Menos j¨®venes en EE UU perciben a la marihuana como da?ina
Un estudio vincula el descenso a la legalizaci¨®n para uso recreativo en dos estados
La Casa Blanca contempla con nerviosismo el cambio de paradigma que se vive en Estados Unidos respecto al consumo de marihuana tras la legalizaci¨®n de su venta para uso recreativo en los estados de Colorado y Washington. En el informe anual de su estrategia contra el consumo de drogas, difundido este mi¨¦rcoles, la Administraci¨®n de Barack Obama considera que uno de los desaf¨ªos ¡°m¨¢s serios¡± es el descenso de la percepci¨®n da?ina de la marihuana entre los j¨®venes por la aprobaci¨®n de ambas iniciativas. La publicaci¨®n del documento llega precisamente un d¨ªa despu¨¦s de que entrara en vigor la nueva ley en Washington al abrir las primeras tiendas que venden esa sustancia. En Colorado la norma entr¨® en funcionamiento el pasado 1 de enero.
El experimento en Washington y Colorado es seguido muy de cerca por otros estados ¡ªuna veintena han regulado su uso m¨¦dico¡ª y por el Gobierno federal, que en agosto reiter¨® que el consumo y la venta de marihuana son ilegales bajo las leyes federales, aunque a finales de 2012 Obama hab¨ªa dicho que la persecuci¨®n no era un asunto prioritario para su Administraci¨®n. El informe subraya que el Departamento de Justicia supervisar¨¢ que se cumplan los l¨ªmites legales de comercializaci¨®n fijados por ambos estados ¡ªa partir de los 21 a?os los ciudadanos pueden adquirir inicialmente hasta 28 gramos de hierba¡ª y que la droga se mantenga alejada de menores, los restantes 48 estados en los que la venta es ilegal, carteles del narcotr¨¢fico e instancias federales, como edificios gubernamentales.
Los partidarios de la venta legal argumentan que contribuir¨¢ a hacer m¨¢s razonables las normas que penalizan el consumo ¡ªla Casa Blanca coincide en que la problem¨¢tica no se resuelve con un castigo excesivo sino con mayor prevenci¨®n¡ª y que supondr¨¢ un aumento de los ingresos fiscales. Mientras, los detractores alegan que puede disparar su uso y la inseguridad. Sin embargo, un estudio de la Universidad de Texas determin¨® en marzo que legalizar la sustancia ¡°no aumenta el n¨²mero de cr¨ªmenes e, incluso, reduce los homicidios¡±.
El informe anual de la Casa Blanca, que empez¨® a elaborarse en 2010, advierte, en concreto, del descenso de la percepci¨®n da?ina de la marihuana entre los estudiantes de 17 y 18 a?os, del incremento que esto genera en el consumo y de sus efectos en el terreno acad¨¦mico. Seg¨²n el documento, el 66% de los adolescentes con malas calificaciones en la escuela han fumado marihuana y si lo hacen de un modo masivo su coeficiente intelectual retrocede un 8%. Un reciente sondeo estim¨® que en 2012 un 7,3% de los estadounidenses consum¨ªa regularmente marihuana, frente al 7% de 2011 y el 5,8% de 2007.
El Gobierno Obama tiene previsto destinar el pr¨®ximo a?o 25.000 millones de d¨®lares (18.000 millones de euros) a su estrategia contra el uso de drogas, una cifra ligeramente superior a la de este a?o y que est¨¢ pendiente de la aprobaci¨®n del Congreso. El plan ¡ªcentrado en la mejora de la prevenci¨®n y de los tratamientos m¨¦dicos¡ª tambi¨¦n pone el foco en el incremento en los ¨²ltimos a?os del consumo de hero¨ªna y de analg¨¦sicos contra el dolor. La Administraci¨®n impulsar¨¢ nuevas iniciativas para combatir la producci¨®n, aumentar la concienciaci¨®n y evitar muertes. Por ejemplo, los servicios de emergencia tendr¨¢n mayor acceso a un medicamento que puede restaurar la respiraci¨®n a las personas que padecen una sobredosis de hero¨ªna.
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