?Qu¨¦ pasar¨¢ con la viruela del mono? Los cuatro escenarios que se plantean los cient¨ªficos

El goteo de nuevos contagios de viruela del mono contin¨²a en Espa?a. El lunes, el Ministerio de Sanidad ha informado de 22 nuevos casos, con lo que ya han sido confirmados 120. Y, previsiblemente, seguir¨¢n creciendo en los pr¨®ximos d¨ªas. La opini¨®n mayoritaria de los cient¨ªficos es que en unas semanas comenzar¨¢n a bajar, hasta que el brote acabe desapareciendo. Pero no descartan otros escenarios, que van desde la necesidad de una vacunaci¨®n a los c¨ªrculos m¨¢s cercanos de los casos, a que la enfermedad llegue a ser end¨¦mica...

El goteo de nuevos contagios de viruela del mono contin¨²a en Espa?a. El lunes, el Ministerio de Sanidad ha informado de 22 nuevos casos, con lo que ya han sido confirmados 120. Y, previsiblemente, seguir¨¢n creciendo en los pr¨®ximos d¨ªas. La opini¨®n mayoritaria de los cient¨ªficos es que en unas semanas comenzar¨¢n a bajar, hasta que el brote acabe desapareciendo. Pero no descartan otros escenarios, que van desde la necesidad de una vacunaci¨®n a los c¨ªrculos m¨¢s cercanos de los casos, a que la enfermedad llegue a ser end¨¦mica, con brotes frecuentes, como pasa en algunos pa¨ªses de ?frica. No cierran por completo la puerta a que se pueda producir una pandemia, pero los consultados por EL PA?S lo ven ¡°muy improbable¡± y, en cualquier caso, tendr¨ªa caracter¨ªsticas muy distintas a la de covid.

Estos son los cuatro escenarios que prev¨¦n, cuyas fronteras no son estancas: no siempre est¨¢ definido d¨®nde termina uno y comienza el siguiente. Est¨¢n ordenados de m¨¢s probable a menos:

Brote contenido en unas semanas

Las medidas de contenci¨®n que se est¨¢n poniendo en marcha ¡ªdetecci¨®n y aislamiento de casos¡ª deber¨ªan ser suficientes para frenar al virus. As¨ª lo creen, por ejemplo, ?scar Zurriaga, de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa, y Ra¨²l Rivas Gonz¨¢lez, catedr¨¢tico del ¨¢rea de Microbiolog¨ªa y Gen¨¦tica de la Universidad de Salamanca.

Por lo que se sabe hasta ahora, el pat¨®geno se transmite por fluidos. Si no se encuentran nuevas v¨ªas, quiere decir que para contagiarse hace falta un contacto estrecho con otra persona (o animal) infectada. Esta falta de agilidad del virus para propagarse ser¨ªa la principal aliada para frenarlo. Aunque por el momento los casos siguen aumentando, Rivas Gonz¨¢lez cree que lo previsible es que entre seis y ocho semanas despu¨¦s de su comienzo el brote termine. Si se cumple esta previsi¨®n, a principios de julio deber¨ªa desaparecer. Lo que no evitar¨ªa decir que, igual que en esta ocasi¨®n, se pudieran producir nuevas importaciones.

El problema de este escenario es que este brote est¨¢ generando muchos m¨¢s casos y en m¨¢s lugares del mundo que ning¨²n otro del pasado (fuera de ?frica). Los investigadores no saben todav¨ªa por qu¨¦. En la secuenciaci¨®n gen¨¦tica del virus, se ha comprobado que las variaciones con respecto a brotes anteriores en pa¨ªses occidentales es m¨ªnima, as¨ª que no parece que pueda ser mucho m¨¢s contagioso.

Sin embargo, la hip¨®tesis de la transmisi¨®n a¨¦rea del virus no est¨¢ completamente cerrada. Esto explicar¨ªa, seg¨²n Matilde Ca?elles, inmun¨®loga e investigadora del CSIC, que est¨¦ siendo complicado rastrear los casos: ¡°La mayor¨ªa no tiene relaci¨®n con otros que se conozcan, y esto es un poco preocupante. Creo que deber¨ªa comenzar ya la vacunaci¨®n en anillo¡±.

Esto lleva al siguiente escenario.

Contenci¨®n a base de vacunaciones en anillo

Si la detecci¨®n de casos y su aislamiento no fuera suficiente, har¨ªa falta dar un paso m¨¢s: vacunar a las personas que han estado en contacto con los contagiados y a los contactos cercanos de estas. Es lo que se llama ¡°vacunaci¨®n en anillo¡±, y que algunos cient¨ªficos proponen que comience ya. Otros pa¨ªses con menos casos que Espa?a ¡ªcomo Francia o Estados Unidos¡ª ya han iniciado estas vacunaciones con el f¨¢rmaco que se utilizaba para la viruela, la ¨²nica enfermedad humana que se ha conseguido erradicar. Se cree que es capaz de proteger con bastante eficacia (superior al 70%) para la variedad del mono. Esto confiere una buena protecci¨®n a las personas que recibieron en su d¨ªa la inmunizaci¨®n, que se par¨® a finales de los setenta en Espa?a.

Rivas Gonz¨¢lez manifiesta que tambi¨¦n ser¨ªa interesante vacunar a los sanitarios, que pueden estar en contacto con el virus por motivos profesionales. Zurriaga piensa que con esto ser¨ªa suficiente, pero no descarta que en alg¨²n momento haya una vacunaci¨®n masiva: ¡°No creo que sea lo indicado, pero si alg¨²n pa¨ªs lo hace, no me extra?ar¨ªa que otros fueran detr¨¢s por motivos m¨¢s pol¨ªticos que cient¨ªficos¡±.

Los consultados coinciden en que las vacunaciones deber¨ªan ser suficientes para hacer desaparecer al virus. Pero tampoco est¨¢ garantizado.

Que el virus se convierta en end¨¦mico

Uno de los principales miedos de las autoridades sanitarias es que el virus se convierta en end¨¦mico en Europa, como ya lo es en algunos pa¨ªses de ?frica. Esto querr¨ªa decir que habr¨ªa brotes con relativa frecuencia, ya sea porque no se llegue a frenar el contagio en humanos, o porque llegue a la fauna y los animales se conviertan en reservorio desde el cual el virus salte de forma recurrente a las personas. ¡°Por eso es muy importante el aislamiento de los infectados, pero tambi¨¦n de sus mascotas. Porque como el virus entre en contacto con otros animales, ser¨¢ mucho m¨¢s dif¨ªcil de controlar. Y es la raz¨®n por la que es tan importante descubrir cu¨¢l es el origen de este brote¡±, subraya Rivas Gonz¨¢lez.

En cualquier caso, este experto recuerda que las caracter¨ªsticas de Europa y ?frica son muy distintas: ¡°No podemos compararnos con lo que pasa all¨ª. Nosotros tenemos una ventaja clave, que es el diagn¨®stico¡±. Zurriaga coincide: ¡°La identificaci¨®n de posibles casos es muy diferente. Tambi¨¦n su gravedad: en ?frica la letalidad por esta enfermedad [de aproximadamente un 1% de los casos en la variante que circula por Europa] suele deberse a sepsis; aqu¨ª eso es mucho m¨¢s complicado¡±.

Una ¡°casi imposible¡± pandemia

¡°Una pandemia es muy improbable, dir¨ªa que casi imposible¡±, se?ala Rivas Gonz¨¢lez. Zurriaga lo ve ¡°muy poco factible¡±. ¡°Si por ejemplo se hiciera end¨¦mico en pa¨ªses de Latinoam¨¦rica, con los que tenemos mucho contacto, podr¨ªamos tener casos sistem¨¢ticos en lugar de espor¨¢dicos¡±, a?ade.

Ca?elles tampoco lo ve un escenario probable, pero es cauta: ¡°No podemos descartar del todo la transmisi¨®n por aerosoles, como pas¨® con la covid. Si se confirmase, la pandemia ser¨ªa m¨¢s probable¡±.

Como recuerda Jos¨¦ Jim¨¦nez, investigador de virus emergentes en el Departamento de Enfermedades Infecciosas del King¡¯s College de Londres, ¡°todav¨ªa hay demasiadas cosas que no sabemos sobre el brote actual y si algo deber¨ªamos haber aprendido ya es que los virus siempre nos pueden sorprender¡±.

Las comparaciones con la covid son inevitables. Sin embargo, incluso en este ¡°improbable¡± escenario, la pandemia ser¨ªa muy distinta, ya que, como apunta Jim¨¦nez, hay muchas diferencias entre ambos virus: el SARS-CoV-2 era desconocido y contra ¨¦l no hab¨ªa vacunas ni medicamentos; para el de la viruela del mono no hay espec¨ªficos, pero los que se usaban para la viruela humana parecen ser bastante efectivos. Es un virus, adem¨¢s, que se conoce desde hace medio siglo, ha provocado brotes frecuentes en ?frica y tiene una estructura mucho m¨¢s estable que la del pat¨®geno que ha causado la covid. ¡°Tenemos las herramientas para frenarlo¡±, zanja Ca?elles.