El miedo al ¨¦bola alimenta la expansi¨®n del virus en ?frica
La poblaci¨®n ataca a los sanitarios y les culpa de propagar la enfermedad
La epidemia de ¨¦bola que afecta desde principios de a?o a ?frica occidental y que se ha cobrado ya al menos 672 v¨ªctimas mortales, tiene un peligroso efecto secundario: el miedo, que alimentado por la falta de informaci¨®n contribuye en buena medida a que el brote est¨¦ siendo tan dif¨ªcil de controlar. Ante una situaci¨®n que no mejora, sus s¨ªntomas van a peor: los m¨¢s recientes, un ataque a personal de M¨¦dicos sin Fronteras (MSF) o el cierre de fronteras de Liberia.
No es algo nuevo. El pasado mes de abril, un centro de MSF en Macenta, al sur de Guinea, fue atacado a pedradas por una multitud enfurecida. Hace unos d¨ªas, en el pueblo de Kolo Bengou, donde se cree que hay varias personas infectadas, un grupo de j¨®venes armados con piedras y cuchillos bloqueaba el paso al personal sanitario, seg¨²n informa The New York Times. ¡°Por todos los sitios que han pasado esas personas la comunidad se ha visto afectada por la enfermedad¡±, aseguraba uno de ellos, culpando del brote a quienes hab¨ªan acudido precisamente a socorrerlos.
En Sierra Leona, el segundo pa¨ªs en v¨ªctimas mortales tras Guinea, la situaci¨®n no es mucho mejor. El pasado fin de semana se produjeron disturbios frente al hospital de Kenema, despu¨¦s de que se corriera el rumor de que una enfermera hab¨ªa dicho que ¡°el ¨¦bola no existe y fue inventado para ocultar rituales can¨ªbales en los hospitales¡±. Tambi¨¦n en este pa¨ªs se ha conocido este fin de semana la muerte de Saudatu Koroma, la primera paciente que se infect¨® en la capital, Freetown, y que huy¨® del hospital en pleno tratamiento con la ayuda de su familia. Aqu¨ª, el m¨¦dico jefe responsable de la lucha contra la enfermedad, Umar Khan, est¨¢ en aislamiento tras haberse contagiado.
Por su parte, en Liberia, el tercer pa¨ªs afectado con intensidad por esta epidemia, que ya se ha convertido en la m¨¢s mort¨ªfera y de mayor amplitud de toda la historia, el Gobierno ha continuado con el cierre de fronteras que inici¨® el domingo. Salvo el aeropuerto, donde se han implementado medidas especiales de detecci¨®n de la enfermedad mediante la medici¨®n de la temperatura corporal y otros s¨ªntomas, pr¨¢cticamente todos los pasos fronterizos est¨¢n afectados por esta medida, pese a que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) desaconseja estas medidas fronterizas porque, asegura, son ineficaces en una enfermedad con un periodo de incubaci¨®n que puede ser de hasta 21 d¨ªas.
Una misionera y un m¨¦dico, los primeros enfermos occidentales
En Liberia la enfermedad se ha cobrado la vida de unos 15 trabajadores sanitarios, entre ellos la del conocido m¨¦dico Samuel Brisbane, hace unos d¨ªas, y la del ugand¨¦s San Mutooru Muhumuza, especializado en hacer frente a este mal. Precisamente en las ¨²ltimas horas se ha conocido que hay dos estadounidenses tambi¨¦n infectados por el ¨¦bola en este pa¨ªs. Se trata de la misionera Nancy Writebol y del m¨¦dico Kent Brantly, tambi¨¦n en cuarentena en la capital liberiana. Por primera vez, dos ciudadanos occidentales se ven afectados directamente por esta epidemia, lo que ha elevado la preocupaci¨®n fuera de ?frica.
Finalmente, Nigeria ha reaccionado con rapidez a la aparici¨®n de un primer caso en su territorio el martes de la semana pasada. Tras confirmarse que el liberiano Patrick Sawyer hab¨ªa muerto de ¨¦bola, el Gobierno ha decidido cerrar el hospital de Lagos donde fue ingresado y aislar al personal sanitario que estuvo en contacto con ¨¦l antes de su fallecimiento, as¨ª como a los que viajaron con ¨¦l desde Liberia hasta Lagos, con escala en Togo. La mayor aerol¨ªnea de Nigeria, Arik Air, ha decidido, por su parte, suspender todos sus vuelos a Liberia y Sierra Leona como medida de prevenci¨®n ante el ¨¦bola.
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