Tres meses de prisi¨®n para los responsables de ¡°la perrera de los horrores¡± de Puerto Real

M¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s de que la asociaci¨®n hom¨®nima El Refugio -no vinculada al centro de C¨¢diz- denunciase el horror que ocurr¨ªa en el interior de la perrera, la Secci¨®n Cuarta de la Audiencia ha condenado al due?o de la residencia, a la directora y a un veterinario a tres meses y 22 d¨ªas de prisi¨®n por un delito de maltrato animal. La sentencia, divulgada el pasado viernes, les inhabilita para el ejercicio de profesi¨®n, oficio o comercio que tenga relaci¨®n con los animales durante un a?o. La decisi¨®n judicial supone una victoria para la Fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular, porque estima sus recursos de apelaci¨®n y revoca la sentencia absolutoria que dict¨® en septiembre de 2017 en el Juzgado de lo Penal n¨²mero 4 de C¨¢diz. El due?o contin¨²a con la actividad en otras localidades del Campo de Gibraltar.

La Audiencia Provincial ha considerado probado que los tres condenados -Pl¨¢cido G.M., due?o; Manuela A., directora y Estanislao C., veterinario- emplearon el f¨¢rmaco Mioflex en sus eutanasias, pese a ser conscientes del da?o que ocasionaban a los animales. Les produc¨ªan ¡°una muerte lenta y ag¨®nica por asfixia, que en la mayor¨ªa de las ocasiones pod¨ªa durar varios minutos, durante los cuales el perro o el gato estaba absolutamente consciente hasta que mor¨ªa ya que afecta a los m¨²sculos respiratorios¡±, tal y como ha explicado la ONG El Refugio en un comunicado de reacci¨®n a la sentencia.

El fallo recoge que lo hac¨ªan para ¡°abaratar y simplificar las eutanasias¡±, que a?ade que los tres condenados conoc¨ªan ¡°que se produc¨ªa una muerte ag¨®nica e insufrible, cuando ello era evitable, pues con otros medicamentos pod¨ªa realizarse una eutanasia r¨¢pida con m¨ªnima molestia¡±. Fue lo que Nacho Paunero, presidente de la asociaci¨®n El Refugio, pudo contemplar con sus propios ojos en los primeros d¨ªas del verano de 2007 cuando, tras recibir varias denuncias ciudadanas, se desplaz¨® desde Madrid para descubrir lo que ocurr¨ªa en el interior de la perrera. A¨²n le cuesta olvidar lo que vio: ¡°De entrada, parec¨ªa el lugar ideal, pero no era as¨ª¡±.

Con la ayuda de una veterinaria voluntaria del centro que apoy¨® la denuncia, pudo demostrar la agon¨ªa de los animales, adem¨¢s de las condiciones de falta de limpieza y hacinamiento en las que se encontraban, como qued¨® reflejado en la instrucci¨®n posterior. En Andaluc¨ªa est¨¢ autorizado el sacrificio, pero el problema se produjo debido al m¨¦todo empleado. ¡°Si acogemos la definici¨®n legal de ensa?amiento como la gramatical, llegamos a la conclusi¨®n de que existi¨® ensa?amiento¡±, indica la sentencia de la Audiencia Provincial.

Paunero denunci¨® los hechos ante el Seprona de la Guardia Civil el 15 de junio de 2007. Un matrimonio de italianos que se sum¨® a la causa testific¨® en el juicio que dejaron a sus tres perros en la residencia un fin de semana. Cuando llegaron a recogerlos, uno ya estaba muerto y los otros dos desaparecidos. ¡°Se hac¨ªa pasar por una entidad ben¨¦fica, pero la realidad es que era un negocio en el que mataban r¨¢pidamente a los perros¡±, explica Paunero.

La jueza del Juzgado n¨²mero 2 de Puerto Real abri¨® un proceso penal contra los responsables del centro y declar¨® su cierre cautelar. ¡°Logramos que por primera vez en Espa?a se cerrara una perrera¡±, dice el responsable del Refugio que, en la actualidad, mantiene 100 procedimientos penales, civiles y administrativos en diversas comunidades. ¡°A¨²n hoy es algo que no suele ocurrir¡±, a?ade.

M¨¢s concesiones

El presidente de El Refugio cree que los perros de la pareja italiana son tres de los 556 que, del 1 de enero al 31 de agosto, fueron sacrificados con Mioflex, seg¨²n los c¨¢lculos que presentaron como pruebas. Sin embargo, la sentencia tan solo ha podido demostrar que el veterinario emple¨® este f¨¢rmaco de abril en adelante y en un n¨²mero no determinado de animales. Los jueces s¨ª han podido inculpar a los dos responsables de la residencia -due?o y directora- como part¨ªcipes, pese a no intervenir activamente en el maltrato: ¡°Ten¨ªan el dominio funcional de los hechos, ya que dados sus cargos y funciones no solo conoc¨ªan y consent¨ªan el uso del Mioflex, sino que pod¨ªan haber evitado su utilizaci¨®n¡±, concreta la sentencia.

¡°Estamos muy contentos porque es una sentencia valiente¡±, reconoce Paunero. De hecho, desde El Refugio piensan iniciar los tr¨¢mites para conseguir la inhabilitaci¨®n tan pronto como sea posible. Desde el Colegio de Veterinarios de C¨¢diz ya han informado de que, cuando eso suceda, har¨¢n efectiva la suspensi¨®n del profesional. Sin embargo, la sentencia puede tener m¨¢s consecuencias derivadas ya que Pl¨¢cido G.M. ha seguido en estos a?os haci¨¦ndose con concesiones de servicios municipales de recogidas de animales en la provincia de C¨¢diz.

Pl¨¢cido sigue apareciendo en portales de informaci¨®n empresarial como administrador ¨²nico de Control Zoosanitario, S.L. En estos a?os, la firma ha cerrado diversos contratos con Ayuntamientos del Campo de Gibraltar.

En el caso del Ayuntamiento de San Roque, la concesi¨®n se mantuvo activa durante cuatro a?os hasta la pasada primavera y el Consistorio no la renov¨®. En Algeciras, a¨²n se mantiene vigente. ¡°La empresa gan¨® el concurso y hace su trabajo¡±, especifican fuentes municipales. Ahora est¨¢ por ver si acaban tomando alguna medida. ¡°Nosotros, desde luego, nos pondremos en contacto con los Ayuntamientos para informarles de la inhabilitaci¨®n¡±, zanja Paunero.