¡°No va a ser en absoluto una barra libre¡±

La sanidad privada espa?ola, con buena fama en el exterior y unos costes bastante m¨¢s ajustados que en otros pa¨ªses europeos, puede ser la gran beneficiada de la directiva que permite la libre circulaci¨®n de pacientes. Cristina Contel, presidenta de la Federaci¨®n Nacional de Cl¨ªnicas Privadas (FNCP) cree que supone ¡°abrir la puerta¡± a las entidades privadas de salud, porque las sit¨²a en igualdad de condiciones con las p¨²blicas. Eso, a su vez, significa que las cl¨ªnicas podr¨¢n ¡°apostar por la captaci¨®n de pacientes¡± procedentes de la UE.

Pregunta. ?Cu¨¢ntos pacientes del resto de Europa calculan que podr¨¢n atraer a las cl¨ªnicas?

Respuesta. Es dif¨ªcil responder, en la medida en que ello depender¨¢ de c¨®mo cada Estado miembro llegue a trasponer a su legislaci¨®n interna la directiva. No creemos que vaya a ser un n¨²mero muy significativo. Todos los pa¨ªses van poniendo barreras, cortapisas, como la autorizaci¨®n previa para evitar que sea elevado. No va a ser en absoluto una barra libre; no es la voluntad de ninguno de los pa¨ªses.

P. ?Est¨¢n las cl¨ªnicas privadas espa?olas bien situadas en el mercado del turismo sanitario? ?Qu¨¦ ofrecen?

R. Gozan de gran reconocimiento internacional tanto por sus prestigiosos profesionales como por la calidad, equipamiento, seguridad y excelencia de sus centros. A ello se suman otros factores como el gran potencial de atracci¨®n tur¨ªstica, cultural, climatol¨®gica y de otros servicios que ofrece Espa?a.

P. ?Qu¨¦ tarifas cobrar¨¢n las cl¨ªnicas privadas, las mismas que la p¨²blica (precios p¨²blicos)?

R. Las cl¨ªnicas privadas aplicar¨¢n las tarifas que previamente tengan publicadas (condici¨®n imprescindible para el conocimiento de los pacientes y su elecci¨®n). Y ser¨¢n las que estimen convenientes. El mercado acabar¨¢ regulando las tarifas. Las nuestras en algunos casos son m¨¢s bajas que las de los precios p¨²blicos.

P. ?Est¨¢ ya bien establecido el procedimiento de autorizaci¨®n previa, de cobro y de reembolso?

R. A¨²n no est¨¢ regulado. Falta mucha reglamentaci¨®n todav¨ªa. Hay grandes lagunas. El procedimiento de autorizaci¨®n previa requiere en nuestra opini¨®n un desarrollo exhaustivo para saber realmente a qu¨¦ deber¨¢ atenerse el paciente, el centro provisor de servicios y sobre todo, qu¨¦ criterios usar¨¢n las comunidades aut¨®nomas para conceder o denegar los permisos. En cuanto al reembolso, tambi¨¦n falta concreci¨®n. A¨²n no se sabe bien qu¨¦ entra y qu¨¦ no entra, y, por ejemplo, mientras Bruselas habla de cubrir los gastos conexos (alojamiento y transporte), el proyecto de real decreto no los toma en consideraci¨®n. A¨²n no tenemos el texto definitivo del real decreto.

P. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece el hecho de que un espa?ol tenga derecho al reembolso de una cl¨ªnica privada europea, pero no de un hospital privado espa?ol?

R. Es una paradoja. Pero una cosa es pol¨ªtica comunitaria y otra pol¨ªtica interna. La Comisi¨®n Europea dif¨ªcilmente podr¨ªa entrar a intentar modificar ning¨²n criterio de un sistema nacional de salud. En mi opini¨®n, y si realmente nos creemos lo que reiteradamente se manifiesta de que ¡°el paciente es el centro o eje del sistema de salud¡±, los recursos deber¨ªan seguir al paciente. Este, en ejercicio de su libertad, deber¨ªa poder dirigirse al profesional o centro privado o p¨²blico de su elecci¨®n y el Estado cubrir la parte que le corresponda con la misma cobertura.