Espa?a vigila puertos y aeropuertos aunque el riesgo de ¨¦bola es ¡°muy bajo¡±

¡°La probabilidad de que entre en Espa?a un caso sospechoso de ?bola es muy, muy peque?a¡±, afirma Fernando Sim¨®n, director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad. Sin embargo, dado que ¡°nunca se puede garantizar el riesgo cero¡±, el Gobierno vigila las posibles puertas de entrada de un virus cuyo ¨²ltimo brote ha causado la muerte a 467 personas en Guinea, Liberia y Sierra Leona. Hay protocolos espec¨ªficos en puertos, aeropuertos y fronteras y los centros sanitarios tienen instrucciones sobre c¨®mo proceder ante un posible caso. De momento, solo se ha activado el protocolo por sospecha de ?bola una vez, en Valencia, a finales de junio. Seg¨²n el Centro Europeo para la Prevenci¨®n y Control de Enfermedades (ECDC), es el ¨²nico caso sospechoso registrado en toda Europa.

El contacto con los tres pa¨ªses afectados es escaso. No hay vuelos directos a Espa?a, aunque s¨ª existen desde Guinea Conakry a Par¨ªs y Bruselas, y una compa?¨ªa marroqu¨ª vuela desde Guinea a Barcelona, Madrid y Valencia con parada en Casablanca. En uno de estos vuelos se detect¨® el caso sospechoso. Un pasajero se encontr¨® mal durante el trayecto, con tos, mareos, dificultad para respirar y sangrado por la nariz y en el esputo. La tripulaci¨®n dio el aviso y el personal de enfermer¨ªa del hospital de Manises hizo una primera valoraci¨®n. De all¨ª fue trasladado al hospital de La Fe, donde fue ingresado. Pese a que el primer diagn¨®stico fue de neumon¨ªa, se activ¨® el protocolo previsto: aislamiento, medidas de protecci¨®n (mascarilla, gafas protectoras) para el personal y env¨ªo de muestra de sangre al laboratorio de referencia, al Centro Nacional de Microbiolog¨ªa.

El de Valencia es el ¨²nico caso oficialmente sospechoso, en el que se han activado las pautas fijadas. Sin embargo, explica Sim¨®n, ha habido ¡°seis o siete¡± situaciones m¨¢s en las que personal sanitario ha tenido que ¡°valorar¡± si se encontraba frente a un caso de ?bola. Sucedi¨®, por ejemplo, en abril en el hospital Carlos III de Madrid. La llegada de un cooperante enfermo que hab¨ªa visitado Mal¨ª mes y medio antes gener¨® alarma en el centro, pero se descart¨® enseguida. Como recuerda Sim¨®n, el periodo de incubaci¨®n es de 2 a 21 d¨ªas. Si han transcurrido m¨¢s desde la exposici¨®n sin dar s¨ªntomas, no puede ser ?bola.

La vigilancia tambi¨¦n se extrema en los puertos. No hay rutas de pasajeros directas, pero s¨ª trayectos comerciales que llegan a ¡°seis o siete¡± puertos espa?oles, dice Sim¨®n. Por ejemplo, con productos de miner¨ªa. Sanidad ha dado instrucciones para que se les exija la Declaraci¨®n Mar¨ªtima de Sanidad, donde consta que no hay casos de enfermedad sospechosos entre la tripulaci¨®n, antes de conceder la libre pl¨¢tica (el permiso para entrar a puerto).

En las otras fronteras el control se centra en las entradas con veh¨ªculo y en la inmigraci¨®n ilegal. ¡°Hemos estado valorando los tiempos de llegada desde los pa¨ªses afectados, y en principio se tarda m¨¢s de 21 d¨ªas hasta los puntos de entrada¡±, dice Sim¨®n, que recuerda que se trata de ¡°una enfermedad muy llamativa que no se puede ocultar¡±.

]Con informaci¨®n de Jaime Prats