Tengo cita para vacunarme y la primera dosis es de AstraZeneca: ?qu¨¦ segunda debo ponerme?
La elecci¨®n entre Pfizer y AstraZeneca inquieta al mill¨®n y medio de afectados menores de 60 a?os que recibieron el compuesto anglosueco. Los expertos recuerdan que las dos son seguras y eficaces
Carlos Agudo, farmac¨¦utico de 35 a?os que ejerce en Ja¨¦n, es uno de los 1,5 millones de trabajadores esenciales menores de 60 a?os que recibi¨® la primera dosis de AstraZeneca (comercializada como Vaxzevria) y que ahora se encuentra en una situaci¨®n que ¡°nunca habr¨ªa imaginado¡±. El pr¨®ximo jueves tiene cita para la segunda dosis y aunque se inclina por completar la pauta con el mismo suero, el consentimiento informado que deber¨¢ firmar y la opci¨®n abierta de recibir el pinchazo de Pfizer-BioNTech (comercializado como Comirn...
Carlos Agudo, farmac¨¦utico de 35 a?os que ejerce en Ja¨¦n, es uno de los 1,5 millones de trabajadores esenciales menores de 60 a?os que recibi¨® la primera dosis de AstraZeneca (comercializada como Vaxzevria) y que ahora se encuentra en una situaci¨®n que ¡°nunca habr¨ªa imaginado¡±. El pr¨®ximo jueves tiene cita para la segunda dosis y aunque se inclina por completar la pauta con el mismo suero, el consentimiento informado que deber¨¢ firmar y la opci¨®n abierta de recibir el pinchazo de Pfizer-BioNTech (comercializado como Comirnaty) siguen dando vueltas por su cabeza. ¡°Con tantos vaivenes, nos est¨¢n haciendo dudar hasta a nosotros, que somos profesionales sanitarios. No quiero ni pensar en los profesores y otros que est¨¢n en la misma situaci¨®n¡±, reflexiona.
¡°Mi opci¨®n y la de muchos compa?eros es la de seguir con AstraZeneca porque eso es lo que dice la ficha t¨¦cnica de la vacuna¡±, afirma. ¡°Aunque, claro, entonces sorprende que tengamos que firmar un consentimiento informado que, si lo lees, parece hecho para disuadir. Y se entiende a¨²n menos cuando sabes que el riesgo de trombos es mucho menor en la segunda dosis que en la primera¡±, sigue Agudo, que acaba con una recomendaci¨®n: ¡°En todo caso, hay que vacunarse. Todos debemos hacerlo. Que nadie se quede en casa por todos estos cambios¡±.
?Puedo de verdad elegir entre AstraZeneca y Pfizer?
S¨ª, aunque esta posibilidad solo afecta a los profesionales esenciales menores de 60 a?os que recibieron la primera dosis de AstraZeneca, que ha sido relacionada con casos muy infrecuentes, pero graves, de trombosis. El Ministerio de Sanidad y varias comunidades, sin embargo, evitan presentar esta disyuntiva como una elecci¨®n. La raz¨®n es no romper uno de los principios b¨¢sicos de la estrategia de inmunizaci¨®n en Espa?a: la vacuna no se elige y cada ciudadano recibe la que se le ofrece. Es por esto que el proceso se presenta formalmente como dos pasos sucesivos. En el primero, el ciudadano rechaza recibir la segunda dosis de Pfizer, que es la que ahora le da de entrada el sistema sanitario. En el segundo, y como mal menor ante el riesgo de que la persona no complete la pauta vacunal, se le ofrece una segunda dosis de AstraZeneca y el ciudadano la acepta firmando un consentimiento informado en el que admite estar al tanto del riesgo de trombos.
?Por qu¨¦ tengo que firmar un documento de consentimiento informado?
Es la decisi¨®n adoptada por Sanidad y las comunidades el pasado martes en una Comisi¨®n de Salud P¨²blica muy dividida y que fue avalada el viernes por el Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a. La mayor¨ªa de expertos, sin embargo, no le ven mucho sentido. ¡°No se pide con ninguna otra vacuna y es la segunda dosis de una vacuna aprobada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), as¨ª que pedirlo es transmitir al ciudadano que asume un riesgo fuera de lo com¨²n, cuando no es as¨ª¡±, critica Quique Bassat, epidemi¨®logo e investigador ICREA del instituto ISGlobal (Barcelona). El presidente del Comit¨¦ de Bio¨¦tica, Federico de Montalvo, defendi¨® el pasado viernes que el consentimiento estaba justificado porque ¡°la ley dice que cuando pueda haber riesgos con graves consecuencias se debe informar por escrito, mientras si son leves o moderadas se puede hacer verbalmente¡±. Algunas comunidades, sin embargo, han mostrado su intenci¨®n de salirse del guion marcado por Sanidad. Galicia anunci¨® el viernes que tambi¨¦n har¨¢ firmar un consentimiento a quienes opten por Pfizer, mientras Andaluc¨ªa ¡ªque tambi¨¦n tendr¨¢ un documento preparado para cada vacuna¡ª asegura que no obligar¨¢ a firmarlo si el ciudadano, pese a recibir el pinchazo, no quiere. Su argumento es que, al haber acudido de forma voluntaria a la cita, se entiende que est¨¢ de acuerdo con la vacunaci¨®n y como tal ser¨¢ registrado por los profesionales sanitarios. El Ministerio de Sanidad, por su parte, recuerda que todos los acuerdos como el alcanzado sobre la segunda dosis son de ¡°obligado cumplimiento¡± que lo importante ahora es generar generar confianza entre los ciudadanos y que la mejor forma de hacerlo es ¡°cumplir¡± lo acordado.
?Qu¨¦ implica seguir con la segunda dosis de AstraZeneca?
?ngela Dom¨ªnguez, coordinadora de vacunas de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa (SEE), defiende que esta opci¨®n es muy segura. ¡°La EMA ha analizado los eventos adversos registrados [por trombosis] y concluy¨® que no hab¨ªa ning¨²n motivo para desaconsejar la vacuna¡±, asegura. La propia EMA recomend¨® hace un mes administrar la segunda dosis de AstraZeneca a quienes hubieran recibido la primera. Adem¨¢s, recuerda Dom¨ªnguez, la mayor¨ªa de los casos de reacciones adversas se han registrado con la primera dosis. ¡°Por cada mill¨®n, se han registrado 3,4 efectos adversos tromb¨®ticos, cifra que desciende a menos de uno por mill¨®n en las segundas dosis¡±. En cambio, Sanidad y las comunidades que votaron por sustituir esta vacuna por la de Pfizer argumentan que, aunque peque?o, el riesgo existe. ¡°Con incidencias bajas de la enfermedad y en poblaci¨®n m¨¢s joven, que aunque coja el virus desarrollar¨¢ un cuadro cl¨ªnico leve, el balance riesgo-beneficio de AstraZeneca ya no est¨¢ tan claro¡±, afirma un alto cargo sanitario.
?Y elegir la de Pfizer?
Am¨®s Garc¨ªa Rojas, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Vacunolog¨ªa (AEV), defiende que esta es la mejor opci¨®n ya que las vacunas que usan la novedosa tecnolog¨ªa ARN mensajero (Pfizer y Moderna) han demostrado un mejor perfil de seguridad. ¡°Las pautas heter¨®logas [utilizar dos vacunas distintas para inmunizar a un paciente] funcionan, es algo que conocemos bien¡±, afirma. ¡°Y el estudio del Instituto Carlos III ha demostrado que administrar una segunda dosis de Pfizer tras una primera de AstraZeneca es muy eficaz y seguro¡±, a?ade. Quique Bassat, sin embargo, recuerda que esta opci¨®n no ha sido ¡°avalada por ninguna agencia regulatoria¡± y que la evidencia que la apoya es a¨²n d¨¦bil, con apenas dos estudios. El primero, cuyos resultados preliminares fueron publicados en la prestigiosa revista The Lancet hace dos semanas, apuntaba a que combinar las dos vacunas multiplica las reacciones adversas, aunque estas son en todos los casos leves (fiebre, dolores musculares, fatiga...). El segundo, llamado CombivacS, es el del Instituto de Salud Carlos III, del que se ha criticado el uso que ha querido hacerse de ¨¦l m¨¢s que el estudio en s¨ª, cuya muestra apenas supera los 600 pacientes. ¡°No es un estudio en fase III, con decenas de miles de pacientes estudiados. Eso a¨²n no lo tenemos¡±, sostiene Bassat.
?Qu¨¦ han hecho otros pa¨ªses?
Amos Garc¨ªa recuerda que Francia, Alemania y Suecia, entre otros pa¨ªses, ¡°no dudaron y cambiaron por seguridad la segunda dosis para utilizar la de Pfizer¡±. Otros gobiernos, como el italiano, han seguido en cambio administrando la segunda dosis de AstraZeneca, sin que hasta la fecha hayan aflorado reacciones graves. El Reino Unido, que ha basado su estrategia en esta ¨²ltima vacuna, tambi¨¦n ha continuado administr¨¢ndola en mayores de 30 a?os.
?Y en Espa?a por qu¨¦ tengo que decidir yo?
Este es uno de los puntos m¨¢s criticados por muchos expertos: que se ha trasladado al ciudadano el peso de una decisi¨®n que corresponde a la autoridad sanitaria, una situaci¨®n que genera incertidumbre y que puede causar recelos hacia las vacunas. La posici¨®n de Sanidad es que, en realidad, la Comisi¨®n de Salud P¨²blica ya tom¨® una decisi¨®n, administrar la de Pfizer, y que si se ha dejado abierta la puerta a la de AstraZeneca ha sido de forma excepcional. En todo caso, insisten los expertos, todas las vacunas son seguras, han sido aprobadas por la EMA y est¨¢n demostrando su eficacia, con un desplome de las cifras de fallecimientos y hospitalizaciones a medida que se ha ido extendiendo su uso.