El contenedor inteligente que te recompensa por reciclar
La ciudad catalana de Sant Boi y Ecoembes colocan en sus calles 16 contenedores amarillos que identifican el tipo de residuo que se deposita dentro de ellos y al ciudadano que lo hace
Los vecinos de la localidad barcelonesa de Sant Boi de Llobregat, de 84.500 habitantes y conocida por ser el lugar de nacimiento de los hermanos y estrellas del baloncesto Pau y Marc Gasol, est¨¢n un paso m¨¢s cerca del futuro que el resto. Al menos, en cuanto a la gesti¨®n de sus residuos. Desde el 1 de octubre, disponen de unos contenedores amarillos capaces de reconocer el envase que se deposita en ellos y advertir al ciudadano si lo est¨¢ haciendo incorrectamente. Lo que les diferencia del resto de contenedores es un aro electr¨®nico ubicado en su apertura que recoge la informaci¨®n de los productos a trav¨¦s de sus c¨®digos de barras. Y puede tambi¨¦n procesar datos de h¨¢bitos (frecuencia de uso, tipo de residuos, barrio...) que ayuden a mejorar el proceso. Estos contenedores inteligentes formar¨¢n parte de la red de contenedores del proyecto Reciclos, el primer Sistema de Devoluci¨®n y Recompensa (SDR) impulsado en 2019 en Espa?a por Ecoembes que premia a los vecinos que reciclan con puntos virtuales (bautizados como reciclos), canjeables por participaciones en sorteos de productos, bonos de transporte p¨²blico o donaciones a proyectos colaborativos ambientales y sociales.
La experiencia de Sant Boi de Llobregat sirve de campo de pruebas para la posterior expansi¨®n de los contenedores por otras urbes espa?olas. ¡°Damos un paso m¨¢s en el camino hacia el reciclaje del futuro¡±, anunci¨® la alcaldesa de la localidad, Llu?sa Moret, durante la presentaci¨®n de la iniciativa ante los samboyanos. Sant Boi fue de las primeras ciudades en 2019 en acoger en sus calles el proyecto Reciclos.
Dise?ando el reciclaje del futuro
Jos¨¦ Luis Moreno, responsable de los proyectos de I+D+i de Ecoembes y l¨ªder del equipo que ha trabajado en el desarrollo del aro inteligente, explica que la base de todo es el sistema de comunicaci¨®n entre el contenedor y el usuario que se establece a trav¨¦s de la aplicaci¨®n web de Reciclos. ¡°Primero, con su tel¨¦fono m¨®vil, el usuario acude a uno de estos nuevos contenedores y se identifica escaneando un c¨®digo QR impreso en la superficie del cubo. A partir de ah¨ª, va introduciendo envases [en el compartimento que hay dentro] y el dispositivo los va reconociendo a trav¨¦s de una serie de sensores ¨®pticos que registran sus c¨®digos de barras¡±, explica Moreno. Si el aro se ilumina de color rojo, significa que el usuario est¨¢ introduciendo un envase incorrecto y el sistema no dejar¨¢ que el residuo caiga al cubo. Si se enciende en verde, tras uno segundos, la operaci¨®n finaliza y el envase cae al contenedor. ¡°Esos datos se suben a una nube: este ciudadano ha reciclado tres botellas y le damos tres reciclos¡±, a?ade Moreno.
Unas 24 horas despu¨¦s de que el ciudadano haya utilizado el aro tecnol¨®gico, recibir¨¢ los puntos y podr¨¢ gastarlos. En Sant Boi, por ejemplo, los vecinos pueden canjearlos por donaciones a la Asociaci¨®n Tots som Santboians, dedicada a ayudar a personas con discapacidad y que utilizar¨¢ esas ayudas para poner en marcha una iniciativa para preservar espacios verdes en la zona.
La informaci¨®n del c¨®digo de barras mejora la trazabilidad del envase. Los datos relevantes que puede recoger la aplicaci¨®n, como la localizaci¨®n del contenedor o la frecuencia con la que el ciudadano recicla, permitir¨¢n, apunta Moreno, tener informaci¨®n de qu¨¦ o cu¨¢ndo recicla un barrio y si se hace correctamente.
¡°Las cosas que estamos incorporando est¨¢n siendo revolucionarias, sobre todo en temas de inteligencia artificial, blockchain y tokerizaci¨®n [sistemas compartidos de control de la informaci¨®n en la red]. Es [en todos estos ¨¢mbitos] donde daremos saltos cualitativos bastante potentes a lo largo de los pr¨®ximos a?os¡±, afirma Moreno. A largo plazo, las actualizaciones de este contenedor inteligente ir¨¢n encaminadas a perfeccionar su interacci¨®n con la ciudadan¨ªa: ¡°Ahora indica si es correcto o no arrojar un determinado envase dentro de ¨¦l. En el futuro te dir¨¢ d¨®nde debe ir ese residuo y d¨®nde no. Tenemos muchas tecnolog¨ªas que se pueden integrar en ese cometido¡±.
En esa l¨ªnea, ?scar Mart¨ªn, consejero delegado de Ecoembes, destaca que la instalaci¨®n de las calles de estos dispositivos es una forma segura de fomentar la econom¨ªa circular. ¡°Con el contenedor amarillo inteligente revolucionamos tecnol¨®gicamente el actual sistema de reciclaje por recompensa, dando un salto que nos permite afrontar los nuevos desaf¨ªos y objetivos legislativos marcados desde Espa?a¡±, remarca.
Asentar el h¨¢bito del reciclaje
El sistema de recompensa plan Reciclos desarrollado por el centro de innovaci¨®n abierta The Circular Lab de Ecoembes ya hab¨ªa instalado en 45 localidades una primera generaci¨®n de estos contenedores con QR. En estos, el usuario escanea el c¨®digo de barras de los envases con su m¨®vil y, despu¨¦s de tirarlos al contenedor amarillo, debe escanear el c¨®digo QR que hay en los cubos, todo desde la webapp del proyecto. Los datos, despu¨¦s de casi dos a?os de vida, son positivos. Por ejemplo, Vigo, unas de las ¨²ltimas ciudades en sumarse este verano, ha conseguido en varios meses casi 6.500 usuarios registrados.
Para fomentar la separaci¨®n de los envases fuera del entorno dom¨¦stico, Ecoembes ha instalado 40 m¨¢quinas de reciclaje en estaciones de transporte, hospitales y centros comerciales y de ocio de los municipios que participan en esta iniciativa. En este caso, el proceso es distinto: los usuarios deben introducir de uno en uno sus recipientes vac¨ªos, esperar cinco segundos y, para finalizar, escanear con su m¨®vil en c¨®digo QR que le aparecer¨¢ en la pantalla. Aunque cada localidad decide cu¨¢les son las recompensas canjeables en su municipio, de forma general se agrupan en cuatro bloques: donaciones a proyectos colaborativos ambientales y sociales; bonos para el transporte p¨²blico; participaciones para ganar productos locales de proximidad (vinos ecol¨®gicos, verduras, comidas en restaurantes, cosm¨¦ticos), art¨ªculos sostenibles a trav¨¦s de sorteos (patinetes el¨¦ctricos, cubos de basura para reciclar, kit para construir un huerto casero...).
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