El Constitucional anula el despido de una agente del CNI por discriminaci¨®n

El hecho de que los documentos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) sean secretos, no puede servir para no justificar el despido de una de sus agentes. Y mucho menos cuando est¨¢ embarazada. As¨ª lo ha decidido el Tribunal Constitucional que ha dado amparo a una trabajadora del centro contra su cese, que ese organismo no justific¨®. El principal ¨®rgano del espionaje espa?ol solo manifest¨® en el proceso que se recibieron informes internos sobre su ¡°inidoneidad¡± para el puesto de esa trabajadora, pero se neg¨® a aportarlos.

El alto tribunal considera que la agente aport¨® al tribunal indicios suficientes para despertar la sospecha de que, en realidad, no fue destituida por no ser id¨®nea para su puesto en el CNI, sino por su condici¨®n de mujer y por el hecho de haberse quedado embarazada. La trabajadora, que hab¨ªa ingresado en el centro en 2004 ten¨ªa que ser confirmada en su puesto o cesada a los seis a?os de haber ingresado, es decir, antes del final de 2010.

El tribunal dice que los servicios de inteligencia no justificaron el despido

Durante el tiempo que trabaj¨® como agente, todas las valoraciones sobre su trabajo, realizadas a los seis, 12 y 20 meses desde su ingreso, reconoc¨ªan que era satisfactorio. La mujer tambi¨¦n record¨® que los informes anuales de sus superiores inmediatos fueron positivos y que nunca fue amonestada o sancionada. La confianza que el organismo deposit¨® en ella se demostraba por el puesto en el exterior al que fue destinada, as¨ª como su designaci¨®n en dos ocasiones como jefa de equipo. A finales de 2010 tom¨® posesi¨®n de un puesto de libre designaci¨®n en el CNI.

Tras quedarse embarazada de su segundo hijo en marzo de 2010, sus superiores le comunicaron que su integraci¨®n definitiva en el centro se aplazaba por un per¨ªodo m¨¢ximo de seis meses y que iban a pedir un nuevo informe sobre su idoneidad para decidir si se convert¨ªa en fija. Ese informe, que result¨® negativo, fue el que motiv¨® su cese. ¡°La demandante aport¨® indicios que razonablemente apuntan a la existencia de un m¨®vil discriminatorio¡±, explican los magistrados tras relatar todas las alegaciones de la trabajadora despedida.

Frente a eso, el Abogado del Estado (y por tanto del CNI) se limit¨® a presentar al tribunal un formulario de cese en el que se la declaraba ¡°inid¨®nea¡± para su cargo sin explicar por qu¨¦ ni aportar una raz¨®n objetiva del cese. La administraci¨®n solo afirm¨® que se basaba en dos informes del centro que en ning¨²n momento se aportaron al proceso porque, seg¨²n el organismo eran ¡°secretos¡±.

Por ello, los magistrados concluyen que no existe ning¨²n elemento aportado por la administraci¨®n que desvirt¨²e las sospechas de discriminaci¨®n acreditadas por la trabajadora despedida. ¡°Llegados a este punto debemos entender que se ha producido la discriminaci¨®n aducida por la demandante¡±, concluye la sentencia. El CNI, seg¨²n el tribunal, ¡°pod¨ªa haber concretado motivadamente una suficiente explicaci¨®n que permitiera conocer aquellos hechos o aspectos negativos del desempe?o de sus funciones¡± para explicar que no se convirtiera en personal fijo. Por esa raz¨®n, el tribunal anula su despido al considerarlo discriminatorio.

Fuentes del CNI negaron que la raz¨®n del despido de su agente fuera su embarazo e insisten en que contaba con varios informes negativos. Esas mismas fuentes aseguran que est¨¢n trabajando para explicar las razones de su salida del centro sin vulnerar la ley del CNI que obliga a ese organismo a mantener secretos sus documentos.