La comisi¨®n del ¡®caso Boaventura¡¯ concluye que hubo ¡°abuso de poder y acoso¡± en la jerarqu¨ªa del Centro de Estudios Sociales de Coimbra
Una quincena de v¨ªctimas ha declarado ante los investigadores acad¨¦micos, que elevan a 14 la cifra de miembros del CES denunciados por abusos, negligencias o encubrimientos
La comisi¨®n independiente creada por el Centro de Estudios Sociales (CES) de la Universidad de Coimbra para investigar las denuncias de acoso sexual contra el soci¨®logo Boaventura de Sousa Santos, que dirigi¨® la instituci¨®n entre 1978 y 2019, observ¨® ¡°patrones de conducta de abuso de poder y acoso por parte de algunas personas que ejerc¨ªan posiciones superiores en la jerarqu¨ªa del CES¡±. Los testimonios y las pruebas recogidas durante los 11 meses de trabajo de la comisi¨®n no permiten, sin embargo, esclarecer la existencia de algunas situaciones denunciadas p¨²blicamente, aunque en sus conclusiones finales destacan su ¡°coherencia¡± y ¡°consistencia¡±. ¡°Los testimonios y las denuncias presentadas son, en su mayor¨ªa, testimonios extensos, con informaci¨®n precisa y detallada, situadas en el espacio y en el tiempo, describiendo pormenores de reuniones de trabajo, conversaciones, situaciones de convivencia y otras, presentando, en su mayor¨ªa, consistencia entre s¨ª y coherencia interna¡±, se?alan en la primera de las conclusiones.
La creaci¨®n de esta comisi¨®n se produjo tras la publicaci¨®n del libro Sexual Misconduct in Academia: Informing an Ethics of Care in the University (Mala conducta sexual en la academia: sobre una ¨¦tica del cuidado en la universidad), editado por Routledge, donde tres antiguas investigadoras del Centro de Estudios Sociales, Lieselotte Viaene, Catarina Laranjeiro y Miye Nadya, denunciaban un ambiente de abuso de poder y acoso sexual en una instituci¨®n que no citaban, pero que fue identificada como el CES. De igual modo, se concluy¨® que las dos personas a las que denunciaban en el texto eran el fundador del centro y soci¨®logo de renombre internacional, Boaventura de Sousa Santos, y el profesor Bruno Sena Martins. El libro ser¨ªa retirado m¨¢s tarde por la editora, pero tambi¨¦n propici¨® la aparici¨®n de nuevos testimonios de mujeres que se declararon v¨ªctimas del soci¨®logo, como la activista mapuche Moira Mill¨¢n y la diputada brasile?a Bella Gon?alves.
Hasta abril de 2023 se contaban ocho mujeres entre las denunciantes, pero el informe presentado este mi¨¦rcoles revela un universo de v¨ªctimas muy superior. La comisi¨®n recibi¨® denuncias de 32 personas ¨Cmujeres en el 78% de los casos¨C, de las cuales un 48% se present¨® como v¨ªctimas, lo que elevar¨ªan los casos a una quincena. Otras personas denunciaron que hab¨ªan sido testigos de malas pr¨¢cticas. Los estudiantes de doctorado y los investigadores posdoctorales son los grupos que m¨¢s denuncias presentaron.
Asimismo, la cifra de denunciados resulta sorprendente. Catorce personas del CES fueron denunciadas por una o varias personas por diferentes actuaciones y todas ellas prestaron declaraci¨®n ante la comisi¨®n. La mitad de los denunciados lo fueron por encubrimiento, el 21% por negligencia y un 29% por alg¨²n tipo de acoso o abuso, ya fuese moral, sexual o de poder. Las denuncias m¨¢s habituales describieron situaciones de acoso moral (28%), acoso o abuso sexual (27%) y abuso de poder (27%).
En un informe de 114 p¨¢ginas, que ahora se remitir¨¢ a la Fiscal¨ªa, la comisi¨®n relata que el CES estuvo dirigido durante a?os por un c¨ªrculo reducido de poder, que tomaba todas las decisiones, apartaba o promocionaba profesionales por criterios arbitrarios y se saltaba de forma permanente las barreras entre vida profesional y privada. Entre las situaciones de acoso sexual se citan la ¡°erotizaci¨®n de gestos¡± de algunos investigadores principales hacia las alumnas, ¡°la excesiva proximidad y contacto corporal no autorizado¡±, ¡°besos h¨²medos y demorados¡±, ¡°miradas lascivas¡±, ¡°propuestas de relaciones ¨ªntimas¡± a cambio de beneficios acad¨¦micos o la incitaci¨®n al consumo de alcohol con la intenci¨®n de obtener ¡°un contacto sexual¡±.
En cuanto al abuso sexual, se citaron tocamientos no consentidos, relaciones sexuales con personas en posici¨®n de inferioridad profesional cuando se encontraban ¡°bajo el efecto de sustancias y sin condiciones plenas para dar su consentimiento¡±. Sobre pr¨¢cticas de acoso moral se enumeran, entre otras, la ¡°humillaci¨®n y descalificaci¨®n sistem¨¢tica y agresiva¡± de algunos profesores e investigadores principales respecto al trabajo producido, contactos con alumnos en ¡°horas impropias (a veces de madrugada) para tratar asuntos no urgentes a veces para satisfacer caprichos personales¡± o comentarios despreciativos hacia la vestimenta.
Los denunciados negaron las acusaciones en su declaraci¨®n ante la comisi¨®n y las atribuyeron a razones ¡°pol¨ªticas, ideol¨®gicas, personales o acad¨¦micas¡±, aunque ¡°una minor¨ªa confirm¨® varios de los hechos, en particular la existencia de relaciones ¨ªntimas de cariz sexual entre profesores/investigadores y alumnas/investigadoras y la presencia de situaciones de acoso moral y de abuso de poder¡±.
En sus conclusiones, la comisi¨®n verific¨® que actividades informales de integraci¨®n ¡°generaron situaciones inadecuadas al contexto acad¨¦mico¡± e identific¨® situaciones de vulnerabilidad en los estudiantes procedentes del extranjero. Los investigadores se?alan que la ¡°jerarqu¨ªa piramidal¡± y una cultura de la informalidad propiciaron ¡°situaciones de conflicto de intereses, acoso y abuso de poder¡±.
En un comunicado remitido horas despu¨¦s de la publicaci¨®n del informe, Boaventura de Sousa Santos asegur¨® que se sent¨ªa ¡°m¨¢s tranquilo que hace un a?o¡± en lo personal y ¡°m¨¢s preocupado¡± como fundador del CES. ¡°El informe se centra en cuestiones como el abuso de poder, que no comparto¡±, se?ala el soci¨®logo, que tambi¨¦n lamenta que la junta directiva del CES no haya puesto fin ¡°al clima de sospecha¡± contra ¨¦l. Adem¨¢s, destaca que la comisi¨®n se?ala que ¡°las versiones presentadas por varios denunciantes y varios acusados eran, en muchas situaciones, incompatibles entre s¨ª, lo que hac¨ªa impracticable valorar la evidencia de las pruebas¡±.
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