¡°En la ense?anza secundaria se profundizan las diferencias sociales¡±

Marco Antonio Zago (Birig¨¹i, S?o Paulo, 1946) asumi¨® a principios de a?o el tim¨®n de la Universidad de S?o Paulo (USP), considerada por diferentes organismos la mejor de Brasil y una de las primeras de Latinoam¨¦rica. En un encuentro con periodistas este lunes, durante la III Cumbre Internacional de Rectores celebrada en R¨ªo de Janeiro, subray¨® uno de los principales objetivos de su mandato: conseguir que en 2017, el 50% de los alumnos que accedan a la USP provengan de escuelas p¨²blicas.

Pregunta. En Brasil han proliferado las universidades privadas, que representan aproximadamente el 70% del total. ?Es posible compatibilizar la calidad de la educaci¨®n con la gratuidad?

Respuesta. S¨ª, perfectamente. La USP est¨¢ reconocida internacionalmente como una de las de mejor calidad en Brasil y probablemente en Latinoam¨¦rica, y es gratuita. Para que una universidad ofrezca calidad no es necesario que sea privada. Suele suceder al contrario.

P. ?No cree que se deber¨ªa invertir en Brasil este reparto p¨²blico-privado y que las p¨²blicas pasaran a ser la mayor¨ªa?

Nadie decidi¨® que Brasil tendr¨ªa el 70% de ense?anza privada y el 30% de p¨²blica"

R. No estamos ante un reparto planificado. Nadie decidi¨® que Brasil tendr¨ªa el 70% de ense?anza privada y el 30% de p¨²blica. Es la consecuencia del crecimiento enorme de la poblaci¨®n joven y de una inclusi¨®n social que se ha acentuado en los ¨²ltimos a?os. Estos j¨®venes ten¨ªan que entrar en la universidad y el Gobierno no tuvo medios para expandir los centros p¨²blicos. Por tanto, las instituciones privadas encontraron un gran negocio. El Estado de S?o Paulo dedica a ciencia, tecnolog¨ªa y educaci¨®n m¨¢s de un 11% de los ingresos p¨²blicos.

P. ?Qu¨¦ le parece que los estudiantes con medios econ¨®micos suficientes paguen para estudiar en las universidades p¨²blicas?

R. Es una cuesti¨®n muy controvertida. Existen opiniones encontradas en diferentes pa¨ªses y en diferentes universidades. Hay quien entiende que hay que cobrarles a aquellos que pueden pagar. Y esto ser¨ªa efectivamente una medida de justicia social.

P. ?Cu¨¢l es la posici¨®n de la USP?

R. En este momento no es una prioridad. Somos una universidad p¨²blica y gratuita. En Brasil se trata de un tema constitucional, por tanto es in¨²til discutir este asunto ya que nuestra Constituci¨®n garantiza que las universidades p¨²blicas sean gratuitas.

P. Los brasile?os han protestado contra un sistema educativo deficiente. ?Cu¨¢l es su visi¨®n de la educaci¨®n primaria y secundaria en Brasil? ?Qu¨¦ asuntos no funcionan como deber¨ªan?

Este a?o hemos tenido un 32% de alumnos de escuelas p¨²blicas. Con nuestro sistema de selecci¨®n ya aplicamos una pol¨ªtica positiva de inclusi¨®n"

R. Los esfuerzos de este pa¨ªs deber¨ªan estar concentrados en la ense?anza primaria y secundaria porque hay datos que muestran que no estamos bien comparativamente a otros pa¨ªses del mundo. Esto lo vemos cuando los alumnos llegan a la universidad y normalmente no est¨¢n bien preparados. Es en la ense?anza secundaria cuando se profundizan las diferencias que continuar¨¢n durante el resto de la vida. Es en ese momento cuando las personas que vienen de familias m¨¢s pudientes tienen la oportunidad de tener una ense?anza de mejor calidad y se vuelven competitivas para el resto de su vida, mientras que los que vienen de familias menos acomodadas tienen que adaptarse a una ense?anza p¨²blica que, con sus excepciones, es menos competitiva. En la universidad estas diferencias son muy evidentes.

P. ?La pol¨ªtica de cuotas es una soluci¨®n para el problema?

R. Existe una confusi¨®n entre cuotas sociales y cuotas raciales. Si consideramos s¨®lo las cuotas sociales, la cuesti¨®n racial tambi¨¦n est¨¢ contemplada ya que en los estratos m¨¢s bajos de la poblaci¨®n predominan los negros. La USP aplica una pol¨ªtica de cuotas aunque no lo digamos abiertamente. Nunca hemos dicho que reservar¨ªamos el 50% de las plazas para estudiantes de la escuela p¨²blica, sino que esperamos que en 2017 el 50% de nuestros alumnos provengan del sistema p¨²blico. Este a?o hemos tenido un 32% de alumnos de escuelas p¨²blicas. Con nuestro sistema de selecci¨®n ya aplicamos una pol¨ªtica positiva de inclusi¨®n.

P. ?Estamos ante una generaci¨®n de alumnos extremadamente tecnol¨®gicos instruida por unos profesores conservadores y anal¨®gicos?

R. Este asunto representa la mayor herida de las universidades brasile?as. Necesitamos revisar la forma en la que nos relacionamos con nuestros alumnos y qu¨¦ tipo de vida universitaria queremos para ellos. En la USP queremos romper las actuales estructuras, demasiado r¨ªgidas, y generar otras nuevas para entrenar mejor a nuestros docentes. Durante muchos a?os las universidades no han premiado las actividades docentes innovadoras.