¡°Dudo que se haga justicia con las v¨ªctimas¡±
Los abusos sexuales cometidos por el exsacerdote Fernando Karadima (Antofagasta, 1930) causaron impacto en la sociedad chilena cuando se conocieron, en 2010 y, sobre todo, entre las ¨¦lites: el cura era p¨¢rroco de la Iglesia Sagrado Coraz¨®n de El Bosque, un templo poderoso y tradicional visitado por empresarios, pol¨ªticos y chilenos de una de las zonas acomodadas de Santiago.
Un grupo de feligreses destap¨® el caso: Jos¨¦ Murillo, James Hamilton, Fernando Batlle y Juan Carlos Cruz, que aplaude el informe de Naciones Unidas sobre pederastia en el clero: "Finalmente una organizaci¨®n importante le dice unas cuantas verdades a la Iglesia sobre algo que siempre han querido esconder".
El caso Karadima no ha dejado de estar en la agenda noticiosa chilena desde hace cuatro a?os, sobre todo por el incansable trabajo de las v¨ªctimas. Fue un esc¨¢ndalo que dividi¨® a los sacerdotes y que, de paso, dej¨® en entredicho a la justicia local: la investigaci¨®n estaba archivada en los tribunales civiles cuando, en 2011, se conoci¨® el proceso can¨®nico, que lo declar¨® culpable de abusos sexuales contra menores con violencia y abuso de autoridad.
Cruz y el resto de los afectados, sin embargo, no est¨¢ conforme: "Karadima fue condenado por el Vaticano, pero no est¨¢ cumpliendo la sentencia impuesta". El periodista radicado en Filadelfia (Estados Unidos) se?ala que en Chile se han publicado fotograf¨ªas del exreligioso ofreciendo misas p¨²blicas en el convento donde reside y que esa actividad "est¨¢ expresamente prohibida por la sentencia Vaticana". "Pero el Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, lo permite. Es una verdadera bofetada a los que han sufrido mucho".
La pesadilla de Juan Carlos Cruz comenz¨® a los 16 a?os cuando, reci¨¦n fallecido su padre, se acerc¨® a la parroquia El Bosque. Estaba desvalido y el cura Fernando lo nombr¨® r¨¢pidamente su secretario personal. Se aprovech¨® de su vulnerabilidad y abus¨® del adolescente, incluso mientras lo confesaba. El afectado recuerda que durante a?os el grupo de v¨ªctimas lo denunci¨® ante el cardenal Francisco Javier Err¨¢zuriz, que no hizo nada hasta que la presi¨®n p¨²blica lo oblig¨® a llevar el caso a Roma. "Fue un hombre negligente que hoy es parte del comit¨¦ de reforma de la Curia del papa. Otra bofetada a tantos que sufrieron por su negligencia y encubrimiento de muchos sacerdotes", acusa.
No tiene grandes esperanzas: "Al paso que vamos, dudo que se haga justicia con las v¨ªctimas". Relata que ten¨ªa muchas expectativas puestas en el nuevo Papa, "pero sus acciones no reflejan lo que dicen". No solamente se refiere a la nominaci¨®n de Err¨¢zuriz como su asesor, sino a la decisi¨®n de Francisco de nominar a Ezzati como cardenal en enero pasado: "Son acciones que nos duelen a miles de chilenos y en especial a todas las v¨ªctimas que no escucharon para encubrir a sacerdotes que violaron y destrozaron la vida de tantos".
Cruz afirma que "la impotencia que reina es tremenda". Y a?ade: "Cre¨ª que este Papa se lo tomar¨ªa en serio. Sus acciones, en especial con estos dos obispos, me dicen que no".
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