La Guardia Civil investiga por homicidio imprudente al due?o de los perros que mataron a una mujer en Zamora
La joven de 27 a?os falleci¨® en Roales del Pan (Zamora) tras abalanzarse sobre ella unos canes sin la presencia del propietario
La Guardia Civil investiga por un presunto delito de homicidio por imprudencia al due?o de los perros que este lunes mataron a una mujer en Roales del Pan (Zamora, 1.000 habitantes). Los agentes siguen analizando lo acontecido y un dron sobrevuela la zona este martes para recabar las ¨²ltimas pistas. El investigado se ha negado a declarar este martes ante el juez despu¨¦s de una noche acompa?ado por los agentes en el domicilio de La Hiniesta que comparte con su pareja en busca de pruebas, documentaci¨®n y m¨¢s detalles. La casa permanece en silencio m¨¢s all¨¢ de alg¨²n t¨ªmido ladrido de un perro dom¨¦stico no implicado en esta muerte, asomado a la verja cerrada a primera hora de la ma?ana.
El perro de raza husky que sol¨ªa corretear junto a Arancha C. por Roales del Pan (Zamora, 1.000 habitantes) se ha quedado sin due?a. La mataron otros canes este lunes por la tarde. Ella ten¨ªa 27 a?os y sali¨® a correr, como sol¨ªa hacer, por unos caminos entre su pueblo y el cercano La Hiniesta. Su mascota se qued¨® en casa. Las pistas de tierra ofrecen c¨®modas rutas para deportistas, paseantes o ciclistas solo molestados por el fr¨ªo viento del p¨¢ramo. Los perros de la jaur¨ªa del pastor Pedro G., Pedrito, de unos 60 a?os, se abalanzaron sobre la joven y ella apenas pudo avisar a su madre por tel¨¦fono. Un silbido del ganadero podr¨ªa haber detenido el ataque. Pero no estaba all¨ª y este martes Roales est¨¢ de luto.
Una descacharrada caravana con pacas de paja como ruedas y reconvertida en caseto para el pastor investigado sirve como escasa evidencia de que all¨ª hay rastro humano. No lo hubo en la tarde anterior, m¨¢s all¨¢ de los siete perros abalanzados sobre la fallecida, cuatro de ellos con la identificaci¨®n en regla y tres por confirmar su condici¨®n, seg¨²n la subdelegaci¨®n del Gobierno de Castilla y Le¨®n. La manada la conformaban tres mastines, dos pastores alemanes y dos cr¨ªas de estos ¨²ltimos. Perros sobradamente conocidos por vecinos de ambos municipios conectados por la misma carretera y esas mismas sendas. Los canes atacaban frecuentemente a perros dom¨¦sticos, simples caminantes o deportistas hartos de su presencia descontrolada, seg¨²n informan lugare?os de ambos n¨²cleos.
Las silenciosas calles de Roales contrastan con el bullicioso bar, monopolizado por el suceso. Los unos hablan de la importancia de encerrar a los animales; otros discuten sobre el estado de los cercados y la peligrosidad de estos ejemplares tan territoriales, y todos coinciden en la magnitud de la desgracia con ¡°la ni?a¡±. Un hombre que pasea a su perro por Roales se protege del relente con un abrigo de plumas coronado por un transistor cuya antena asoma del bolsillo superior. ¡°Se me ponen los pelos de punta¡±, lamenta.
?l y su esposa frecuentan esas pistas de tierra y acostumbran a atar a su perro cuando coinciden con m¨¢s gente, por si acaso alguien le tiene miedo. Una anciana se asoma a una puerta con bata y zapatillas negras, apesadumbrada por los hechos: ¡°Pobrecica, c¨®mo no la iba a conocer. La conozco desde que naci¨®, es medio familia m¨ªa. Los padres tienen que estar¡¡±. La joven Arancha C., hija ¨²nica, trabajaba como auxiliar de enfermer¨ªa en Zamora ciudad y viv¨ªa con sus padres en una casa cercana. Ellos fueron los primeros en acudir al lugar de los hechos. No pudieron hacer nada, tampoco los agentes desplazados. S¨ª ayudaron los psic¨®logos movilizados para asistir a los progenitores. Los veterinarios de la Junta de Castilla y Le¨®n custodian los siete ejemplares implicados mientras resuelven qu¨¦ hacer con ellos tras el ataque.
Las banderas ondean a media asta en el ayuntamiento en el primero de los tres d¨ªas de luto oficial decretados. El alcalde de la localidad, David Garc¨ªa (Vox), se ha emocionado al aludir a ella, ¡°siempre con una sonrisa¡±. ¡°Nos conocemos todos¡±, ha explicado, ¡°se est¨¢ investigando c¨®mo es posible que los perros hayan actuado de esta forma¡±. El regidor ha expresado el argumentario de su partido contra el lobo asegurando que su presencia en la zona influye en la ¡°agresividad¡± de los perros guardianes: ¡°Los animales son animales, no tenemos que perder esa percepci¨®n por mucho que algunos intenten decirnos lo contrario, tienen sus instintos, son animales de guardia, tenemos lobos y ¨²ltimamente han matado a 80 ovejas¡±. Garc¨ªa tambi¨¦n se ha preguntado c¨®mo la jaur¨ªa se encontraba ¡°sin el debido control del ganadero¡±.
Un vecino explica que hace no mucho los componentes de la manada de Pedrito ¡°mataron a un perico peque?o, m¨¢s listo que el demonio, junto al front¨®n¡±, mientras otros residentes, siempre bajo condici¨®n de anonimato, describen mordiscos y ¡°sustos¡± a personas y animales cuando los perros andaban sueltos. ¡°Era cuesti¨®n de tiempo¡±, reniegan con la cabeza. Las ovejas del investigado segu¨ªan pastando como si nada hasta que la Guardia Civil ha acudido con el ganadero para llev¨¢rselas de all¨ª.
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