¡°La detecci¨®n de la dislexia es crucial: se puede resolver¡±
La ling¨¹ista ha ganado el premio de EuroScience a la mejor investigadora joven europea
Luz Rello, ling¨¹ista, suspendi¨® lengua y literatura hasta que alcanz¨® los 12 a?os. En otras asignaturas, como matem¨¢ticas o m¨²sica, le iba m¨¢s que bien, pero no hab¨ªa forma humana de aprobar todas. Se le resist¨ªan las materias cuyo estudio estaba estrechamente vinculado a la lectura y la escritura, y ella, por m¨¢s que se esforzaba, no entend¨ªa por qu¨¦. ¡°Cre¨ªa que era tonta¡±, dice. Hasta que una profesora se dio cuenta de que la ni?a era disl¨¦xica, comenz¨® a marcarle ejercicios durante los recreos y las malas notas se convirtieron en sobresalientes. Fue en esa ¨¦poca cuando esta madrile?a, que hoy tiene 29 a?os, se volvi¨® una apasionada del lenguaje y sus estructuras: ¡°De tanto trabajarlo, me enganch¨®¡±. Y ha acabado analizando este trastorno, que afecta al 10% de la poblaci¨®n, lo cual le ha valido el premio de la asociaci¨®n EuroScience a la mejor investigadora joven europea.
Rello es mileurista, trabaja ¡°unas 12 o 13 horas cada d¨ªa, incluyendo fines de semana¡±, y le faltan apenas unos meses para que finalice su beca de doctorado en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Despu¨¦s, el abismo: ¡°En las grandes compa?¨ªas, fuera de Espa?a, seguro que tendr¨ªa opciones, pero me gustar¨ªa quedarme aqu¨ª y dedicarme a la investigaci¨®n que ayude a personas. Me pondr¨¦ a buscar en instituciones privadas y p¨²blicas a ver si hay suerte¡±. Mientras, se centra en continuar su trabajo en dislexia, ¡°una dificultad de aprendizaje con origen neurol¨®gico que afecta a la lectura y a la escritura¡±.
La investigadora se entusiasma cuando habla. Tanto que se olvida de su caf¨¦ con leche y acaba tom¨¢ndolo fr¨ªo. Durante su doctorado ha analizado c¨®mo influye el dise?o y el contenido del texto en la comprensi¨®n y en la lectura desde ¡°todos los puntos de vista¡± que se le ocurrieron: longitud de las palabras, color, interlineado, espacio entre p¨¢rrafos... Los resultados obtenidos han sido incorporados en lectores de libros en formato digital que est¨¢n disponibles para Android y para IOS. ¡°Ha habido casi 35.000 descargas en todo el mundo¡±, cuenta.?
Adem¨¢s, en su tiempo libre, ella y dos amigas han ideado un juego llamado Piruletras. ¡°A ra¨ªz de analizar unas mil redacciones de ni?os, me di cuenta de que en sus errores hab¨ªa patrones ling¨¹¨ªsticos. E incorporamos 5.000 actividades que, seg¨²n hemos visto con los alumnos de primaria de un colegio en Catalu?a, est¨¢n haciendo que los ni?os mejoren en escritura. Ha habido 12.000 descargas¡±, explica.
Ella, que se licenci¨® en Ling¨¹¨ªstica, hizo un m¨¢ster de Procesamiento del Lenguaje y est¨¢ haciendo un doctorado en Inform¨¢tica, sigue necesitando que revisen sus textos cuando escribe. Asegura, no obstante, que no supone un impedimento en su desarrollo personal y profesional, y que la dislexia ¡°se puede superar¡±. Seg¨²n indica, ¡°algo tan sencillo¡± como que el primer d¨ªa de clase un pedagogo realice unos test a los alumnos para determinar qui¨¦nes tienen riesgo de tener este trastorno, ¡°como se hace en Finlandia¡±, puede marcar la diferencia. ¡°La detecci¨®n es crucial. Lo malo de estos ni?os es que suspenden durante a?os sin que nadie sepa por qu¨¦ ocurre¡±, relata. Rello reconoce que cuando era peque?a lo pas¨® muy mal y que cuando dej¨® de suspender decidi¨® ¡°no volver a hablar del asunto¡±. Fueron los ni?os con los que trabaja los que la empujaron, hace dos a?os, a volver a decir que era disl¨¦xica: ¡°Es la mejor forma de demostrarles que, con perseverancia, lo van a resolver¡±.
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