Cambia tu relaci¨®n con... El espacio del cubo amarillo
?Es posible meter 50 latas de bebida en un cubo de basura peque?o? S¨ª, con unos sencillos trucos los envases se pueden reducir y ganar hasta cuatro veces m¨¢s espacio. Te explicamos c¨®mo
?Cu¨¢ntas latas aplastadas caben en un cubo de basura de 10 litros? En este experimento dom¨¦stico verificamos el espacio que se puede ganar si plegamos los envases correctamente. Hacemos la prueba con latas de bebidas de 33 centilitros, briks de un litro y botellas de agua de medio litro, productos habituales en cualquier hogar u oficina. Los resultados pueden variar ligeramente en funci¨®n de la forma de los briks, el contorno del cubo o la colocaci¨®n de los envases en el interior. Estos c¨¢lculos, por tanto, son aproximados. Spoiler: te ahorarr¨¢s unos cuantos viajes al contenedor de la calle. Tan solo tienes que seguir estos pasos.
Lata de bebida
Una lata de bebidas llena y cerrada aguanta 90 kilos de peso en vertical, pero al mismo tiempo se aplasta con facilidad cuando est¨¢ vac¨ªa para ocupar menos espacio en el cubo amarillo. Este envase ha ido evolucionando con el tiempo. Cuando se invent¨® en 1935 en Newark (Nueva Jersey, EE UU), se abr¨ªa con un abrelatas. Desde los a?os ochenta la anilla permanece sujeta al abrirla, lo que impide que se extrav¨ªe y no se recicle.
La mayor¨ªa de las existentes en el mercado se fabrican en aluminio y pesan entre 12 y 13 gramos. Antes lo habitual era que fueran de acero y pesaban 22 gramos. El grosor es de 0,1 mil¨ªmetros. El ecodise?o ha conseguido que se reduzca el peso pero no las cualidades. Esta disminuci¨®n de peso redunda en menor contaminaci¨®n, pues caben m¨¢s latas en el mismo veh¨ªculo que las transporta. Para fabricar una lata a partir del aluminio obtenido del proceso de reciclaje se consume un 95% menos de energ¨ªa que cuando se produjo un envase igual por primera vez.
Primer paso. Apretar los lados de la lata haciendo una pinza para facilitar su prensado con el pie.
Segundo paso. Posar la lata en el suelo con la apertura bocabajo.
Tercer paso. Aplastarla con el pie de un golpe seco. No se requiere demasiada fuerza.
Si se aplasta, ocupa una tercera parte de espacio. No solo supone una ganancia de espacio en el cubo, sino que caben m¨¢s residuos en el cami¨®n, por lo que mejora la eficiencia de los viajes a la planta de selecci¨®n. Conviene aplastarla sin ejercer mucha fuerza para que no salga despedida. Se trata m¨¢s de dar un golpe certero. No es necesario eliminar la anilla, al contrario; tambi¨¦n se recicla. Por tanto, ?cu¨¢ntas latas caben en un cubo de 10 litros sin doblar y dobladas?
Botella de pl¨¢stico
Tereftalato de polietileno, tambi¨¦n conocido como PET, es el material con el que se fabrican las llamadas botellas de pl¨¢stico de agua o refrescos. Es un compuesto fuerte, flexible y reciclable. Para que vuelva al mercado convertido en una nueva botella, ropa o incluso gafas de sol basta con depositarlo en el contenedor amarillo. Para contrarrestar la ¨²ltima excusa de los que se oponen a reciclar, es decir, que no cuentan con espacio en casa, memorice estos pasos y el argumento ser¨¢ imbatible.
Primer paso. Retirar el tap¨®n y guardar.
Segundo paso. Aprovechar las ranuras que recorren el envase para retorcer la botella ligeramente.
Tercer paso. Ejercer una presi¨®n desde la abertura de la botella hacia abajo. Una vez aplastada, poner el tap¨®n para que no entre aire y se vuelva a desplegar.
Existen en el mercado unas m¨¢quinas de accionamiento mec¨¢nico para aplastar las latas de bebidas y las botellas de pl¨¢stico. Estos dos envases pueden estrujarse sin embargo con el pie o la mano de forma sencilla. Las botellas de PET ocupan una cuarta parte si se aplastan, un espacio valioso si se cuenta con cuatro cubos de reducido tama?o para que quepan todos debajo del fregadero. Algunos envases no cuentan con las rayas que facilitan la torsi¨®n y el aplastado, pero eso no impide que se pueda reducir su volumen apretando un poco m¨¢s fuerte. Incluso las garrafas de cinco u ocho litros presentes en zonas donde apenas se consume el agua del grifo se pueden reducir para ganar algo de espacio. El resultado es sorprendente: en un cubo de 10 litros, caben 4 veces m¨¢s botellas de pl¨¢stico dobladas que sin doblar.
Brik
Desarrollado en los a?os cincuenta por TetraPak, una compa?¨ªa sueca, el brik revolucion¨® el sector del envasado. Este producto, que siempre ha de tirarse al cubo amarillo, contiene alimentos habituales en cualquier despensa, como leche, zumos, cremas, caldos o pur¨¦. Est¨¢ compuesto por tres materiales (75% papel, 20% pl¨¢stico y 5% aluminio) que pueden reciclarse por separado: por ejemplo, el papel dar¨¢ lugar a bolsas de cart¨®n y el pl¨¢stico tiene usos en la industria del combustible.
Primer paso. Tras quitarle el tap¨®n al brik, debes desdoblar las solapas superiores e inferiores, de tal manera que esos ¡®picos¡¯ queden hacia afuera.
Segundo paso. Aplana el brik y enrr¨®llalo poco a poco formando una especie de tubo.
Tercer paso. Ponle el tap¨®n para que mantenga la forma.
En el cubo, sin plegar, caben entre seis y ocho briks de un litro. Y a primera vista, este paralelep¨ªpedo con leng¨¹etas arriba y abajo parece resistente a cualquier intento de reducci¨®n. Pero la operaci¨®n es sencilla y el material se dobla con facilidad. Despu¨¦s, seg¨²n c¨®mo los coloques en el cubo y cu¨¢nto los aprietes, pueden caber de 25 a 35.
Doblar siempre las cajas de cart¨®n
Zapatos, vino, aparatos electrónicos... Con el auge del comercio online, cada vez es más común recibir artículos en cajas de cartón. En general, todo el mundo tiene claro que estas cajas, así como cualquier envase de papel o cartón, tienen que reciclarse en el cubo azul. Lo que no está tan claro es la manera correcta de depositarlas. Lo suyo es practicar el reboxing, esto es, una técnica acuñada por Ecoembes para doblarlas y reducirlas a la mínima expresión. De esta forma, el contenedor puede alojar muchos más envases, además de que se evita la acumulación en el exterior de las cajas que no caben por la ranura.