Al menos 216.000 casos de pederastia en la Iglesia francesa, seg¨²n una comisi¨®n independiente
Dos a?os y medio de investigaciones dan lugar a casi medio centenar de propuestas para evitar nuevos abusos, entre ellas reformar el secreto de confesi¨®n
Probablemente la cifra total de v¨ªctimas de pederastia en la Iglesia francesa no se conozca nunca. Pero los datos revelados este martes por la comisi¨®n independiente que ha investigado el alcance de este lacra desde 1950 resultan ¡°abrumadores¡± a pesar de que no son m¨¢s que ¡°una estimaci¨®n m¨ªnima¡±, seg¨²n los autores de la investigaci¨®n. Al menos 216.000 menores fueron v¨ªctimas de pederastia en el seno de la Iglesia cat¨®lica francesa en los ¨²ltimos 70 a?os, concluye el informe final de la Comisi¨®n Independiente sobre Abusos en la Iglesia Cat¨®lica (Ciase). La cifra aumenta hasta los 330.000 si se cuentan tambi¨¦n los abusos cometidos por laicos como ense?antes, catequistas o responsables de movimientos juveniles.
¡°Estos n¨²meros son abrumadores y no pueden quedarse sin consecuencias, reclaman medidas muy fuertes¡± de la Iglesia cat¨®lica, dijo el presidente de la comisi¨®n, Jean-Marc Sauv¨¦, al presentar en Par¨ªs el informe de 2.500 p¨¢ginas, que tambi¨¦n contiene 45 ¡°recomendaciones¡± tanto en materia de reformas legales como estructurales de la Iglesia, adem¨¢s de proponer ¡°indemnizaciones¡± para las v¨ªctimas que la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica a¨²n debe especificar.
El voluminoso documento demuestra, seg¨²n Sauv¨¦, que los ¡°silencios¡± y ¡°fallos¡± de la Iglesia cat¨®lica francesa ante los casos de pederastia desde 1950 a 2020 tienen un ¡°car¨¢cter sist¨¦mico¡± que requieren profundas reformas de la instituci¨®n y revisar algunas de sus pr¨¢cticas, incluido delimitar bien el secreto de confesi¨®n. En este sentido, la Ciase propone ¡°transmitir un mensaje claro, indicando a los confesores y a los fieles que el secreto de confesi¨®n no puede derogar la obligaci¨®n, prevista por el c¨®digo penal (¡) de se?alar a las autoridades judiciales y administrativas los casos de violencias sexuales infligidas a un menor o una persona vulnerable¡±.
¡°Hasta comienzos de los a?os 2000, constatamos una indiferencia profunda y cruel ante las v¨ªctimas. No se las cree, no se las escucha, se considera que pueden haber contribuido a lo que les pas¨®¡±, se?al¨® Sauv¨¦. Por ello, la Ciase es ¡°un¨¢nime¡± en su conclusi¨®n: ¡°La Iglesia no supo ver, no supo escuchar, no supo captar las se?ales d¨¦biles¡± y, si las v¨ªctimas no hubieran, por fin, tomado la palabra,¡±nuestra sociedad seguir¨ªa ignorando o negando lo que pas¨®¡±.
En el informe se establece adem¨¢s una ¡°estimaci¨®n m¨ªnima¡± de ¡°entre 2.900 y 3.200¡å sacerdotes y otros responsables eclesi¨¢sticos responsables de abusos contra menores, lo que supone alrededor del 3% del cuerpo religioso en Francia.
¡°No puede haber un futuro com¨²n sin un trabajo de verdad, perd¨®n y reconciliaci¨®n¡±, insisti¨® Sauv¨¦. La Ciase ¡°ha contribuido al trabajo de verdad, ahora le toca a la Iglesia actuar y recuperar la confianza de los fieles y el respeto de la sociedad¡±, agreg¨® al entregar el informe al presidente de la Conferencia Episcopal (CEF), ?ric de Moulins-Beaufort, y a la presidenta de la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Francia (Corref), V¨¦ronique Margron.
La amplitud de las cifras reveladas ¡°nos perturba, nos abruma, supera lo que supon¨ªamos¡±, reconoci¨® Moulins-B¨¦aufort. El informe ¡°nos averg¨¹enza, nos espanta¡±, admiti¨® el tambi¨¦n arzobispo de Reims, que expres¨® su ¡°determinaci¨®n a actuar para que el rechazo a escuchar, la intenci¨®n de silenciar, de ocultar¡± denunciados por la Ciase ¡°desaparezcan¡± y haya un verdadero cambio de actitud y de respuesta, si bien m¨¢s tarde reconoci¨® que todav¨ªa queda mucho por discutir, empezando por la cuant¨ªa de las indemnizaciones y de d¨®nde proceder¨¢ el dinero para pagarlas.
¡°Mi deseo este d¨ªa es pedir perd¨®n, perd¨®n a cada uno y cada una¡± de las v¨ªctimas, agreg¨® el presidente de la Conferencia Episcopal. Desde Roma, el papa Francisco manifest¨® su ¡°dolor¡± por el contenido del informe. ¡°Su pensamiento va ante todo a las v¨ªctimas, con gran dolor, por sus heridas, y agradecimiento, por su valent¨ªa en la denuncia, y a la Iglesia de Francia, porque, en la conciencia de esta terrible realidad, unida al sufrimiento del Se?or por sus hijos m¨¢s vulnerables, pueda embarcarse en un camino de redenci¨®n¡±, dijo el Vaticano en un comunicado.
Unas palabras que, sin embargo, ni reconfortan ni convencen a todas las v¨ªctimas. ¡°Ustedes deben pagar por todos sus cr¨ªmenes¡±, dijo ante la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica Fran?ois Devaux, una de las figuras m¨¢s conocidas del movimiento de denuncia de pederastia en la Iglesia francesa y que reclam¨® un ¡°Concilio Vaticano III¡± para abordar la inmensidad de las reformas pendientes.
Devaux agradeci¨® a la Ciase un trabajo que ha sido ¡°como caer en una fosa com¨²n de almas trituradas de la Iglesia¡± para revelar ¡°cr¨ªmenes y delitos atroces en masa¡±, cometidos ¡°durante d¨¦cadas¡± sin que la jerarqu¨ªa francesa ni ¡°un papa abonado a los ausentes, que prefiri¨® proteger a los que contribuyeron a esta mec¨¢nica antes que a las v¨ªctimas¡±, lo frenaran. ¡°Ha habido una traici¨®n de la confianza, de la moral, se ha traicionado a los ni?os, a la inocencia del pueblo, es una traici¨®n del evangelio, de todo lo que somos¡±, denunci¨® Devaux, presidente de la ya disuelta asociaci¨®n Palabra Liberada, la primera organizaci¨®n de v¨ªctimas de un cura pederasta que, en 2016 en Lyon, rompi¨® el silencio que pesaba hasta entonces sobre esta lacra. Fue la responsable de llevar hasta los tribunales el caso m¨¢s emblem¨¢tico, el del cardenal y entonces arzobispo de Lyon Philippe Barbarin, acusado de haber ocultado varios casos.
La Conferencia Episcopal de Francia (CEF) decidi¨® encargar a una comisi¨®n independiente la tarea de investigar posibles casos de pederastia desde 1950 y ¡°las razones que favorecieron la manera en que fueron tratados esos asuntos¡±, adem¨¢s de pedirle que proponga medidas para evitar nuevos casos en el futuro, a finales de 2018, justo en v¨ªsperas del juicio a Barbarin. En esa ¨¦poca, se multiplicaban en toda Francia los procesos contra religiosos por abusos sexuales de menores o por silenciar denuncias recibidas, en momentos adem¨¢s en que crec¨ªa el debate nacional ¡ªgracias entre otros a Palabra Liberada, que llev¨® a juicio a Barbarin¡ª y hasta internacional sobre el tema, con casos muy mediatizados en Estados Unidos, Europa y hasta Australia. En febrero de 2019, el papa Francisco convoc¨® un s¨ªnodo sobre la pederastia en el que acept¨® pasar de la ret¨®rica a ¡°medidas concretas y eficaces¡±. A finales de ese a?o, el Vaticano anunci¨® dos nuevas leyes que, entre otras cosas, liquidan el secreto pontificio ¡ªque viene impuesto desde 1972 en asuntos e investigaciones de particular gravedad¡ª en los casos de abusos a menores por parte de representantes de la Iglesia.
El mandato fue entregado a Sauv¨¦, un cat¨®lico practicante y exvicepresidente del Consejo de Estado, que convoc¨® a 21 hombres y mujeres de diferentes ¨¢mbitos ¡ªdesde expertos en derecho a te¨®logos, psic¨®logos o trabajadores sociales¡ª y diversas confesiones religiosas, incluso no creyentes. As¨ª naci¨® la Ciase, que unos seis meses despu¨¦s de su constituci¨®n, en junio de 2019, empez¨® a buscar testimonios con los que componer su investigaci¨®n y sus propuestas, ahora presentadas.
La cifra de 216.000 v¨ªctimas es una ¡°estimaci¨®n estad¨ªstica¡± extra¨ªda sobre todo de una investigaci¨®n realizada por el Instituto Nacional de Salud sobre una base representativa de la sociedad de 28.000 personas y que estudi¨® los abusos sexuales de menores en un marco m¨¢s amplio, de toda la sociedad. De acuerdo con el informe, 5,5 millones de personas en Francia han sido v¨ªctimas de abusos sexuales antes de cumplir la mayor¨ªa de edad. De ellas, 216.000 lo habr¨ªan sufrido en el seno de la Iglesia cat¨®lica, es decir, algo menos de 4% del total de casos de pederastia en Francia. Aunque el estudio demuestra que la mayor parte de los abusos de menores se cometen en el marco de la familia o los amigos, ¡°la Iglesia cat¨®lica es, m¨¢s all¨¢ de los c¨ªrculos familiares y amicales, el lugar en el que la prevalencia de violencia sexual es la m¨¢s elevada¡±, por delante de otras esferas de socializaci¨®n como la escuela p¨²blica, los campamentos, clubs deportivos o actividades culturales, indica la Ciase, que tambi¨¦n hizo un llamamiento a testimonios que le permiti¨® establecer casi 6.500 contactos de v¨ªctimas o personas cercanas, adem¨¢s de investigar en los archivos eclesi¨¢sticos y los civiles, tanto los judiciales como policiales y hasta de la prensa.
Al contrario que los casos generalizados de pederastia, donde la mayor parte de las v¨ªctimas son mujeres, en el caso de la Iglesia cat¨®lica hay una ¡°particularidad neta¡±, se?al¨® Sauv¨¦: la gran mayor¨ªa de los abusos (casi 80%) los sufrieron los varones, especialmente ni?os entre 10 y 13 a?os. El informe concluye que la mayor parte de las agresiones, alrededor del 56%, se produjeron entre 1950 y 1970. Un hecho que puede deberse a diversos factores, desde la ca¨ªda en las cifras de religiosos como a la de franceses que acuden a instituciones religiosas, ¡°cuya huella social se ha reducido las ¨²ltimas d¨¦cadas¡±, se?al¨® Sauv¨¦, que en otras ocasiones tambi¨¦n ha recordado que muchas de las v¨ªctimas ¡ªcomo en otras agresiones sexuales¡ª tardan a veces d¨¦cadas en recordar o denunciar lo sucedido, por lo que es posible que casos m¨¢s recientes no hayan sido a¨²n revelados. En cualquier caso, subray¨® Sauv¨¦, ¡°hay que abandonar la idea de que la violencia sexual en la Iglesia cat¨®lica ha sido completamente erradicada, que el problema ya est¨¢ superado. El problema subsiste¡±, asever¨®.
Si conoce alg¨²n caso de abusos sexuales que no haya visto la luz, escr¨ªbanos con su denuncia a abusos@elpais.es
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