Salen los n¨²meros en la econom¨ªa circular. Las empresas cierran un pacto con el planeta

La econom¨ªa circular genera negocio, y eso es bueno. El modelo productivo basado en mantener el valor de los recursos el mayor tiempo posible genera oportunidades de negocio y crea empleo, en cantidad y de calidad. El 2,06% de los empleos en Espa?a est¨¢n relacionados ya con la econom¨ªa circular, un dato que coloca al pa¨ªs por encima de la media europea, que es del 1,76%, seg¨²n las cifras m¨¢s recientes de Eurostat, de 2019.

El camino marcado por la Fundaci¨®n Ellen MacArthur, referente mundial en esta materia, se est¨¢ cumpliendo. Esta organizaci¨®n creada para favorecer la transici¨®n a un modelo productivo sostenible se?al¨® en su ¨²ltimo estudio, publicado hace tres a?os, que las energ¨ªas renovables pueden contribuir a la reducci¨®n del 55% de las emisiones de gases de efecto invernadero, con arreglo a los objetivos clim¨¢ticos de la ONU. Pero para conseguir el 45% restante citaba el papel de la econom¨ªa circular.

El modelo que aprovecha los residuos, alarga la vida a los productos y reduce el consumo de materias primas no les resulta ajeno a casi la mitad de las empresas espa?olas. Seg¨²n un informe de Pacto Mundial, una iniciativa de la ONU, el 43% ha impulsado procesos de econom¨ªa circular. Un estudio de alcance regional, impulsado por la Asociaci¨®n de Dise?adores de la Comunitat Valenciana dentro del proyecto EnCircular, afirma que se manifiesta de forma expl¨ªcita en la estrategia del 67,8% de las empresas. Una cifra que alcanza el 84,7% en las m¨¢s grandes, las que tienen 100 o m¨¢s empleados.

Esta forma de producir no solo contribuye a salvar el planeta sino que se revela como una pr¨¢ctica rentable. Lo resume de forma tajante Maite Ardevol, l¨ªder del equipo de Econom¨ªa Circular de Acci¨®, la agencia p¨²blica para la competitividad de la empresa catalana: ¡°La econom¨ªa circular tiene que ser un negocio o no ser¨¢¡±. Y a?ade esta responsable que ha visto c¨®mo la facturaci¨®n agregada de empresas con este modelo productivo se ha triplicado en los ¨²ltimos cinco a?os en Catalu?a: ¡°No solo se trata de mantener los recursos por m¨¢s tiempo, sino que la oportunidad de negocio radica en aumentar su valor despu¨¦s de un ciclo de uso¡±. Y a?ade: ¡°Si nos centramos solo en el reciclaje, la econom¨ªa circular se queda corta¡±.

La innovaci¨®n y la tecnolog¨ªa crean valor a?adido

La empresa Perseo Biotechnology ha desarrollado una tecnolog¨ªa para transformar residuos urbanos como los restos de comida, el papel, los pa?ales o las toallitas en bioetanol. Sus procesos no solo permiten reciclar un desecho, sino convertirlo en una materia prima con la que obtener bioqu¨ªmicos o biopl¨¢sticos m¨¢s sostenibles, as¨ª como biocombustibles avanzados. Perseo est¨¢ investigando para que cada vez m¨¢s residuos org¨¢nicos puedan utilizarse para fabricar estos biocombustibles, que reducen sus emisiones hasta un 90% y ser¨¢n clave para descarbonizar el transporte, en especial aquellos sectores en los que se deben cubrir grandes distancias.

Esta empresa de diez trabajadores, que cuenta con Repsol entre sus accionistas, ha desarrollado un proceso patentado cuya tecnolog¨ªa puede ser instalada en industrias que cuenten con un residuo asimilable a los desechos urbanos de procedencia org¨¢nica. Puede ser una cadena de hoteles que genera restos de comida, una papelera que no est¨¢ sacando partido a sus desechos con un reciclaje complicado o una empresa de zumo que quiera sacar partido a las c¨¢scaras de los c¨ªtricos. Es una evoluci¨®n. M¨¢s all¨¢ de gestionar el residuo de forma correcta ¡ªde tirarlo al contenedor marr¨®n para su transformaci¨®n en abono o al azul para generar papel reciclado¡ª, se trata de convertirlo en una materia prima de gran valor.

Un efecto multiplicador

Del mismo modo que Perseo contribuye a expandir la econom¨ªa circular a otras empresas, existen consultoras especializadas que dise?an estrategias para el cambio. SEN Innova naci¨® hace cuatro a?os en Alicante. La forman cuatro empleados y una red de colaboradores. Trabajan con instituciones tecnol¨®gicas, la universidad y pymes de la zona de sectores del pl¨¢stico, la construcci¨®n y la moda. Han asesorado a f¨¢bricas de calzado de Elda y Elche para que los residuos de cuero que genera una le puedan servir a otra como materia prima. Claudio Sonsini, el director de operaciones de la consultora, apunta al ecodise?o. ¡°Algunas empresas aceptan zapatos viejos de su marca. Se tienen que haber dise?ado para que se puedan separar sus componentes y volver a utilizarse¡±, explica.

Ardevol se?ala la importancia del proceso de descomposici¨®n o deconstrucci¨®n de piezas o elementos para que se vuelvan a utilizar. ¡°Hay que ser capaces de emplear la misma energ¨ªa y automatizar los procesos de desmontaje, del proceso inverso a montar¡±. En esa tarea se afana el Centro Europeo de Reciclaje Fotovoltaico (Cerfo), una empresa que acaba de crearse en Andorra (Teruel) con el impulso de Arag¨®n Circular, una oficina dependiente del departamento de Econom¨ªa, Planificaci¨®n y Empleo del Gobierno de Arag¨®n que naci¨® en enero de 2020, meses antes de que se aprobara la estrategia nacional Espa?a Circular 2030.

Cerfo lleva un a?o investigando para obtener el cobre, el aluminio, el vidrio y el silicio presente en los paneles solares que han terminado su vida ¨²til, fijada en entre 20 y 30 a?os, o aquellos que se rompen en la fabricaci¨®n o al instalarse. Hasta el momento han logrado convertir en materia prima el 97% de las placas fotovoltaicas. Jes¨²s Alijarde es el director general de Ibersyd, una consultora de sostenibilidad a la que pertenece Cerfo. Este economista cifra entre un 0,5% y un 1% las placas solares que se deterioran en el montaje o en la f¨¢brica. ¡°Muy pocos paneles han llegado al final de su ciclo de vida todav¨ªa. Pero se est¨¢n instalando muchos que en alg¨²n momento habr¨¢ que tratar como residuos¡±, asegura. De esta forma se deja de depender de terceros pa¨ªses para la obtenci¨®n del aluminio, el silicio o el cobre¡±.

Miguel Luis Lape?a, responsable de la estrategia Arag¨®n Circular, equipara la econom¨ªa circular a sectores estrat¨¦gicos en la econom¨ªa nacional como la automoci¨®n, el comercio, el turismo o la log¨ªstica. Lape?a recurre a una met¨¢fora para explicar la transformaci¨®n de cada vez m¨¢s empresas. ¡°Los que no adopten la circularidad ir¨¢n saliendo de la autopista hasta quedarse parados en el arc¨¦n¡±. Lape?a apunta al consumidor como otro agente importante del proceso, ya que se fija en la etiqueta de los productos que compra y valora el ecodise?o. La oficina que dirige Lape?a ha creado el sello Arag¨®n Circular, que distingue por dos a?os a empresas con buenas pr¨¢cticas. Un centenar de ellas ha realizado los tr¨¢mites para obtenerlo. Saben que hay dinero en juego, y empleo y m¨¢s innovaci¨®n. Crecimiento.