Adi¨®s a los papanicolau obligatorios a las funcionarias de S?o Paulo por orden de un juez
El magistrado suspende por discriminatorio el requisito de pruebas ginecol¨®gicas, que incluyen mamograf¨ªas a las mayores de 40, para asumir un empleo p¨²blico en el Estado m¨¢s rico de Brasil
Las empleadas p¨²blicas que hayan obtenido una plaza de funcionarias en el Estado brasile?o de S?o Paulo ya no tendr¨¢n que someterse a una citolog¨ªa o papanicolau y, si tienen m¨¢s de 40 a?os, a una mamograf¨ªa antes de asumir sus funciones. Un juez acaba de suspender de manera cautelar esa exigencia al entender que es discriminatorio hacia las candidatas respecto a los candidatos, por lo que da la raz¨®n por el momento al ¨¢rea de la Defensor¨ªa P¨²blica que vela por los derechos de las mujeres, que demand¨® al Gobierno estatal. Las pruebas se piden con la intenci¨®n de ...
Las empleadas p¨²blicas que hayan obtenido una plaza de funcionarias en el Estado brasile?o de S?o Paulo ya no tendr¨¢n que someterse a una citolog¨ªa o papanicolau y, si tienen m¨¢s de 40 a?os, a una mamograf¨ªa antes de asumir sus funciones. Un juez acaba de suspender de manera cautelar esa exigencia al entender que es discriminatorio hacia las candidatas respecto a los candidatos, por lo que da la raz¨®n por el momento al ¨¢rea de la Defensor¨ªa P¨²blica que vela por los derechos de las mujeres, que demand¨® al Gobierno estatal. Las pruebas se piden con la intenci¨®n de detectar candidatos enfermos o que puedan enfermar y evitar as¨ª el potencial da?o a las arcas p¨²blicas.
Paula Machado, la coordinadora del N¨²cleo de Promoci¨®n y Defensa de los Derechos de la Mujer, explica en una entrevista telef¨®nica que, adem¨¢s de discriminatorias, esas dos pruebas ¡°son muy desproporcionadas, hieren la dignidad de la mujer y no existe ning¨²n cargo p¨²blico para el que la salud reproductiva y sexual sea relevante¡±. Conf¨ªa en que el juez convierta la suspensi¨®n cautelar en definitiva.
S?o Paulo es, con 46 millones de habitantes, el Estado m¨¢s poblado y el que m¨¢s aporta a la econom¨ªa brasile?a. Tiene cientos de miles de empleados p¨²blico: maestros, jueces, polic¨ªas, barrenderos, bi¨®logos y un largu¨ªsimo etc¨¦tera. Una vez superada la oposici¨®n, todos los candidatos deben demostrar que gozan de buena salud mediante una serie de pruebas m¨¦dicas para poder asumir el empleo p¨²blico. As¨ª lo establece el estatuto que lo rige. Y ah¨ª empieza el problema.
Las mujeres tienen que someterse a una o dos pruebas m¨¢s que sus colegas varones, en funci¨®n de su edad. Ellas deben presentar los resultados de una citolog¨ªa y, las mayores de 40 a?os, tambi¨¦n una mamograf¨ªa adem¨¢s de an¨¢lisis de sangre, un electrocardiograma y unos rayos X tor¨¢cicos exigidos tambi¨¦n a los hombres.
Las pruebas m¨¦dicas ¡ªcosteadas por el funcionario si no quiere ir a la red p¨²blica¡ª persiguen evitar el gasto que supondr¨ªa para el Estado de S?o Paulo que el futuro empleado p¨²blico enfermara. Literalmente, seg¨²n cita la demanda, para ¡°identificar qui¨¦n tiene o qui¨¦n tiene pron¨®stico de desarrollar futuras neoplasias [tumores] malignas, con el fin de impedir que accedan a cargos p¨²blicos, partiendo del supuesto de que dichas personas, que puedan desarrollar futuras enfermedades, pueden causar perjuicio a la Administraci¨®n P¨²blica¡±.
Machado afirma que ¡°el Estado elige las enfermedades que quiere analizar y discrimina por raz¨®n de g¨¦nero¡±. Y pone como ejemplo que, para detectar el c¨¢ncer de pr¨®stata, a los funcionarios les basta con un an¨¢lisis de sangre.
La Defensor¨ªa tambi¨¦n argument¨® que ese criterio de buena salud deber¨ªa estar directamente vinculado con el trabajo que el funcionario va a desempe?ar. Porque no es lo mismo conducir un autob¨²s de l¨ªnea que dar clase.
Pero las pruebas acarrean otras supuestas discriminaciones y vulneraciones de derechos, seg¨²n detalla la coordinadora del ¨¢rea de derechos de la mujer de la Defensor¨ªa. Requiere convencer a un m¨¦dico que las recete en la red p¨²blica ¡ªque solo recomienda la mamograf¨ªa a partir de los 50 a?os¡ª o si no hay que pagarlas en la red privada, con lo que ¡°acabas creando una v¨ªa transversal que puede impedirle [a una candidata] tomar posesi¨®n del cargo¡±.
Y por si fuera poco, a?ade, violan la intimidad de la funcionaria, son invasivas e innecesarias. Tanto la citolog¨ªa, un examen uterino llamado papanicolau por el cient¨ªfico que lo invent¨®, como la mamograf¨ªa, una radiograf¨ªa que requiere aplastar los pechos hasta el l¨ªmite tolerable, son inc¨®modas y, en ocasiones, dolorosas. Y en el primer caso la detecci¨®n del papilomavirus humano, recalca Machado, ni siquiera significa que va a enfermar y el c¨¢ncer de cuello de ¨²tero es curable.
Brasil tiene el sistema de salud p¨²blica m¨¢s grande del mundo, llamado SUS, pero tambi¨¦n un potente sistema de seguros privados al que recurre el tercio de la poblaci¨®n m¨¢s privilegiado.
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