Condenados a prisi¨®n un cura jubilado de L¨¦on y su hermano por abusar sexualmente de un joven con discapacidad
La Audiencia Provincial de Le¨®n ha impuesto una pena de dos a?os y tres meses de c¨¢rcel al sacerdote y cuatro a?os y medio a su familiar por los hechos, que sucedieron en Carrizo de la Ribera en 2018
EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.
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Un cura jubilado de Le¨®n y su hermano han sido condenados por la Audiencia Provincial de Le¨®n por un delito continuado de abusos sexuales a un joven con discapacidad en Carrizo de la Ribera (Le¨®n) entre abril y septiembre de 2018, cuando el chico ten¨ªa 26 a?os. El sacerdote ha sido sentenciado a dos a?os y tres meses de c¨¢rcel y su familiar a cuatro a?os y medio. Tambi¨¦n tendr¨¢n que pagar ¡°conjunta y solidariamente¡± una indemnizaci¨®n de 6.000 euros por da?os morales. Tanto el cl¨¦rigo como su hermano tendr¨¢n que superar ¡°un programa de reeducaci¨®n sexual tendente a evitar comportamientos futuros¡± como los enjuiciados, se?ala la sentencia. La di¨®cesis ha subrayado a este diario que no quiere pronunciarse sobre la decisi¨®n judicial, ya que ¡°no es firme¡± y los condenados la han recurrido. ¡°No vamos a hacer declaraciones ni nota de prensa al respecto¡±, ha afirmado este lunes un portavoz. El religioso no era el p¨¢rroco del pueblo (de unos 2.335 habitantes), aunque s¨ª resid¨ªa all¨ª junto a su hermano cuando sucedieron los hechos y ofrec¨ªa sus servicios de forma espor¨¢dica, dado que estaba jubilado, en varios municipios de la monta?a occidental de Las Oma?as.
En la sentencia, los magistrados se?alan que la versi¨®n de la v¨ªctima ¡°resulta cre¨ªble, ya que a la verosimilitud de su testimonio se une una serie de corroboraciones perif¨¦ricas que hacen que dicho testimonio se constituya como una aut¨¦ntica prueba de cargo suficiente para quebrar la presunci¨®n de inocencia de los procesados¡±. Por su parte, los acusados, que se declaran inocentes, aseguran que la v¨ªctima ¡°busca dinero¡± y que se ha inventado todo. Sobre esto, el tribunal subraya que solo ha percibido cierta apat¨ªa del joven hacia el cura y su hermano, a los que ¡°no les culpabiliza de lo sucedido ni tampoco se observa que les guarde resentimiento¡±.
Seg¨²n los hechos probados de la sentencia, los abusos comenzaron en abril de 2018, cuando el sacerdote entabl¨® amistad con la v¨ªctima y empez¨® a llevarla con frecuencia a una finca que compart¨ªa con su hermano en el paraje de Valdemarsen, dentro del t¨¦rmino municipal de la localidad, donde los ahora condenados ten¨ªan colmenas, perdices, cangrejos y peces. A la v¨ªctima ¡°le gustaban mucho los animales y se divert¨ªa pescando y cogiendo cangrejos¡±. El joven comenz¨® a contarle confidencias al sacerdote, sobre sus problemas familiares y preocupaciones.
El cura, se se?ala en la sentencia, se benefici¨® de la confianza que hab¨ªa tejido con la v¨ªctima para abusar de ella: ¡°Aprovechando que se encontraban en un paraje lejano y despoblado, con la excusa de prepararle para cuando tuviera novia y pudiera tener hijos, con ¨¢nimo de satisfacer sus deseos sexuales, le empez¨® a tocar sus partes ¨ªntimas¡±. El sacerdote le dec¨ªa al joven que ¡°eso se lo hac¨ªa para saber si era f¨¦rtil y para que, cuando tuviera novia, pudiera tener hijos¡±, que no pod¨ªa cont¨¢rselo a nadie porque estaba bajo ¡°secreto de confesi¨®n¡±, que ¡°le iba a buscar una residencia donde hubiera muchas chicas con las que pudiera tener relaciones sexuales¡± y que ¡°le iba a incluir en su testamento y a regalarle alg¨²n animal¡±.
Durante esa misma primavera, el hermano del cl¨¦rigo invitaba a la v¨ªctima a su domicilio, ubicado encima del estanco que regentaba en la localidad, y le obligaba a que se recostase con ¨¦l en la cama para masturbarle. Al menos en una ocasi¨®n le lleg¨® a introducir el pene en la boca. El joven se volvi¨® m¨¢s agresivo, con problemas de trastornos alimenticios y de sue?o. Finalmente, le cont¨® lo que pasaba a uno de sus t¨ªos. La familia denunci¨® los hechos el 12 de septiembre y llev¨® a la v¨ªctima a urgencias. De hecho, la Audiencia tambi¨¦n condena a los acusados a abonar al servicio de salud de Castilla y Le¨®n 101,41 euros por la asistencia que la v¨ªctima recibi¨® en ese momento.
La Guardia Civil detuvo ese mismo d¨ªa a los abusadores, aunque a continuaci¨®n fueron puestos en libertad con cargos. Los condenados fueron ¡°explorados¡± por m¨¦dicos forenses, que emitieron un informe mental de cada uno de ellos donde se?alaban ¡°que ninguno de ellos padece alteraciones o enfermedades mentales que afecten a sus capacidades intelectivas¡±.
La di¨®cesis apart¨® entonces al cura de sus actividades pastorales ¡°por un tiempo prudencial¡±, aunque reclam¨® que se respetase la presunci¨®n de inocencia. Es decir, dej¨® de poder prestar sus servicios de manera espor¨¢dica, como ven¨ªa haciendo desde que se jubil¨®. El obispo abri¨® entonces un proceso can¨®nico. Este diario ha preguntado en qu¨¦ punto se encuentra dicha investigaci¨®n, pero no ha recibido respuesta. En su d¨ªa, el obispo tampoco inform¨® de si dicho sacerdote desarroll¨® su carrera eclesi¨¢stica en la di¨®cesis leonesa o fuera de ella. ¡°Es com¨²n que los curas, tras jubilarse, vuelvan a sus lugares de origen y ofrezcan su ayuda al obispo de la zona. Es probable que el obispo de Le¨®n le encargase ciertas actividades pastorales en parroquias peque?as, donde el sacerdote que lleva esa zona no se puede hacer cargo. Estamos hablando de pueblos muy peque?os¡±, comunic¨® en 2018 un portavoz de la di¨®cesis.
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