Las v¨ªctimas tendr¨¢n una v¨ªa directa para asesorar al Defensor en su investigaci¨®n sobre los abusos en la Iglesia

Las v¨ªctimas de pederastia en la Iglesia espa?ola contar¨¢n con una v¨ªa directa para asesorar al Defensor del Pueblo en su investigaci¨®n, seg¨²n ha informado ese lunes el titular de la instituci¨®n, ?ngel Gabilondo, en la Comisi¨®n Mixta de Relaciones con el Defensor del Pueblo, en la que ha comparecido a petici¨®n propia para ¡°dar cuenta¡± del trabajo que ha realizado hasta ahora sobre este asunto. Este canal de asesoramiento se llamar¨¢ Foro de Asociaciones, un espacio donde los representantes de las organizaciones de v¨ªctimas de abusos que lo deseen aportar¨¢n ¡°su experiencia y posiciones a trav¨¦s de diferentes sesiones de trabajo¡± para reunir indicaciones y recomendaciones que, posteriormente, el Defensor pueda incorporar en el informe final que el Congreso de los Diputados le encarg¨® hace tres meses. ¡°Es imprescindible contactar con las v¨ªctimas para conocer la verdad y para contrarrestar la injusticia. Solo a partir del reconocimiento de sus testimonios se puede propiciar una adecuada interpretaci¨®n de lo sucedido. De ah¨ª, que no pueda realizarse un informe sin ellas¡±, ha declarado.

Gabilondo tambi¨¦n ha anunciado la creaci¨®n de dos equipos de trabajo. El primero, una comisi¨®n asesora formada por 17 especialistas y tres miembros de la oficina del Defensor del Pueblo, el mismo Gabilondo y sus dos adjuntas, Teresa Jim¨¦nez-Becerril y Patricia B¨¢rcena. El resto de integrantes son asesores externos del ¨¢mbito profesional y acad¨¦mico, con experiencia en la atenci¨®n a las v¨ªctimas, con conocimientos jur¨ªdicos y en victimolog¨ªa. Entre ellos, destacan Miguel Garc¨ªa-Bar¨® L¨®pez, catedr¨¢tico de Filosof¨ªa de la Universidad Pontificia Comillas y coordinador del Proyecto Repara ¡ªoficina de atenci¨®n a v¨ªctimas de abusos de la Archidi¨®cesis de Madrid¡ª; Mar¨ªa Jes¨²s Raimundo, fiscal de la Secretar¨ªa T¨¦cnica de la Fiscal¨ªa General del Estado; Letizia De la Hoz, letrada y abogada de Derecho can¨®nico por la Nunciatura Apost¨®lica; Lourdes Menacho Vega, Presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Educadoras y Educadores Sociales; Mar¨ªa Vilches Fern¨¢ndez, fiscal y letrada de Igualdad y Violencia de G¨¦nero del Consejo General del Poder Judicial; Juli¨¢n Carlos R¨ªos, abogado penalista y mediador en procesos de justicia restaurativa en delitos de terrorismo y en abusos sexuales en el seno de la Iglesia cat¨®lica; Josep Mar¨ªa Tamarit, catedr¨¢tico de Derecho Penal en la Universitat Oberta de Catalunya y coautor del informe Abusos sexuales en la Iglesia Cat¨®lica: an¨¢lisis del problema y de la respuesta jur¨ªdica e institucional y la tambi¨¦n coautora del mismo informe Gema Varona, profesora de Victimolog¨ªa y Pol¨ªtica Criminal en la Universidad del Pa¨ªs Vasco. El trabajo de este grupo consistir¨¢ en recopilar los testimonios recogidos, valorarlos y analizarlos, con el objetivo de elaborar un informe que refleje la dimensi¨®n real del problema de los abusos en la Iglesia y su encubrimiento. ¡°La comisi¨®n asesora no es un tribunal¡±, ha matizado Gabilondo. Los trabajos comenzar¨¢n, previsiblemente, a comienzos de julio.

El otro equipo ser¨¢ una unidad integrada por 10 personas asalariadas a tiempo completo para atender a las v¨ªctimas. Todas ellas tendr¨¢n experiencia en este tipo de entrevistas. El Defensor ha anunciado que dispondr¨¢ de un piso en Madrid donde se abrir¨¢ una oficina dedicada a la atenci¨®n de las v¨ªctimas. Un local fuera de la sede de la instituci¨®n que garantice la privacidad durante el proceso de escucha de los afectados. Del mismo modo, habilitar¨¢ un buz¨®n electr¨®nico ¡ªaccesible desde su p¨¢gina web¡ª y un tel¨¦fono de contacto. La funci¨®n de este equipo, seg¨²n ha dicho Gabilondo, es la de recopilar datos para el informe, pero no ser¨¢ ¡°una unidad de terapia de las v¨ªctimas¡±. Sin embargo, el Defensor ha enfatizado el papel central que tienen quienes sufrieron abusos en todo el proceso de investigaci¨®n, en el que se buscar¨¢ un trato cercano. ¡°Es importante el respeto y la escucha a quienes por abuso han venido a ser v¨ªctimas. A quienes, y no son pocos casos, han vivido una vida profundamente marcada por dichos abusos, con grav¨ªsimas consecuencias. Y a quienes con su dignidad son el centro de lo que haya de hacerse en esta encomienda. Sin considerarlas nunca un medio para la elaboraci¨®n de un informe, sino estimando clave su dolor¡±, ha destacado.

El Defensor tambi¨¦n ha solicitado a EL PA?S acceso a los casos de pederastia en la Iglesia Cat¨®lica que haya verificado desde 2018, cuando comenz¨® su investigaci¨®n period¨ªstica sobre este tema, con el fin de incorporar ese material a la elaboraci¨®n de dicho informe. Entre los datos solicitados se encuentran los dos informes que el diario ha entregado al Vaticano y a la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE); el primero, el pasado diciembre, con 251 casos in¨¦ditos y el segundo, la semana pasada, con 278 testimonios que se?alan 200 casos nuevos, adem¨¢s de a otros 44 sacerdotes que ya hab¨ªan sido denunciados anteriormente. Hasta ahora han salido a la luz al menos 840 casos y 1.594 v¨ªctimas de pederastia clerical, seg¨²n la contabilidad que lleva este diario a falta de datos oficiales.

En cuanto a la fecha l¨ªmite para entregar el informe al Congreso, Gabilondo no ha avanzado nada. No obstante, s¨ª ha precisado que comparecer¨¢ peri¨®dicamente en la comisi¨®n mixta del Congreso y el Senado para ir informando sobre sus avances. En principio, tambi¨¦n prev¨¦ presentar un documento en 2023, antes de que acabe la legislatura, para resumir lo investigado hasta ese momento, aunque el trabajo proseguir¨¢ hasta que sea necesario. El cargo del Defensor del Pueblo no culmina con la legislatura, sino que fue elegido el pasado noviembre por un periodo de cinco a?os.

El objetivo principal del informe encargado por el Congreso es determinar los hechos, establecer formas de reparaci¨®n, que pueden explorar las posibilidades de la responsabilidad civil, y sugerir propuestas de actuaci¨®n y recomendaciones de cambios legales para mejorar la atenci¨®n de las instituciones hacia este problema. De momento, no se ha especificado si se realizar¨¢ un estudio sociol¨®gico sobre los datos recabados. En Francia, la comisi¨®n encargada de abordar esta cuesti¨®n elabor¨® un informe a trav¨¦s de una encuesta donde se calcul¨® que al menos 330.000 franceses fueron v¨ªctimas de la pederastia clerical desde mediados del siglo pasado.

La relaci¨®n de la Iglesia con la investigaci¨®n del Defensor sigue siendo un interrogante. Gabilondo ha dicho durante la comparecencia que, en un primer momento, solicit¨® a los obispos que formasen parte de ella, pero que dieron un paso atr¨¢s. Los obispos afirmaron el pasado abril que no participar¨ªan en dicha comisi¨®n, y justificaron que no pod¨ªan ser ¡°juez y parte¡± en este tipo de iniciativas. No obstante, tanto el presidente de la CEE como la Confer (Conferencia Espa?ola de Religiosos) han a?adido que ¡°colaborar¨¢n en todo lo que les pida¡±. Paralelamente, el despacho de abogados Cremades & Calvo-Sotelo ¡ªbufete al que los obispos espa?oles le han encargado una auditoria sobre la pederastia en la Iglesia en las ¨²ltimas d¨¦cadas¡ª se ha mostrado abierto a cooperar. Los trabajos de este bufete han atendido en los ¨²ltimos dos meses unas 60 denuncias de v¨ªctimas, aunque la mitad corresponden con hechos que sucedieron fuera del ¨¢mbito eclesi¨¢stico.

Tanto el acceso a los archivos eclesi¨¢sticos como a las declaraciones de los posibles responsables ¡ªobispos, superiores de ¨®rdenes, miembros del clero, etc¨¦tera¡ª es esencial para que el Defensor desarrolle un informe completo del problema. No obstante, ni las di¨®cesis ni las congregaciones est¨¢n obligadas a abrir sus archivos, ni tampoco a entregar los datos de los casos que han conocido o juzgado en sus propios tribunales, un derecho recogido en los Acuerdos entre el Estado Espa?ol y la Santa Sede vigente desde 1979.

Si conoce alg¨²n caso que no ha sido denunciado o quiere aportar nueva informaci¨®n a los ya publicados, puede escribirnos a la direcci¨®n de correo abusos@elpais.es