Javier Moreno, bi¨®logo: ¡°Hemos tenido el peor brote de leishmaniasis de Europa al lado de Madrid y esto puede volver a ocurrir¡±
El Instituto de Salud Carlos III presenta un detallado estudio que analiza las causas del episodio que ha provocado 800 contagios de la enfermedad parasitaria al sur de la capital desde 2010
Hace 14 a?os, a solo 20 kil¨®metros de la Puerta del Sol de Madrid, en Fuenlabrada, empez¨® a producirse un masivo e inesperado episodio de contagios al ser humano de una enfermedad de origen animal, la leishmaniasis. Ha sido el mayor brote ocurrido en Europa de esta infecci¨®n causada por un par¨¢sito, que en su forma m¨¢s grave, la visceral, llega a ser mortal en el 90% de los casos si no es tratada a tiempo. El Servicio de Epidemiolog¨ªa de la Comunidad de Madrid detect¨® por primera vez el incremento inusual de casos a finales de 2010, la primera de las sorpresas con la que se iban a topar los responsables sanitarios. Nadie esperaba entonces que el brote llegara a afectar a cerca de 800 personas durante m¨¢s de una d¨¦cada. M¨¢s chocante a¨²n fue descubrir que el origen de una enfermedad, habitualmente asociada a los perros, eran las liebres y conejos que superpoblaban Bosquesur, un enorme parque forestal de m¨¢s de 550 hect¨¢reas. El Instituto de Salud Carlos III acaba de publicar un detallado informe titulado Estudio integral del brote comunitario de Leishmaniasis en la Comunidad de Madrid que analiza lo ocurrido. Francisco Javier Moreno Nuncio (Sevilla, 59 a?os), responsable de la Unidad de Leishmaniasis y Enfermedad de Chagas del Centro Nacional de Microbiolog¨ªa, es uno de sus editores.
Pregunta. ?Fue realmente tan excepcional el brote?
Respuesta. S¨ª. Es algo de lo que no hay precedentes y que nadie esperaba que ocurriera. La leishmaniasis es end¨¦mica en Espa?a, pero los brotes que hab¨ªamos tenido eran peque?os. Nunca hab¨ªa pasado algo parecido en la cuenca mediterr¨¢nea.
P. ?Qu¨¦ ocurri¨®?
R. Varias cosas coincidieron hasta formar una tormenta perfecta. La primera fue el entorno. Bosquesur es un enorme espacio que se dej¨® sin construir entre ciudades densamente pobladas.
P. Un parque forestal...
R. S¨ª. Un para¨ªso para liebres y conejos, con alimento disponible y sin depredadores ni actividades como la caza.
P. ?No se sab¨ªa que esto era un riesgo?
R. No. Algunos estudios hab¨ªan mostrado que c¨¢nidos salvajes (lobos, zorros...) son un reservorio del par¨¢sito. Alg¨²n otro tambi¨¦n hab¨ªa apuntado a peque?os roedores. Pero el papel de liebres y conejos era desconocido. En Bosquesur hab¨ªa muchos, pero es que adem¨¢s el porcentaje de infectados era muy elevado, del 30% y el 17% de los conejos.
P. ?C¨®mo llega despu¨¦s el par¨¢sito a las personas?
R. A trav¨¦s de los fleb¨®tomos, un insecto volador que, al igual que los mosquitos, necesita la sangre de los mam¨ªferos para completar el ciclo reproductivo. Si un fleb¨®tomo pica a un animal infectado vivir¨¢ su propio proceso infeccioso y, pasados unos siete d¨ªas, podr¨¢ transmitir el par¨¢sito.
P. ?Y en Bosquesur hab¨ªa muchos fleb¨®tomos?
R. S¨ª. Crecen muy bien entre la hojarasca y lugares con materia org¨¢nica, especialmente las madrigueras. Hab¨ªa zonas en las que se recog¨ªan m¨¢s de 150 insectos por metro cuadrado.
P. Pero todas esos elementos deben estar presentes en m¨¢s sitios...
R. Pueden estarlo, pero no en esa magnitud. Hist¨®ricamente, en estas zonas del sur de Madrid algunos cazadores sufr¨ªan leishmaniasis cut¨¢nea, por lo que podemos concluir que el par¨¢sito ya estaba all¨ª. Exist¨ªa un ciclo silvestre con las liebres y conejos, pero afectaba a pocas personas porque las concentraciones eran bajas. Bosquesur dio lugar a un espacio perfecto para que ese ciclo silvestre creciera hasta alcanzar zonas densamente pobladas donde, adem¨¢s, pr¨¢cticamente nadie ten¨ªa inmunidad previa.
P. Cuando uno piensa en estas cosas, se las imagina en zonas deforestadas y reci¨¦n habitadas de la selva de Brasil, no a 20 kil¨®metros del centro de Madrid...
R. Esto demuestra la importancia de gestionar adecuadamente los espacios naturalizados periurbanos.
P. ?Los fleb¨®tomos infectados entraron en las casas?
R. Igual no entraron, pero estaban en todo el entorno. Si sal¨ªas a pasear al parque, era muy posible que te picaran. Tambi¨¦n en las terrazas de los bares y restaurantes cercanos. Y en patios y jardines.
P. Pues 800 infectados parecen pocos...
R. Eso son los casos diagnosticados por la enfermedad. Hay miles de asintom¨¢ticos cuyo sistema inmunitario hizo frente a la infecci¨®n sin problemas. Una encuesta epidemiol¨®gica revel¨® que hasta una de cada cinco vecinos hab¨ªa estado en contacto con el par¨¢sito.
P. ?Qu¨¦ es la leishmaniasis?
R. Es una enfermedad parasitaria causada por un protozoo llamado Leishmania. Es una enfermedad compleja, con m¨¢s de una veintena de especies del protozoo distribuidas por el mundo causando distintos tipos de manifestaciones cl¨ªnicas. La que es end¨¦mica en Espa?a se llama Leishmania infantum, y eso ya nos da una pista de c¨®mo es.
P. ?Por qu¨¦?
R. Porque tuene ese nombre porque afectaba m¨¢s a los ni?os. Los adultos sanos no suelen tener demasiados problemas. Afecta m¨¢s ni?os y personas inmunodeprimidas. E hist¨®ricamente tambi¨¦n a los colectivos m¨¢s desfavorecidos y peor nutridos.
P. ?Y c¨®mo se manifiesta?
R. Produce dos cuadros, b¨¢sicamente. La leishmaniasis visceral es la m¨¢s grave: el par¨¢sito llega a los ¨®rganos internos, afecta al h¨ªgado, los ri?ones, la m¨¦dula ¨®sea... Produce fiebre y anemia y, si no es tratada adecuadamente, conlleva una elevada mortalidad. La segunda es la cut¨¢nea y se manifiesta solo en la piel, por lo que recibe menos atenci¨®n y muchas veces pasa desapercibida. Se produce un endurecimiento en la zona de la picadura que a veces evoluciona a una ¨²lcera. Se puede tratar sin ni siquiera saber la causa con sistemas como el bistur¨ª t¨¦rmico.
P. ?Ha habido fallecimientos?
R. No directamente atribuibles al brote. Aunque ha habido casos graves y un fallecimiento de una persona con un trasplante que ya ten¨ªa un estado de salud muy delicado.
P. ?Y qu¨¦ errores habr¨¢ que evitar en el futuro?
R. No precipitarse a la hora de dar por acabado el brote y no relajar las medidas de prevenci¨®n y control antes de tiempo. A los responsables de la Comunidad de Madrid les pasaba que llegaba el verano, dejaba de haber nuevos casos y dec¨ªan: ¡°Se ha acabado el brote¡±. Pero es que en junio es cuando se infecta la gente que ser¨¢ diagnosticada en diciembre, que es lo que tarda el par¨¢sito en provocar los cuadros graves. Hay que evitar que esto vuelva a pasar. No queremos ser alarmistas, pero hemos tenido el peor brote de Europa al lado de Madrid y esto puede volver a ocurrir en cualquier parte.
P. ?Seguro?
R. S¨ª, porque adem¨¢s el cambio clim¨¢tico juega en nuestra contra. El par¨¢sito ya es end¨¦mico en la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica y Baleares, y con las temperaturas m¨¢s altas, aumentan los meses de actividad de los fleb¨®tomos.
P. El estudio dice que el brote no puede darse por cerrado, pero hay datos que apoyan la idea de que est¨¢ controlado. ?Qu¨¦ significa eso?
R. Que no podemos descartar que se sigan produciendo casos o que incluso vuelvan a aumentar.
P. ?Qu¨¦ dicen los datos?
R. Antes del brote, ten¨ªamos unos 20 o 25 casos de leishmaniasis visceral. Ahora son unos 50 o 60, aunque esto es en toda la Comunidad de Madrid. En parte, estos n¨²meros pueden decir que ahora vigilamos mejor la enfermedad y contamos mejor los diagn¨®sticos. Pero el a?o pasado tuvimos cinco casos en el hospital de Fuenlabrada. Hay un goteo que todav¨ªa se pueden achacar al evento. En cierta manera podemos decir que el brote est¨¢ m¨¢s o menos controlado, pero que en la zona habr¨¢ una mayor transmisi¨®n de la enfermedad.
P. ?Tan complicado es acabar con el problema?
R. Es que es una enfermedad muy compleja. En la zona sigue habiendo conejos y liebres. Se puede controlar su poblaci¨®n, pero no los vas a eliminar. Y tambi¨¦n hay fleb¨®tomos. L¨®gicamente, no tiene sentido fumigar todo el parque, aunque s¨ª se pueden hacer acciones puntuales.
P. Los vecinos se han quejado siempre de falta de informaci¨®n y de c¨®mo se gestion¨® el problema.
R. Bueno, ya hemos dicho que es complejo. Adem¨¢s, es cierto que tambi¨¦n se tard¨® en tomar conciencia de la dimensi¨®n del problema. No se le dio mucha prioridad. Al final, la mejor pol¨ªtica son las medidas de control y prevenci¨®n. Reducir los espacios de riesgo, controlar las poblaciones de animales, informar a la ciudadan¨ªa...
P. Con tantos casos durante tantos a?os, se habr¨¢ aprendido mucho con este brote, ?no?
R. S¨ª. Hemos descubierto que conejos y liebres pueden actuar de reservorio del par¨¢sito y entendido bien las din¨¢micas de transmisi¨®n. Esto nos da informaci¨®n muy valiosa para prevenir brotes similares en otros espacios. Sobre los pacientes, hemos visto la elevada susceptibilidad de las personas inmunodeprimidas: tienen 100 veces m¨¢s posibilidad de desarrollar la forma visceral que una persona sana. Incluso con niveles de inmunidad no demasiado bajos. Y tambi¨¦n hemos mejorado el manejo cl¨ªnico de estos pacientes con todos estos a?os de seguimiento.
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