El Vaticano condena la ¡°ideolog¨ªa de g¨¦nero¡± en la educaci¨®n

El documento no tiene valor doctrinal y recoge ampliamente las teor¨ªas esbozadas ya en p¨²blico por el papa Francisco, pero es la primera vez que el Vaticano se pronuncia por escrito y de forma condenatoria sobre una cuesti¨®n como la teor¨ªa de g¨¦nero. El texto emitido por la Santa Sede, titulado Var¨®n y mujer los cre¨®, alerta de una supuesta ¡°emergencia educativa en lo que concierne a temas de afectividad y sexualidad" que ha generado un ¡°concepto confuso de libertad que busca ¡°aniquilar la naturaleza¡± a trav¨¦s de conceptos ideol¨®gicos y no cient¨ªficos. Varios grupos de defensores de los derechos LGTBIQ, que se encuentran celebrando estos d¨ªas y en todo el mundo el mes del Orgullo Gay, han criticado ya el documento que, consideran, puede alentar al odio y la intolerancia.

El informe, redactado por el prefecto de la Congregaci¨®n para la Educaci¨®n Cat¨®lica, el cardenal Giuseppe Versaldi, es una suerte de vadem¨¦cum para profesores y padres de escuelas cat¨®licas. Unos centros, asegura el propio Versaldi en una entrevista con el medio oficial del Vaticano, donde los ni?os son inscritos por voluntad propia por los padres, y donde no deber¨ªa imponerse una visi¨®n de la educaci¨®n contraria a la cat¨®lica,. "En muchas ocasiones se han propuesto caminos educativos que transmiten una concepci¨®n de la persona y de la vida pretendidamente neutra, pero que en realidad son reflejo de una antropolog¨ªa contraria a la fe y la justa raz¨®n", se?ala. "Los esfuerzos para ir m¨¢s all¨¢ de la diferencia sexual constitutiva hombre-mujer, como las ideas de 'intersexual' o 'transg¨¦nero', conducen a una masculinidad o feminidad que es ambigua".

Existe en el Vaticano una corriente muy amplia que atribuye el problema de los abusos a menores a las conductas homosexuales de muchos de los sacerdotes de la Iglesia cat¨®lica. Un fen¨®meno que el propio Francisco ha calificado de "moda". Esta teor¨ªa se circunsrib¨ªa al principio solo en el sector ultraconservador, pero con el tiempo ha ido calando y la propia Iglesia est¨¢ modificando los controles y pruebas para acceder a los seminarios. En esta ocasi¨®n, el an¨¢lisis de una situaci¨®n mucho m¨¢s amplia atribuye el supuesto problema a ¡°la desorientaci¨®n antropol¨®gica, que caracteriza ampliamente el clima cultural de nuestro tiempo y que contribuye a desestructurar la familia, con la tendencia a cancelar las diferencias entre el hombre y la mujer, que se consideran simples efectos de un condicionamiento hist¨®rico-cultural".

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El Vaticano habla del concepto queer y atribuye la supuesta ¡°confusi¨®n¡± a una liquidez caracter¨ªstica de los tiempos. ¡°Con esta actitud, la identidad sexual y la familia se convierten en dimensiones de la 'liquidez' y la ¡®fluidez¡¯ posmodernas: fundadas solo sobre una mal entendida libertad del sentir y del querer, m¨¢s que en la verdad del ser; en el deseo moment¨¢neo del impulso emocional y en la voluntad individual¡±.

El trabajo, de 31 p¨¢ginas, busca intervenir en la base educativa de las escuelas cat¨®licas en este aspecto. Por ello habla directamente de los supuestos retos en esta ¨¢rea. "La misi¨®n educativa se enfrenta al desaf¨ªo que surge de diversas formas de una ideolog¨ªa, gen¨¦ricamente llamada gender, que niega la diferencia y la reciprocidad natural de hombre y de mujer. Esta presenta una sociedad sin diferencias de sexo y vac¨ªa el fundamento antropol¨®gico de la familia", se?ala el documento.

En este sentido, se advierte de que la ideolog¨ªa en cuesti¨®n "lleva a proyectos educativos y directrices legislativas que promueven una identidad personal y una intimidad afectiva radicalmente desvinculadas de la diversidad biol¨®gica entre hombre y mujer" y se subraya que "la identidad humana viene determinada por una opci¨®n individualista, que tambi¨¦n cambia con el tiempo".

El informe trata de buscar tambi¨¦n alg¨²n punto de encuentro, pero se limita a un b¨¢sico respeto a la diferencia, tal y como ya ha hecho el Papa en otras ocasiones (a menudo recurre a la pol¨¦mica idea de que los ni?os que manifiestan inclinaciones homosexuales deben acudir al psic¨®logo). Los puntos de encuentro, subraya, son la ¡°educaci¨®n de ni?os y j¨®venes a respetar a cada persona en su particular y diferente condici¨®n, de modo que nadie, debido a sus condiciones personales (discapacidad, origen, religi¨®n, tendencias afectivas, etc.) pueda convertirse en objeto de acoso, violencia, insultos y discriminaci¨®n injusta". El Vaticano, en una particular mezcla de conceptos, aprovecha el documento tambi¨¦n para pedir que se ayude a los estudiantes a desarrollar "un sentido cr¨ªtico ante una invasi¨®n de propuestas, ante la pornograf¨ªa descontrolada y la sobrecarga de est¨ªmulos que pueden mutilar la sexualidad".