El calvario de una mujer maltratada por incumplir el r¨¦gimen de visitas de su hija con el padre
Mar¨ªa Salmer¨®n, indultada ya en tres ocasiones, acaba de recurrir la orden de ingreso en prisi¨®n inmediata dictada por una juez de Sevilla
El calvario judicial de Mar¨ªa Salmer¨®n (55 a?os), v¨ªctima de violencia de g¨¦nero, indultada hasta en cuatro ocasiones por el Gobierno ¡ªla ¨²ltima anulada por el Tribunal Supremo¡ª por incumplir el r¨¦gimen de visitas impuesto a su hija, que ya es mayor de edad, no parece tener fin. Acaba de recurrir una orden de ingreso en prisi¨®n inmediata notificada por la titular del Juzgado de lo Penal N¨²mero 6 de Sevilla, para cumplir nueve meses de c¨¢rcel por un delito de desobediencia grave a la autoridad con la agravante de reincidencia por no observar el acuerdo de visitas ni abonar una indemnizaci¨®n de 3.000 euros a su exmarido, condenado por el Tribunal Supremo a 21 meses de prisi¨®n por maltrato.
¡°Si me tienen que llevar a prisi¨®n por respetar la voluntad de mi hija que no quer¨ªa ver a su padre, ir¨¦ y volver¨¦ a pedir el indulto, pero nuestra intenci¨®n es ir al Tribunal Constitucional y despu¨¦s a Estrasburgo y a Naciones Unidas o donde haga falta, porque las mujeres y los menores no tenemos justicia en Espa?a, y se siguen dando visitas a los maltratadores¡±, ha dicho esta ma?ana Salmer¨®n a las puertas de la Audiencia Provincial de Sevilla. Esta instancia fall¨® en junio del a?o pasado ¡ªy ratific¨® en mayo de 2020¡ª contra un recurso presentado por los abogados de Salmer¨®n en respuesta a una sentencia del Juzgado de lo Penal n¨²mero 6 de Sevilla que la hab¨ªa condenado a seis meses de prisi¨®n por incumplir el r¨¦gimen de visitas establecido por el juez. Su titular dio el pasado 10 de julio a la mujer un plazo de 15 d¨ªas para ingresar en prisi¨®n. Salmer¨®n interpuso un incidente de nulidad contra la decisi¨®n de la Audiencia Nacional, que ha sido rechazado, y ha presentado otro de s¨²plica, como paso previo a acudir al Tribunal Constitucional. Es este ¨²ltimo tr¨¢mite, que a¨²n no se ha dirimido, el que han alegado ante el Juzgado N¨²mero 6 para retrasar su ingreso en prisi¨®n, explica su abogado, Jos¨¦ Estanislao L¨®pez.
No es la primera vez que Salmer¨®n se enfrenta una petici¨®n de c¨¢rcel por un delito de desobediencia en su larga batalla judicial contra su exmarido que se remonta a 2000, cuando iniciaron los tr¨¢mites de divorcio. En este tiempo la custodia de su hija ha ido pasando de un progenitor a otro hasta que, finalmente, en noviembre de 2010 una resoluci¨®n de la Audiencia Provincial revocaba la sentencia de divorcio otorgando la custodia a Salmer¨®n e imponiendo un r¨¦gimen de visitas a favor del padre, pese a que la ni?a ya hab¨ªa declarado en varias ocasiones sobre su mala relaci¨®n con ¨¦l. El exmarido de Salmer¨®n fue condenado en 2009 a 21 meses de prisi¨®n por malos tratos f¨ªsicos, psicol¨®gicos y sexuales. Como la pena era menor a dos a?os de prisi¨®n y no ten¨ªa antecedentes, nunca lleg¨® a pisar la c¨¢rcel.
A lo largo de estos a?os, la defensa del marido de Salmer¨®n, que dirige la Asociaci¨®n V¨ªctimas de la Ley de Violencia de G¨¦nero, ha ido interponiendo denuncias contra distintos incumplimientos de ese r¨¦gimen de visitas en diferentes per¨ªodos de tiempo y a?os en los juzgados de Sevilla, que se han ido tramitando de manera separada. De sus condenas por no observar las medidas impuestas por los magistrados fue indultada hasta en cuatro ocasiones, todas con la condici¨®n de que no volvieran a producirse los quebrantamientos del r¨¦gimen de visitas. El ¨²ltimo, concedido en julio de 2016 por el Gobierno de Mariano Rajoy ¡ªque la distingui¨® con un reconocimiento por su lucha contra la violencia machista en 2015¡ª, fue anulado en 2018 por el Tribunal Supremo por entender que no se basaba en ¡°razones de justicia y equidad¡± y en que no hab¨ªa cumplido las condiciones impuestas para concederle esta gracia, que era cumplir 30 d¨ªas de beneficio a la comunidad.
Cuando en 2018 tuvo lugar el juicio para hacer cumplir las medidas que hab¨ªan quedado en suspenso por el indulto anulado de 2016, el Juzgado de lo Penal N¨²mero 13 encargado de la causa declar¨® que hab¨ªa prescrito la pena de c¨¢rcel, aunque s¨ª la conden¨® a abonar 6.000 euros a su exmarido. Buena parte de sus bienes los tiene embargados para hacer frente a esos pagos, ha indicado su abogado. Los incumplimientos denunciados entonces se remontaban a 2013; por los que se le pide ir a prisi¨®n ahora datan de per¨ªodos de 2012 y de 2015, seg¨²n explica el abogado de Salmer¨®n.
¡°La juez dicta auto de prisi¨®n bas¨¢ndose en la hoja hist¨®rico-penal, a pesar de que no he cometido ning¨²n delito en los ¨²ltimos cinco a?os, porque proteger a mi hija no es delito y en ning¨²n momento se ha tenido en cuenta su voluntad¡±. La ni?a tiene ya 20 a?os y, de acuerdo con lo que asegura su madre y sus propias declaraciones en varias instancias judiciales y ante el fiscal de menores, era ella la que no quer¨ªa ver a su padre. ¡°La ni?a entonces ten¨ªa 14 a?os y dijo que no quer¨ªa punto de encuentro¡±, ha insistido Salmer¨®n esta ma?ana.
En la sentencia de 2019 de la Audiencia Nacional que ahora ha ordenado ejecutar la juez, se se?alaba que la conducta de Salmer¨®n es ¡°permanentemente obstativa, desobedeciendo los mandatos judiciales¡±, dejando constancia, en todo caso, de que era su hija la que no quer¨ªa asistir al punto de encuentro ¡°porque no ten¨ªa relaci¨®n con su padre¡±. Una apreciaci¨®n que se ha recogido en varias de las instancias judiciales en las que se ha dirimido la batalla legal de Salmer¨®n y su exmarido que ya dura 20 a?os, donde se constata que es la ni?a la que no quiere ver a su progenitor y que no se le puede obligar a ello, adem¨¢s de destacar el ¡°notable juicio y grado de madurez de la menor¡±. Fue precisamente la negativa de la joven la que llev¨® al juzgado de Primera Instancia de Dos Hermanas (Sevilla) a ordenar el cese del punto de encuentro, ante la ¡°inutilidad¡± en la que hab¨ªa devenido, ya que nunca se cumpl¨ªa el r¨¦gimen de visitas. ¡°Dada la edad de la menor, por decirlo en un lenguaje claro, ver¨¢ al padre cu¨¢ndo, d¨®nde y como quiera, si quiere¡¡±, se?alaba el fallo.
Es esta decisi¨®n a la que se ha aferrado esta ma?ana Salmer¨®n para justificar su conducta. ¡°Se le est¨¢ dando m¨¢s credibilidad a lo que dice la responsable del punto de encuentro y la pareja sentimental del padre de la hija¡±, ha esgrimido. Respecto de la efectividad del punto de encuentro, la Audiencia ha reconocido tambi¨¦n que el r¨¦gimen de visitas no se hab¨ªa podido llevar a cabo de facto porque a veces era el padre quien no acud¨ªa al lugar convenido ¡°y en la mayor parte de las ocasiones, ante la negativa de la menor a irse¡± con ¨¦l.
¡±Con 15 a?os no pod¨ªa arrastrala del pelo para acudir al punto de encuentro¡±, sha asegurado Salmer¨®n. ¡°Me acusan de cosas que han sucedido hace siete a?os, cuando mi hija ten¨ªa 14 a?os y es algo injusto. Estoy viviendo un calvario y una persecuci¨®n judicial porque un maltratador est¨¢ amparado por la justicia¡±. As¨ª se ha despedido Salmer¨®n a la espera de que se resuelva el pen¨²ltimo v¨ªa crucis de la batalla legal con su exmarido.
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