Procesan al violador del ascensor por agredir sexualmente a dos mujeres
Pedro Luis Gallego, puesto en libertad en 2013 en aplicaci¨®n de la doctrina Parot, atac¨® presuntamente a dos mujeres en Madrid y trat¨® de hacer lo mismo con otras dos
Pedro Luis Gallego, conocido como el violador del ascensor y puesto en libertad en 2013 en aplicaci¨®n de la doctrina Parot, ha vuelto a las andadas. Un juez le ha procesado hoy por presuntamente agredir sexualmente a dos mujeres en Madrid y tratar de hacer lo mismo con otras dos, hechos por los que se encuentra en prisi¨®n provisional desde hace m¨¢s de un a?o.
En el auto de procesamiento, el titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 33 de Madrid, Tom¨¢s Mart¨ªn Gil, entiende que existen "indicios racionales de criminalidad" para imputarle los delitos de detenci¨®n ilegal, agresi¨®n sexual, lesiones, robo con violencia y contra la salud p¨²blica. De esta forma, Luis Gallego queda a las puertas del juicio, para el cual deber¨¢ depositar 300.000 euros como fianza y en caso de que no pueda hacerlo, el juzgado proceder¨¢ al embargo de sus bienes.
Pedro Luis Gallego fue condenado a 273 a?os de c¨¢rcel por el asesinato de Leticia Lebrato, de 17 a?os, en Valladolid, y de Marta Obreg¨®n, de 19, en Burgos, y por dieciocho agresiones sexuales. Qued¨® en libertad en noviembre de 2013 en aplicaci¨®n del fin de la doctrina Parot, pero en junio de 2017 fue detenido de nuevo por dos agresiones sexuales en Madrid, los d¨ªas 19 de febrero y 14 de abril de 2017, y por haber tratado de hacer lo mismo sin ¨¦xito con otras dos mujeres.
Su modus operandi fue el mismo. Seg¨²n el auto, Luis Gallego abord¨® a las mujeres alrededor de la medianoche a punta de pistola y las oblig¨® a introducirse en su coche, donde les tap¨® la cabeza y les at¨® las manos a la espalda con bridas. Ya en su domicilio y bajo graves amenazas, prosigue el auto, las oblig¨® a mantener relaciones sexuales en "repetidas y reiteradas ocasiones" durante varias horas (seis y trece horas), en las que las forz¨® a consumir drogas, pero siempre con los ojos tapados y golpe¨¢ndolas en ocasiones con su arma. Tras ello, las abandon¨® en la calle.
Al margen de estas dos agresiones consumadas, el 2 de abril de 2017 el procesado intent¨® capturar a una mujer a la que de forma violenta trat¨® de introducirla en su veh¨ªculo all¨ª estacionado golpe¨¢ndola con un arma la cabeza y el cuerpo, hasta que tuvo que desistir ante la resistencia de la mujer. Previamente, el 16 de diciembre de 2016, el procesado trat¨® de hacer lo mismo contra una mujer a la que amenaz¨® con un arma de fuego, la agarr¨® del cuello y la tir¨® al suelo, pero finalmente huy¨® en su coche cuando apareci¨® una pareja de j¨®venes que se encar¨® con ¨¦l.
En su auto, el juez justifica los indicios de criminalidad existentes en que dos de las supuestas v¨ªctimas le reconocieron en la rueda de reconocimiento en sede judicial y que su ADN coincide con el hallado en las otras dos mujeres. El juez tambi¨¦n a?ade que su coche fue visto en las zonas donde abord¨® a las v¨ªctimas, y que su tel¨¦fono m¨®vil fue detectado por las antenas pr¨®ximas en estos lugares as¨ª como en los trayectos, en su domicilio mientras ocurr¨ªan los hechos y en los posteriores regresos a Madrid, precisamente donde abandon¨® a sus dos v¨ªctimas.
El acusado se encuentra en prisi¨®n provisional en el centro penitenciario de Navalcarnero desde junio de 2017, cuando fue detenido por estas cuatros agresiones sexuales, y donde hace justo un a?o trat¨® sin ¨¦xito de suicidarse.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.