20.000 becarios menos

El curso 2012-2013 ¡ªel primero en el que se empez¨® a aplicar el endurecimiento de los requisitos acad¨¦micos que el a?o pasado impuso el Ministerio de Educaci¨®n para acceder a las becas¡ª, se cerr¨® con menos alumnos becados por el departamento de Jos¨¦ Ignacio Wert que el anterior. En total, el curso 2012-2013 hubo 19.584 perceptores menos de las becas de las convocatorias general, de movilidad, de colaboraci¨®n y de las destinadas para alumnos con necesidades especiales de todos los niveles educativos. Se pas¨® de 720.178 beneficiarios en el curso 2011-2012 a 700.594 el siguiente. Esta reducci¨®n supone un recorte del 2,7%. Supone tambi¨¦n el primer reconocimiento del ministerio, de forma oficial y con datos detallados por comunidades, de una ca¨ªda en las becas, ya que hasta ahora lo ¨²nico que hab¨ªa eran estimaciones y datos provisionales. Esta reducci¨®n confirma un importante cambio de tendencia: desde que la crisis se instal¨® en Espa?a el n¨²mero de alumnos becados se ha incrementando de forma sostenida a?o a a?o, una consecuencia l¨®gica del empobrecimiento de las familias.Ahora, ese camino se trunca.

Tras estos n¨²meros y porcentajes hay nombres, apellidos e historias. Como la de Raquel Gim¨¦nez, que estudia Filolog¨ªa Francesa en la Universidad de Murcia. Ella ten¨ªa que aprobar 12 de las 13 asignaturas, pero se ha quedado a media asignatura de mantener su beca de 4.000 euros. As¨ª que este curso esta alumna con casi un siete de media se ha matriculado en menos asignaturas para poder afrontar los 900 euros de tasas. Su madre no trabaja y su padre, apenas media jornada. Se ha dejado para el a?o que viene dos materias y el trabajo fin de carrera, que suponen otros 800. ¡°No pod¨ªa desembolsar tant¨ªsimo dinero¡±, argumenta. Gim¨¦nez vive a 50 kil¨®metros de la ciudad de Murcia y dedica m¨¢s de dos horas diarias en su desplazamiento en autob¨²s. ¡°Antes viv¨ªa en la ciudad, pero ahora no me lo puedo permitir¡±. Su sue?o es hacer el m¨¢ster de profesorado de secundaria, pero los 2.000 euros que cuesta lo convierten en ¡°una utop¨ªa¡±. Por lo pronto, el a?o que viene tampoco tendr¨¢ beca porque no se matricular¨¢ en los cr¨¦ditos m¨ªnimos. ¡°Deber¨ªan de existir las medias becas¡±, propone esta alumna afectada por los recortes.

Los responsables universitarios y de algunas comunidades aut¨®nomas llevan m¨¢s de un a?o alertando del efecto negativo que podr¨ªan tener los nuevos requisitos acad¨¦micos que aprob¨® el ministerio para acceder a las becas. El 18 de noviembre, el Gobierno de Mariano Rajoy remiti¨® un escrito al Congreso de los Diputados en el que se comparaba por comunidades el n¨²mero de becarios de 2011 y 2012 en la mayor¨ªa de las ayudas que comprenden las becas generales. Fue en respuesta a una pregunta del diputado socialista Miguel ?ngel Heredia, que se queja de que ha necesitado presentar 26 iniciativas para que el ministerio facilite los datos. Y lamenta: ¡°est¨¢n incompletos¡±. Faltan algunas becas como las Erasmus, las S¨¦neca o las rebajas en las tasas de las que se benefician los alumnos de familias numerosas.

Pero los datos que ha proporcionado el ministerio sirven para apreciar ya una reducci¨®n de becarios en el primer a?o de implantaci¨®n de los nuevos requisitos acad¨¦micos. Las ense?anzas universitarias son las m¨¢s afectadas en t¨¦rminos porcentuales. En el periodo analizado, se produjo una bajada de 8.812 becados, lo que supone un 2,9% de ca¨ªda. Julia de la Fuente, vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Sevilla, apunta directamente a los nuevos requisitos. Por ejemplo, en su campus ¡ªel que m¨¢s alumnos con beca tiene de todo el pa¨ªs¡ª 500 chicos de nuevo ingreso se quedaron sin ayuda por no llegar al 5,5 exigido, medio punto m¨¢s que lo requerido en el curso 2011-2012. De la Fuente critica que a los alumnos con menos recursos econ¨®micos ¡°se les exija un esfuerzo adicional¡±, ya que aquellos que provienen de familias sin problemas pueden estudiar aunque tenga solo un 5 de nota media.

Los requisitos acad¨¦micos tambi¨¦n cambiaron en los niveles no universitarios. Por ejemplo, para la beca compensatoria se exigi¨® a los alumnos de nuevo ingreso en Bachillerato y grados superiores de FP una nota media del 5,5, algo que no exist¨ªa hasta entonces. Los datos facilitados por el departamento de Wert apuntan a una reducci¨®n del 2,58% del n¨²mero de becarios en las ense?anzas no universitarias. Se pas¨® de 416.834 en el curso 2011-2012 a los 406.062 al siguiente a?o, lo que supone una reducci¨®n de 10.772 perceptores.

Por comunidades aut¨®nomas, la m¨¢s afectada en t¨¦rminos porcentuales fue Castilla y Le¨®n, con una ca¨ªda del 5,8%, lo que implica una rebaja de m¨¢s del doble de la media. En una horquilla de reducciones similares est¨¢n otras autonom¨ªas como Canarias (5,1%) y Baleares (4,7%).

Sin embargo, tambi¨¦n hay comunidades que incrementaron el n¨²mero de becados por el ministerio en el mismo periodo. En Navarra, por ejemplo, hubo 184 beneficiarios m¨¢s, lo que supone un 3,6% de incremento. En Catalu?a tambi¨¦n: hubo 1.946 alumnos m¨¢s con ayuda, lo que implica una subida del 2,5%.

Pero estos incrementos no fueron suficientes para compensar las ca¨ªdas en algunas de las comunidades m¨¢s pobladas. Andaluc¨ªa, donde estudia el 25% de los chicos con beca del pa¨ªs, perdi¨® 10.253 perceptores, lo que implica una reducci¨®n del 5,3%. Ocurre algo similar con Valencia, que perdi¨® 5.010 becados, lo que sit¨²a su descenso en el 5,3%.

La ca¨ªda general del 2,7% apunta a un cambio de tendencia. Entre el curso 2008-2009, cuando arranc¨® la crisis, y el 2011-2012, antes de que cambiaran los requisitos acad¨¦micos, el n¨²mero de becados con cualquier tipo de ayuda ministerial se increment¨® en casi medio mill¨®n de personas.

Hace cinco a?os, hab¨ªa en Espa?a 1.388.575 perceptores tanto en los niveles universitarios como en los no universitarios. En el curso 2011-2012, hab¨ªan subido hasta los 1.867.231, lo que implica un incremento del 34,4%. En estos datos, que s¨ª est¨¢n colgados en la web del ministerio, se incluyen todas las f¨®rmulas de ayudas y becas del Gobierno central.