El feminismo cambia las marchas masivas por s¨ªmbolos y homenajes en el 8-M de la pandemia

El feminismo no ha podido medir su fuerza de forma masiva en las calles este 8-M y ha cambiado las grandes movilizaciones por concentraciones, s¨ªmbolos y homenajes. Las limitaciones por la pandemia acotaron la protesta por la igualdad real de las mujeres. En filas y con distancias de seguridad, con bailes y mascarillas, en bicicleta, desde las casas, en los balcones, en las redes y en...

El feminismo no ha podido medir su fuerza de forma masiva en las calles este 8-M y ha cambiado las grandes movilizaciones por concentraciones, s¨ªmbolos y homenajes. Las limitaciones por la pandemia acotaron la protesta por la igualdad real de las mujeres. En filas y con distancias de seguridad, con bailes y mascarillas, en bicicleta, desde las casas, en los balcones, en las redes y en grupos, las protestas han seguido porque persisten los motivos y, adem¨¢s, la crisis sanitaria y social del coronavirus ha agrandado las brechas. Las protestas se han visto, a pesar de la lluvia y del virus, te?idas de morado, en muchas ciudades espa?olas, y este a?o Madrid no ha sido el epicentro, como en los ¨²ltimos tres, que dejaron im¨¢genes repletas de manifestantes alrededor de la plaza de Cibeles.

Ellas siguen cobrando menos, copan los peores empleos y sufren violencia por el mero hecho de ser mujeres. La ONU recuerda que la igualdad en el poder se demorar¨¢ al menos otros 130 a?os en el mundo. ¡°Este d¨ªa tambi¨¦n es para las mujeres que no quieren seguir aceptando discriminaci¨®n, inseguridad e injusticia¡±, ha dicho la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, que ha prometido situar la igualdad de g¨¦nero en el centro de la recuperaci¨®n econ¨®mica. ¡°Espa?a no puede permitirse salir de esta emergencia sanitaria, econ¨®mica y social otra vez a costa de las mujeres¡±, ha comentado la ministra de Igualdad, Irene Montero.

Madrid no ha protagonizado las movilizaciones despu¨¦s de que el Tribunal Constitucional mantuviera la prohibici¨®n de celebrar actos en la calle que decret¨® la Delegaci¨®n del Gobierno por razones ¡°de salud p¨²blica¡±. Las organizaciones feministas han pedido a las mujeres de la capital que salieran a los balcones a las 20.00, como con los aplausos sanitarios del confinamiento, mientras protestaban por un trato que no han visto en otras movilizaciones. ¡°Nadie ha ido al Rastro [el mercadillo al aire libre de Madrid], ni a la entrada de los estadios de f¨²tbol [en referencia a la multitud que recibi¨® al Atl¨¦tico el domingo en el Wanda Metropolitano], ni al metro para controlar aglomeraciones. Solo se ha hecho con las mujeres¡±, ha dicho la secretaria de Igualdad de UGT, Ana S¨¢nchez de la Coba. Sobre Madrid pesan a¨²n las acusaciones que hizo la oposici¨®n por una supuesta imprudencia en las marchas del a?o pasado, que no se achacaron a otros eventos de esas fechas, como m¨ªtines pol¨ªticos o eventos deportivos. El l¨ªder del PP, Pablo Casado, ha se?alado que ¡°el 8 de marzo se ha convertido en un s¨ªmbolo de lo que se hizo mal el a?o pasado¡± y ha acusado al Gobierno de ocultar ¡°alertas internacionales¡± y poner en riesgo ¡°a miles de mujeres¡±.

En el resto de Espa?a las mujeres han salido en movilizaciones con distancia de seguridad y mascarillas. En la Comunidad Valenciana, Galicia o Andaluc¨ªa, por ejemplo, se han celebrado decenas de movilizaciones en las que se ha recordado a ¡°a las compa?eras de Madrid¡±, se ha reivindicado la labor de las ¡°trabajadoras esenciales¡± y se ha pedido ¡°m¨¢s feminismo para salir de la crisis¡±. ¡°Este a?o nos han querido amordazar y no han podido¡±, han dicho las integrantes de la plataforma 8-M en M¨¢laga, que se han juntado en el centro de la ciudad andaluza y han bailado separadas unas de otras. En San Sebasti¨¢n, una manifestaci¨®n con tres columnas ha recorrido el paseo de la Concha con el lema: ¡°Cambia todo desde el feminismo¡±. En Santiago de Compostela, tambi¨¦n en columnas, las mujeres han aplaudido y cantado en una protesta convocada en la plaza del Obradoiro. En Catalu?a estaban previstas hasta 60 movilizaciones diferentes. En la principal, convocada en el paseo de Gracia de Barcelona por la tarde, se dividi¨® el recorrido en ocho tramos para albergar a 3.600 personas, con el lema: ¡°Juntas, diversas y rebeldes somos imparables. Siempre feministas¡±. ¡°No queremos que las mujeres sigamos siendo las ¨²nicas responsables de sostener la vida¡±, han se?alado en el comunicado de cierre las convocantes de la protesta de Bilbao, entre aplausos, separadas y con el cubrebocas.

En Par¨ªs se han manifestado varios miles de personas para reclamar ¡°el fin de las discriminaciones y de las violencias sexistas y sexuales¡±. La protesta ha estado presidida por un cl¨ªtoris gigante. En Berl¨ªn ha habido centenares de personas frente a la Puerta de Brandeburgo. En Atenas se ha concentrado un millar de personas contra la violencia sexual en una protesta marcada por la pandemia y tambi¨¦n por su propio movimiento Me Too.

Durante la ma?ana, en un acto institucional a puerta cerrada y retransmitido por streaming, la ministra Irene Montero se ha acordado de las ¡°millones de mujeres que en 2018 pararon este pa¨ªs con una huelga feminista hist¨®rica¡±. Montero ha agradecido tambi¨¦n el impulso de las m¨¢s j¨®venes: ¡°Gracias a vosotras este presente y futuro es feminista¡±. Espa?a ¡°no puede permitirse que unas pocas rompan techos de cristal mientras la mayor¨ªa, las humildes, pobres, migrantes, siguen atadas a un suelo pegajoso que las condena a recoger esos cristales¡±, ha dicho. Los efectos de la pandemia han hecho m¨¢s mella en las mujeres. La tasa de paro femenina es del 17,4% frente al 13,8% de los hombres, seg¨²n datos recopilados por la agencia Efe. Y persiste la brecha de las pensiones: ellas cobran una media de 858 euros de pensi¨®n de jubilaci¨®n frente a los 1.312 euros de los hombres.

La ultraderecha

El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, ha recordado que la violencia tampoco cesa el 8-M. En Massamagrell, en Valencia, una mujer fue agredida por su expareja. ¡°La respuesta solo puede ser acelerar la agenda feminista¡±, dijo S¨¢nchez. Desde que hay recuento oficial, que se inici¨® en 2003, 1.082 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en Espa?a.

El presidente se ha comprometido a aprobar ¡°dentro de muy poco¡± la Ley Org¨¢nica de Garant¨ªa integral de la Libertad Sexual, la conocida como ley del solo s¨ª es s¨ª, que ser¨ªa la primera gran normativa del ¨¢rea de igualdad aprobada por el Gobierno de coalici¨®n. Se ha referido tambi¨¦n al riesgo del avance de partidos como Vox, que niega la desigualdad y la violencia de g¨¦nero: ¡°No podemos obviar otra amenaza que es terrible, la aparici¨®n de la ultraderecha, con su discurso de odio y su machismo descarnado; la ultraderecha no es una fuerza de resistencia al feminismo, es una fuerza de retroceso¡±. Vox ha solicitado de nuevo que el 8-M se celebre el d¨ªa nacional por las v¨ªctimas del coronavirus, mientras el famoso mural feminista del distrito madrile?o de Ciudad Lineal con los rostros de 15 mujeres que el partido hab¨ªa pedido borrar ha amanecido destrozado. Las manchas de pintura negra cubr¨ªan los rostros de la activista Angela Davis, la escritora Chimamanda Ngozi o la pintora Frida Kahlo.

Con informaci¨®n de Ferr¨¢n Bono, Caridad Bermeo, Marta Pinedo, Cristina Salda?a, Jakub Olesiuk, Emilio S¨¢nchez Hidalgo, Cristina V¨¢zquez, Santiago Ca?as, Jes¨²s Ca?as, Cristian Segura, Juan Navarro, Mikel Ormazabal, Sonia Vizoso, Gin¨¦s Donaire, Nacho S¨¢nchez, Silvia Ayuso y Javier Arroyo.