El avance de la pandemia obliga a dar marcha atr¨¢s a pa¨ªses que volv¨ªan a abrirse
Corea del Sur e Ir¨¢n est¨¢n viviendo la segunda oleada mientras que Alemania y Portugal vuelven a imponer restricciones. El ritmo de contagios se acelera especialmente en el continente americano
Mientras una parte del mundo lidia con la aceleraci¨®n de la pandemia, otra, que ya cre¨ªa controlado el virus, se enfrenta ahora a nuevos brotes y al temor a una segunda oleada que obligar¨ªa a volver a imponer restricciones o, incluso, a tener que confinar de nuevo a parte de su poblaci¨®n. Alemania ha vuelto a cerrar colegios, bares, museos y gimnasios en un territorio donde viven 640.000 personas para luchar contra un brote con m¨¢s de 1.500 afectados en una gran empresa c¨¢rnica. Portugal tambi¨¦n ha dado marcha atr¨¢s al desconfinamiento en Lisboa y ha vuelto a limitar las reuniones de personas y los horarios comerciales. Israel ha impuesto nuevos confinamientos en zonas con fuertes rebrotes.
La pandemia de coronavirus se est¨¢ acelerando. El director general de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, lleva unos d¨ªas repitiendo que los pa¨ªses no pueden confiarse: ¡°Estamos en una fase nueva y peligrosa¡±. Casi la mitad de los nuevos casos proceden del continente americano, pero las cifras del sur de Asia y de Oriente Pr¨®ximo tambi¨¦n son preocupantes. M¨¢s de dos tercios de los fallecimientos recientes han ocurrido en Am¨¦rica. Estados Unidos lleva ya 120.000 muertos. Brasil, 50.000. M¨¦xico ha rebasado los 22.000.
La OMS alert¨® sobre el avance imparable del virus la semana pasada, cuando se alcanzaron los 150.000 casos diarios por primera vez. Pero la situaci¨®n no ha hecho m¨¢s que empeorar. El domingo subieron hasta los 183.000, la cifra m¨¢s alta desde el inicio de la epidemia. Para ilustrar el ritmo que est¨¢ tomando el coronavirus, el jefe de la OMS emple¨® el lunes una comparaci¨®n muy gr¨¢fica: en el mundo se han registrado hasta ahora casi nueve millones de casos. Al primer mill¨®n se lleg¨® despu¨¦s de tres meses de epidemia. El ¨²ltimo mill¨®n se ha contabilizado solo en los ¨²ltimos ocho d¨ªas. Ghebreyesus empez¨® su comparecencia muy serio: ¡°Parece que todos los d¨ªas llegamos a un nuevo y sombr¨ªo r¨¦cord¡±.
Mientras algunos territorios est¨¢n en lo m¨¢s alto de la primera ola, con dr¨¢sticos incrementos en la transmisi¨®n, en otros preocupan los brotes o la llegada de segundas oleadas. Se trata de Estados que cre¨ªan haber superado lo peor de la epidemia, que confinaron a su poblaci¨®n y poco a poco est¨¢n tratando de recuperar cierta normalidad abriendo sus econom¨ªas.
El epidemi¨®logo Antoni Trilla no cree que pueda hablarse de segunda oleada en casi ning¨²n pa¨ªs, y, menos a¨²n, en Estados europeos como Alemania o Portugal. ¡°Todav¨ªa no hemos salido de la primera¡±, asegura. Entre una oleada y la siguiente deber¨ªa haber ¡°un periodo de descanso, de paz o de tregua¡±, a?ade. No est¨¢ establecido de cu¨¢nto tiempo, pero deber¨ªa ser relativamente largo y con la situaci¨®n muy estable, con bajas incidencias. En el momento en que, tras ese descanso, el n¨²mero de casos aumentara de forma desproporcionada, con transmisi¨®n aut¨®ctona, y se perdiera la pista a las cadenas de transmisi¨®n, s¨ª podr¨ªa hablarse de segunda ola, explica el investigador de ISGlobal y jefe de Medicina Preventiva del Cl¨ªnic de Barcelona.
Ante un aumento puntual de casos durante ese periodo valle, ¡°un ac¨²mulo relativamente peque?o m¨¢s o menos localizado¡±, estar¨ªamos hablando de un brote. El concepto de rebrote no se usa en epidemiolog¨ªa, a?ade Trilla, pero podr¨ªa entenderse como la aparici¨®n de un grupo de casos donde ya hubo uno anteriormente. ¡°Hay que recordar que sigue habiendo transmisi¨®n del virus y seguir¨¢ habiendo brotes¡±, alerta. ¡°Esto no se ha acabado y tenemos que ir con mucho cuidado¡±.
Ante un aumento puntual de casos durante ese periodo valle, ¡°un ac¨²mulo relativamente peque?o m¨¢s o menos localizado¡±, estar¨ªamos hablando de un brote. El concepto de rebrote no se usa en epidemiolog¨ªa, a?ade Trilla, pero podr¨ªa entenderse como la aparici¨®n de un grupo de casos donde ya hubo uno anteriormente. ¡°Hay que recordar que sigue habiendo transmisi¨®n del virus y seguir¨¢ habiendo brotes¡±, alerta. ¡°Esto no se ha acabado y tenemos que ir con mucho cuidado¡±. Pone el ejemplo de pa¨ªses que se pusieron como modelo al principio, como Corea del Sur, Taiw¨¢n, Singapur, Islandia o Alemania, que ahora se enfrenta a un brote de 1.500 casos y ha tenido que poner en cuarentena un barrio entero. ¡±Se interpret¨® que lo hab¨ªan hecho tan bien que se lo hab¨ªan quitado de encima, y no es as¨ª. Lo han hecho muy bien, pero les puede volver a tocar¡±.
La situaci¨®n en Estados Unidos y Am¨¦rica Latina es de una ¡°preocupaci¨®n extrema¡±, asegura Trilla, no solo porque est¨¢n sumando casos a decenas de miles cada d¨ªa sino tambi¨¦n porque pronto entrar¨¢ el invierno austral, una ¡°receta perfecta¡± con ¡°m¨¢s virus circulando, m¨¢s fr¨ªo, la gente qued¨¢ndose en casa y menos posibilidades de que se den las condiciones de temperatura, humedad y sol que ayudan a ralentizar la transmisi¨®n del virus¡±. Con el problema a?adido de que llega tras una primera andanada muy fuerte, sin descanso, con el virus circulando y, en algunos pa¨ªses, ¡°muy descontrolado¡±.
La epidemia en Asia
Corea del Sur, uno de los pa¨ªses que m¨¢s eficazmente consigui¨® salir de la primera embestida del virus en su territorio, ha admitido que est¨¢ luchando contra una segunda ola de infecciones que se inici¨® en la capital, Se¨²l, durante un fin de semana de mayo en el que se reabrieron muchos establecimientos de ocio. Este lunes el pa¨ªs, que hasta ahora manten¨ªa que el aumento de infecciones se deb¨ªa a que la primera ola a¨²n no hab¨ªa pasado, reconoci¨® por primera vez que est¨¢ inmersa en una segunda oleada de contagios, tanto importados como de transmisi¨®n local.
Los expertos tambi¨¦n dan por hecho que Ir¨¢n vive una segunda oleada del virus, que ha golpeado al pa¨ªs justo cuando sus habitantes empezaban a relajarse. Este segundo ataque es igual de virulento que el primero, o m¨¢s. Las autoridades del pa¨ªs aseguran que ahora hacen m¨¢s pruebas que en marzo, y que eso explica el aumento de casos. Las cifras m¨¢s recientes muestran que se registran casi 3.000 positivos nuevos al d¨ªa, m¨¢s que a finales de marzo. Este martes Ir¨¢n ha confirmado 121 v¨ªctimas mortales m¨¢s en solo 24 horas, y ya se acerca a los 10.000 fallecidos.
El retroceso en la contenci¨®n de la pandemia se acrecienta en Israel en medio del temor a una segunda oleada, informa Juan Carlos Sanz. El Gobierno ha anunciado que va a aprobar este martes la implantaci¨®n de zonas restringidas en varios puntos del pa¨ªs donde los contagios se han disparado. La Autoridad Palestina ya ha establecido confinamientos parciales en ¨¢reas como Hebr¨®n al duplicarse los casos positivos en apenas dos semanas tras la desescalada.
Australia ha vuelto a recomendar el confinamiento a cerca de un mill¨®n de personas que viven en el Estado de Victoria y est¨¢ estudiando si hace obligatorio estar en casa despu¨¦s de detectar un repunte en los casos. Los brotes se originaron en reuniones familiares y fiestas de cumplea?os y afectan a la segunda ciudad m¨¢s poblada, Melbourne.
Alemania impone restricciones a 640.000 personas
Tampoco Europa se libra. El brote con m¨¢s de 1.500 afectados en una gran empresa c¨¢rnica del norte de Alemania ha obligado a volver a imponer medidas restrictivas a una zona en la que viven 640.000 personas, informa Ana Carbajosa. No es una vuelta al confinamiento pero s¨ª implica cierre de lugares p¨²blicos y la limitaci¨®n del contacto entre personas. Las nuevas restricciones, anunciadas por el jefe del Gobierno regional, Armin Laschet, se aplican a todo el distrito de G¨¹tersloh, donde viven unas 360.000 personas, e implican el cierre de los bares, museos y gimnasios. Las restricciones, las primeras en el pa¨ªs desde que comenzara la desescalada, obligan adem¨¢s a reducir los contactos entre personas y estar¨¢n vigentes hasta el 30 de junio. De momento, las autoridades consideran que el brote est¨¢ localizado entre los empleados de la industria c¨¢rnica T?nnies y que no se ha propagado al resto de la poblaci¨®n, donde se han registrado un total de 24 contagios.
En Portugal, pa¨ªs considerado mod¨¦lico por c¨®mo consigui¨® controlar la llegada de la epidemia, tambi¨¦n est¨¢n preocupados por el ritmo de nuevos contagios de los ¨²ltimos d¨ªas. El Gobierno ha impuesto desde este martes nuevas restricciones en la regi¨®n metropolitana de Lisboa. El m¨¢ximo de asistentes a concentraciones pasa de 20 a 10 personas y habr¨¢ multas para quien incumpla la normativa. Los establecimientos comerciales cerrar¨¢n obligatoriamente a las ocho de la tarde, salvo en el caso de los restaurantes que sirvan cenas.
Con la llamada nueva normalidad reci¨¦n estrenada, Espa?a tambi¨¦n est¨¢ viviendo algunos brotes en varias comunidades. De los 36 detectados desde mayo, 12 siguen activos, seg¨²n destac¨® el lunes Fernando Sim¨®n, director del Centro de Coordinaci¨®n de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES). Estos nuevos agrupamientos de casos no preocupan a las autoridades sanitarias, que hasta ahora est¨¢n siendo capaces de identificarlos y controlarlos.
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