China busca el apoyo de Pe?a Nieto para construir junto a Cabo Pulmo
La construcci¨®n de un complejo tur¨ªstico que colinda con un parque nacional protegido enciende las alarmas en Baja California Sur
Los inversionistas chinos que planean la construcci¨®n del mega proyecto tur¨ªstico Cabo Dorado en el sur de la Pen¨ªnsula de Baja California se han acercado al presidente mexicano, Enrique Pe?a Nieto, para pedirle que respalde el controvertido plan para construir un complejo hotelero de 22.500 habitaciones en un conjunto de terrenos que colindan con el Parque Nacional Cabo Pulmo (estado de Baja California Sur, noreste de M¨¦xico).
Los representantes legales de la compa?¨ªa La Rivera Desarrollos BCS ¡ªuna asociaci¨®n de la empresa china Beijing Sansong y la estadounidense Glorious Earth Group¡ª enviaron el pasado 12 de marzo una carta al mandatario donde le informan sobre el proyecto, que organizaciones ambientales y habitantes de la regi¨®n han rechazado, y le piden ¡°su apoyo para llevar a buen ¨¦xito el proyecto Cabo Dorado¡±. La carta hace ¨¦nfasis en la importancia del proyecto para la relaci¨®n bilateral entre M¨¦xico y China y fue entregada a Pe?a Nieto y a seis secretarios de Estado.
Adem¨¢s de la misiva ¡ªde la que tiene copia EL PA?S¡ª existen una relaci¨®n de comunicaciones dentro de la Secretar¨ªa de Econom¨ªa que desvelan un importante inter¨¦s por parte del Gobierno mexicano para que la empresa china invierta en el proyecto, a pesar de que la Secretar¨ªa del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a¨²n no ha decidido si permite que el complejo tur¨ªstico sea construido por su impacto ambiental en la regi¨®n. Seg¨²n un memor¨¢ndum, antes de que la compa?¨ªa china enviara la carta al presidente mexicano, representantes de ambos pa¨ªses se reunieron el 20 de enero en Pek¨ªn para discutir el tema.
La insistencia de los inversionistas chinos inyecta presi¨®n a las autoridades mexicanas que se enfrentan a la oposici¨®n de la poblaci¨®n local
Ante la petici¨®n de apoyo a Pe?a Nieto, la Secretar¨ªa de Econom¨ªa pidi¨® a su divisi¨®n ProM¨¦xico ¡ªun ¨¢rea encargada de promover la inversi¨®n extranjera en M¨¦xico¡ª que evaluara los beneficios del proyecto que promete una inversi¨®n de 3.600 millones de d¨®lares, 18.000 empleos y el potencial tur¨ªstico de China que cuenta con 110 millones de viajeros al a?o. ProM¨¦xico recomend¨® el pasado 2 de abril la construcci¨®n del complejo tur¨ªstico. La misma oficina perteneciente a la Secretar¨ªa de Econom¨ªa desvela en sus comunicaciones el inter¨¦s del expresidente mexicano Vicente Fox para invertir en conjunto con la alianza chino-estadounidense. EL PA?S ha intentado sin ¨¦xito obtener la versi¨®n de Presidencia de M¨¦xico y de la Semarnat.
El proyecto tur¨ªstico ha sido promovido por el gobierno chino como un aspecto importante para impulsar y mejorar las relaciones comerciales entre M¨¦xico y China. La insistencia de los inversionistas chinos inyecta presi¨®n a las autoridades mexicanas que al mismo tiempo se enfrentan a una fuerte oposici¨®n de la poblaci¨®n local y de organizaciones medioambientales que han organizado una campa?a internacional para impedir que el gobierno autorice su construcci¨®n.
La soledad de Cabo Pulmo
Dos buitres de cabeza roja merodean en c¨ªrculos las playas de Cabo Pulmo, por unos instantes se posan en la valla que rodea uno de los tres terrenos donde se ha planeado la construcci¨®n del mega proyecto tur¨ªstico Cabo Dorado ¡ªunos nueve hoteles y 6.141 villas residenciales¡ª. Hasta ahora, all¨ª no hay m¨¢s que cientos de cactus y plantas regionales del desierto del norte de M¨¦xico, una caseta de vigilancia, una sencilla carretera y la valla. La quietud del sitio contrasta con la controversia que ha provocado el planteamiento del proyecto que cambiar¨ªa radicalmente el aspecto de la zona y la vida de los habitantes del extremo sur de la Pen¨ªnsula de Baja California.
El proyecto Cabo Dorado fue presentado en marzo ante la Semarnat por parte de la empresa La Ribera Desarrollos BCS para buscar la autorizaci¨®n para construir el complejo hotelero en un terreno de 3.770 hect¨¢reas, que adem¨¢s contar¨ªa con dos campos de golf, una aeropista, una planta de tratamiento de aguas residuales, un campus universitario y un centro deportivo de alto rendimiento. Este plan es muy similar al que en 2008 propuso la empresa Hansa Baja Investments ¡ªantigua propietaria de los terrenos¡ª para construir otro complejo llamado Cabo Cort¨¦s pero que fue suspendido en 2012 por el expresidente Felipe Calder¨®n, ante la presi¨®n y las protestas de las organizaciones y habitantes que se opusieron al proyecto.
Los predios donde se planea la construcci¨®n de todo el plan colindan con el Parque Nacional Cabo Pulmo, una zona protegida desde 1995 donde se encuentra el arrecife m¨¢s antiguo (25.000 a?os) y vasto del Oc¨¦ano Pac¨ªfico (7.000 hect¨¢reas). Sin embargo, la protecci¨®n medioambiental otorgada por el gobierno mexicano a la zona solo ampara la superficie mar¨ªtima por lo que el ¨¢rea de construcci¨®n m¨¢s cercana estar¨ªa a solo 7,5 kil¨®metros del arrecife de coral. Ante la exposici¨®n del proyecto, habitantes de comunidades cercanas a Cabo Pulmo, investigadores y ONG's medioambientales han comenzado una campa?a para impedir la construcci¨®n de un complejo que, aseguran, traer¨ªa importantes desequilibrios al ecosistema como da?o al arrecife y escasez de agua dulce en la zona.
El complejo crear¨ªa inevitablemente un n¨²cleo de poblaci¨®n de unos 440.000 habitantes que superar¨ªa la capacidad de abastecimiento de agua?
¡°Propiedad privada. Vigilancia 24 horas. No traspasar¡±, se lee en letreros pegados a la valla que protege el inmenso terreno de lo que podr¨ªa ser Cabo Dorado. A lo largo de varios kil¨®metros de la fr¨¢gil carretera que conduce a Cabo Pulmo, puede verse el Mar de Cort¨¦s a trav¨¦s de la reja de metal que cerca ambos lados del camino. Una improvisada aeropista ha sido construida en una parte del terreno y aguarda la llegada de los inversionistas. Letreros del gobierno federal prometen la reparaci¨®n de la carretera en sus 65 kil¨®metros de longitud.
Al final del camino est¨¢ la comunidad de Cabo Pulmo, un centenar de mexicanos y otro tanto igual de extranjeros que se han asentado en un terreno que colinda con el ¨¢rea protegida. Antes de que el gobierno delimitara el Parque Nacional, hace 18 a?os, era un pueblo de pescadores que tras el decreto dejaron las redes para establecer una peque?a zona de ecoturismo. Sentado en una banca est¨¢ Juan Castro, de 69 a?os. Siempre ha vivido en Cabo Pulmo, era pescador y hace casi 20 a?os vio c¨®mo su familia transform¨® su forma de vivir. Dice que un cambio tan radical en la zona, como propone el proyecto Cabo Dorado, no lo soportar¨ªa su familia. ¡°Esto va a ser terrible¡±, dice tajantemente. Su hija Judith Castro ha encabezado la oposici¨®n al proyecto como presidenta de la Asociaci¨®n Amigos para la Conservaci¨®n de Cabo Pulmo.
Judith Castro y al menos un centenar de vecinos de Cabo Pulmo y otros municipios se reunieron la semana pasada con funcionarios de la Semarnat y algunos representantes de la compa?¨ªa para dar a conocer sus puntos de vista respecto a la Manifestaci¨®n de Impacto Ambiental (MIA) la evaluaci¨®n de la empresa constructora sobre las consecuencias ambientales que conlleva el complejo tur¨ªstico. ¡°Si aprueba el proyecto tal como est¨¢ ser¨ªa letal para el medio ambiente y tambi¨¦n para la econom¨ªa local. ?Por qu¨¦ se necesitan 18.000 empleos en una zona d¨®nde no superamos los 4.000 habitantes?¡±, expres¨® Castro en la reuni¨®n. El delegado de la Semarnat en Baja California Sur, Jos¨¦ Carlos Cota, ha explicado que la instituci¨®n se encuentra evaluando la petici¨®n de la compa?¨ªa china y que en los pr¨®ximos meses dar¨¢ a conocer un posicionamiento sobre el tema.
Los grupos que se oponen al proyecto tur¨ªstico se?alan que su instalaci¨®n crear¨ªa inevitablemente un n¨²cleo de poblaci¨®n de unos 440.000 habitantes que superar¨ªa la capacidad de abastecimiento de agua de la regi¨®n. El municipio de Los Cabos no cuenta con un relleno sanitario por lo que la descarga de desechos s¨®lidos del complejo (unas 70 toneladas de basura) podr¨ªa ser en tiraderos al aire libre. A prop¨®sito de la evaluaci¨®n del proyecto, la Uni¨®n de Cient¨ªficos Comprometidos con la Sociedad estima que estar¨ªan en riesgo 78 especies animales protegidas y dos especies de plantas podr¨ªan desaparecer (la zona recibe la migraci¨®n temporal de ballenas y tortugas). Su estudio se?ala que las condiciones de las cuencas h¨ªdricas cercana a Cabo Pulmo son cr¨ªticas y que en Baja California Sur han aumentado un 30% las zonas secas en los ¨²ltimos a?os. ¡°Las condiciones de sequ¨ªa han sido calificadas entre severas y extremadamente severas¡±, expone el documento.
Estar¨ªan en riesgo 78 especies animales protegidas y dos especies de plantas que podr¨ªan desaparecer
La preocupaci¨®n en torno al arrecife de coral de Cabo Pulmo se concentra en el uso de agroqu¨ªmicos necesarios para sostener los dos campos de golf que se instalar¨ªan en el complejo tur¨ªstico. Estas sustancias se filtrar¨ªan al subsuelo y podr¨ªan enfermar al coral, aseguran los investigadores en su estudio. Los bi¨®logos de la Uni¨®n de Cient¨ªficos Comprometidos con la Sociedad han estimado que si alg¨²n residuo llegase al mar, las corrientes mar¨ªtimas de la zona- que corren de norte a sur- llevar¨ªan inevitablemente los desechos al arrecife. La compa?¨ªa ha prometido que no depositar¨¢ desechos en el mar, pero que no podr¨¢ evitar el crecimiento alrededor del complejo tur¨ªstico. ¡°No podemos evitar que los due?os de los terrenos en la regi¨®n hagan uso leg¨ªtimo de su propiedad¡±, se?al¨® Ra¨²l Arriaga, consultor ambiental de la empresa y antiguo funcionario de la Semarnat en el gobierno del expresidente Vicente Fox que enfrent¨® en 2004 denuncias por la importaci¨®n ilegal de 33 delfines.
Lejos de la costa, en la Sierra Laguna ¡ªque atraviesa el sur de la Pen¨ªnsula de Baja California¡ª Rogelio Rosas gu¨ªa a un grupo de estudiantes a trav¨¦s del desierto para llegar a las pozas donde se capta el agua que nutre los mantos acu¨ªferos que dan agua a la regi¨®n. Los cientos de cactus, rocas y arena hacen dif¨ªcil creer que entre los cerros se escondan yacimientos de agua dulce suficientes para nutrir centros tur¨ªsticos como San Jos¨¦ del Cabo y Cabo San Lucas. El proyecto de Cabo Dorado plantea tambi¨¦n alimentarse del agua que nace en esta zona. Rosas es representante de los rancheros de la sierra y est¨¢ preocupado por el impacto que la construcci¨®n del proyecto tendr¨¢ en otras comunidades. ¡°Los productores van a dejar de darle agua a sus huertas y la van a destinar a este desarrollo tur¨ªstico¡±, explica. Las estimaciones para Cabo Dorado es que mediante tres pozos, unos 4,8 millones de metros c¨²bicos, se nutra al grupo de hoteles e instalaciones y a¨²n haya agua para el resto de comunidades. Pero Rosas asegura que en la des¨¦rtica Baja California cada vez llueve menos.
El temor de los habitantes de la zona y los ambientalistas est¨¢ en el reflejo de La Ribera, una comunidad a 10 kil¨®metros de Cabo Pulmo, donde un gran complejo tur¨ªstico ha quedado a la mitad de su construcci¨®n. Hace un a?o, los trabajos se detuvieron por falta de financiamiento pero la construcci¨®n avanz¨® lo suficiente para edificar un muelle de yates que cambi¨® el aspecto y las corrientes marinas m¨¢s cercanas. ¡°No somos ricos pero vivimos bien y tranquilos. No necesitamos que vengan a ¡ªseg¨²n¡ª mejorar la forma en la que vivimos¡±, explica Reyna Macklis, habitante de La Ribera. La playa all¨ª est¨¢ desierta y un par de guardias cuida el terreno abandonado. Los trabajos prometidos no han llegado y algunos terrenos cercanos ya tienen letreros en ingl¨¦s de venta, s¨®lo un par de extranjeros pasan en moto sobre la arena.
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