El Supremo de Brasil cuestiona la militarizaci¨®n de la Amazonia

¡°La selva nos une¡±, tuite¨® el vicepresidente Hamilton Mour?o este s¨¢bado, cuando se celebraba el D¨ªa de la Amazonia en Brasil. Pero sus palabras no encajan con la realidad y menos en un momento donde empieza una batalla contra la gesti¨®n del Gobierno en la regi¨®n. Desde mayo, el propio Mour?o dirige la operaci¨®n Verde Brasil en la Amazonia, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, para cohibir los incendios provocados y los delitos ambientales en general. Pero el Partido Verde (PV) cuestion¨® la legalidad de la acci¨®n de los militares en el Supremo Tribunal Federal el pasado 30 de agosto, a la luz del aumento de la deforestaci¨®n en la selva amaz¨®nica. El PV levanta la sospecha de que el Gobierno puede tener agentes que informan a los deforestadores sobre las operaciones de inspecci¨®n en curso. La petici¨®n exige que se suspendan los actos normativos del Ej¨¦rcito que, en la pr¨¢ctica, significa paralizar la operaci¨®n Verde Brasil, retirando a militares de la Amazonia.

El pasado jueves, la ministra del Supremo Carmen L¨²cia solicit¨® ¡°con urgencia y prioridad¡±, informaci¨®n al presidente Jair Bolsonaro y al ministro de Defensa sobre las disposiciones legales cuestionadas que deben presentarse en cinco d¨ªas. El ministro del Gabinete de Seguridad Institucional, el general Augusto Heleno, expres¨® su molestia en Twitter y reaviv¨® las fricciones p¨²blicas de los miembros del Ejecutivo con el Supremo: ¡°La magistrada Carmen L¨²cia ha aceptado la acci¨®n de un partido pol¨ªtico y ha determinado que el presidente y el Ministerio den explicaciones sobre el uso de las Fuerzas Armadas en la Amazonia. Perd¨®neme, querida magistrada, si conociese esa zona, sabe cu¨¢l ser¨ªa su pregunta: ¡®?Qu¨¦ ser¨ªa de la Amazonia sin las Fuerzas Armadas?¡±. El vicepresidente Mour?o ya se manifest¨® sobre este asunto en una entrevista al peri¨®dico O Estado de S. Paulo, donde dijo que la petici¨®n de la magistrada ¡°es otro uso pol¨ªtico del Supremo¡±. El provocativo tuit de Heleno polariz¨® las redes sociales, tras una aparente tregua del Ejecutivo con los otros poderes.

El campo de batalla sobre la gesti¨®n en la Amazonia, un bioma de 4,2 millones de kil¨®metros cuadrados, adquiere cada d¨ªa nuevos matices bajo la Administraci¨®n de Bolsonaro. Bajo las permanentes cr¨ªticas internacionales sobre su pol¨ªtica ambiental ¡ªy la amenaza de que se redujeran las inversiones en el pa¨ªs por ese motivo¡ª, Bolsonaro puso al vicepresidente a cargo de la protecci¨®n de la selva, especialmente despu¨¦s de los incendios de agosto de 2019. All¨ª naci¨® la primera Operaci¨®n Brasil, que permaneci¨® dos meses, de agosto a septiembre, en la regi¨®n para controlar los focos de incendios y los delitos ambientales.

Pero la deforestaci¨®n no se ha reducido en 2020 y, en abril, las alertas por incendios provocados y la deforestaci¨®n en la Amazonia de forma legal crecieron un 63,7%, lo que llev¨® al Gobierno a promulgar una garant¨ªa de Ley y Orden, que permite el uso de las Fuerzas Armadas para proteger la selva. As¨ª naci¨® la Operaci¨®n Verde Brasil 2, con un coste de 60 millones de reales (11,3 millones de d¨®lares), que durar¨ªa, en principio, dos meses. Aunque los ambientalistas reconocieron el esfuerzo del Gobierno por llegar antes de que hubiera una nueva oleada de incendios en el segundo semestre del a?o, el plan fue visto con desconfianza debido al alto coste ¡ªmayor que el presupuesto anual del Instituto Brasile?o del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama), responsable de vigilar y reducir la deforestaci¨®n hasta entonces¡ª y a la falta de coordinaci¨®n conjunta.

Mour?o refuerza que la acci¨®n tiene por objeto prestar apoyo a los organismos de inspecci¨®n, como el propio Ibama y el Instituto Chico Mendes. ¡°Es un apoyo log¨ªstico y de seguridad para las dos instituciones, que no tienen piernas para llevar a cabo sus tareas en la Amazonia¡±, dijo a O Estado de S. Paulo. Los que est¨¢n en el terreno ven con buenos ojos la posici¨®n del vicepresidente, pero todav¨ªa hay ruidos y desencuentros en una zona que es extremadamente sensible para los brasile?os y el mundo que lucha contra el calentamiento global y depende de la conservaci¨®n de selvas como la Amazonia. ¡°Queremos y necesitamos trabajar con las Fuerzas [Armadas]. Pero cada uno tiene que entrar con su especializaci¨®n. La especializaci¨®n del Ej¨¦rcito es la log¨ªstica, el riesgo operacional. Nosotros tenemos experiencia en montar operaciones y acciones contra los delincuentes ambientales¡±, dijo a EL PA?S un inspector que hace m¨¢s de diez a?os que trabaja en el Ibama y prefiere permanecer en anonimato. Mour?o tambi¨¦n enton¨® el mea culpa en su entrevista cuando dijo que el Gobierno se equivoc¨® al dejar la selva en septiembre al terminar la primera Operaci¨®n Brasil. ¡°Si nos hubi¨¦ramos quedado en el terreno desde el a?o pasado, podr¨ªamos presentar mejores n¨²meros¡±, dijo. Entre mayo y agosto, el n¨²mero de incendios provocados fue pr¨¢cticamente el mismo que el del mismo periodo de 2019, aunque en agosto hubo una reducci¨®n del 5%. Pero este a?o, los incendios han alcanzado el bioma del Pantanal, en el centro occidente del pa¨ªs, regi¨®n dependiente de Amazonia.

Las convergencias, sin embargo, se desvanecen al tener, de un lado, el Gobierno bajo presi¨®n y, del otro, a los ambientalistas que se ven atropellados. En la petici¨®n del PV al Supremo, el partido menciona relatos de inspectores que revelan la falta de colaboraci¨®n. ¡°Crearon una operaci¨®n que contribuye a desmantelar la pol¨ªtica ambiental brasile?a¡±, argumenta el PV, que tambi¨¦n menciona una acci¨®n del Ibama del 6 de agosto que se filtr¨® a los que ser¨ªan objeto de la inspecci¨®n. La Polic¨ªa Federal hab¨ªa estado vigilando una explotaci¨®n minera ilegal en el Estado de Par¨¢ durante semanas, pero luego un militar les prohibi¨® que siguieran. ¡°Se divulg¨® un audio que se hab¨ªa enviado al grupo de WhatsApp Los garimpeiros no son delincuentes, que alertaba de que habr¨ªa agentes del Ibama el 6 de agosto en la regi¨®n. El autor del audio fue identificado y confirm¨® que la informaci¨®n hab¨ªa sido transmitida por un funcionario del Gobierno federal¡±, cita la petici¨®n.

La alerta por WhatsApp la hizo Josias, un ind¨ªgena urbanizado, favorable a la explotaci¨®n minera ilegal, que est¨¢ en contacto con ¡°una persona¡± del Gobierno, como ¨¦l mismo admite en un reportaje. Son ind¨ªgenas como ¨¦l los que mencionan Mour?o o Bolsonaro cuando hablan de la Amazonia y la construcci¨®n de una cadena de actividad econ¨®mica en la regi¨®n. ¡°Tenemos que entender las necesidades de la comunidad ind¨ªgena. No pueden permanecer segregados, apartados del siglo XXI. Necesitan tener sus propios ingresos, no pueden vivir de la limosna del Estado¡±, dijo el vicepresidente. Pero la lectura no tiene en cuenta las diferentes etapas de integraci¨®n de los ind¨ªgenas en un pa¨ªs con m¨¢s de 300 pueblos diferentes, incluidos los aislados y otros que se niegan a involucrarse en otras culturas, porque entienden que la selva es su medio de vida y respetan a sus antepasados, que han sobrevivido en la Amazonia desde antes de que se descubriera Brasil, en el a?o 1500. Un tema en que el Gobierno Bolsonaro tiene prisa, sin buscar puentes para un debate m¨¢s maduro.