¦reo europeo.

La UE tuvo que suspender la directiva tras el aluvi¨®n de denuncias de las compa?¨ªas y ahora estudia si impondr¨¢ una tasa a las compa?¨ªas por los vuelos que no tienen origen y destino en territorio europeo, sino solo uno de los dos y solo por las emisiones en territorio europeo.

En las negociaciones de este acuerdo, fuentes de la Comisi¨®n Europea apuntaron que Colombia y M¨¦xico fueron claves a la hora de apoyar un acuerdo mundial, promovido por la UE, mientras Argentina y Venezuela ¡°se opusieron hasta el final¡±. En cuanto a Espa?a, ¡°se mostr¨® siempre leal a la propuesta de legislaci¨®n europea¡±, a?adi¨® la misma fuente.

Ahora que existe un compromiso a nivel mundial para limitar la cantidad de emisiones de CO2 a la atm¨®sfera, la UE vuelve a tener la pelota en su tejado. Por el momento, la UE confirm¨® que, como ya hab¨ªa decidido en su momento, las compa?¨ªas a¨¦reas deber¨¢n pagar una tasa por las emisiones de sus vuelos dentro del espacio a¨¦reo europeo. Es decir, todos aquellos vuelos que despeguen y aterricen dentro de la Uni¨®n, estar¨¢n obligados a pagar una tasa por la contaminaci¨®n que produzcan. La clave, el siguiente paso, se encuentra ahora en la regulaci¨®n para los vuelos que, bien llegando a la UE como saliendo de ella, realizan parte de su trayecto fuera del espacio comunitario.

Cuando Bruselas puso en marcha la directiva en 2011, su aplicaci¨®n conllevaba que todos los vuelos que atravesaran la UE ten¨ªan que comprar derechos de emisi¨®n, aunque la UE fuera s¨®lo el origen o el destino. Lo que se plantea ahora el Ejecutivo comunitario es si impondr¨¢ una tasa a las compa?¨ªas por los vuelos que no tienen origen y destino en la territorio europeo, sino s¨®lo uno de los dos. El impuesto ser¨ªa posible s¨®lo por las emisiones en territorio europeo. ¡°No era justo cobrar a una compa?¨ªa a¨¦rea que realizaba un vuelo Madrid-Lima por las emisiones que tuviera en Per¨²¡±, destac¨® una fuente europea ayer en Bruselas. Por ello, la UE estudiar¨¢ si impone una tasa a las compa?¨ªas a¨¦reas por los gases que emitan mientras est¨¦n circulando por territorio europeo, aunque no todo el trayecto transcurra en el espacio comunitario. ¡°En un vuelo Madrid-Lima, la UE podr¨ªa cobrar una tasa a la compa?¨ªa correspondiente, por emisiones de CO2, hasta Madeira, que es donde acaba la soberan¨ªa a¨¦rea europea¡±, explic¨® la misma fuente del Ejecutivo comunitario ayer en Bruselas.