Cuando un campo de f¨²tbol se convierte en uno de refugiados
Una exposici¨®n fotogr¨¢fica organizada por la Fundaci¨®n del FC Barcelona y Acnur muestra el d¨ªa a d¨ªa de los 21.000 desplazados que, a causa de la Guerra Civil, se refugiaron en el estadio ol¨ªmpico de Montju?c entre 1936 y 1937. Convirtieron el recinto en un hogar en el que com¨ªan, dorm¨ªan o los ni?os iban a la escuela
Las bufandas dejaron paso a las mantas en el Lviv Arena, el estadio de f¨²tbol de la ciudad de Le¨®polis, al oeste de Ucrania, cuando se convirti¨® en el refugio de 2.500 desplazados ucranios que huyeron de la guerra en marzo de 2022, al poco de que Rusia invadiera parte de su pa¨ªs. Una situaci¨®n similar pero m¨¢s desconocida se dio en Espa?a 86 a?os antes. El estadio de Montju?c, casa esta temporada del FC Barcelona por las obras del Camp Nou, acogi¨® a 21.000 desplazados de la Guerra Civil entre el oto?o de 1936 y la primavera de 1937. Una exposici¨®n fotogr¨¢fica, un proyecto de Factor¨ªa Belgrado, recuerda ahora la transformaci¨®n de este recinto ol¨ªmpico en una ciudad temporal con todos sus servicios b¨¢sicos. La exposici¨®n Bar?a, m¨¦s que un club. Montju?c, estadi refugi (Bar?a, m¨¢s que un club. Montju?c, estadio refugio), visitable gratuitamente en la Bar?a Store & Exhibition Sagrada Fam¨ªlia (calle de Mallorca, 406), muestra a ni?os en improvisadas aulas en el c¨¦sped o a sus padres en el desempe?o de actividades cotidianas como tender la ropa, reparar un zapato o recibir atenci¨®n sanitaria en lugares como las gradas, las balaustradas o el campo de juego.
Montju?c, centro de desplazados
A partir del oto?o de 1936, el campo ol¨ªmpico del estadio de Montju?c (Barcelona) se transform¨® en una ciudad temporal, donde sus nuevos habitantes que hu¨ªan de la Guerra Civil en sus regiones dorm¨ªan, asist¨ªan a clases, hac¨ªan deporte o com¨ªan.
21.000 desplazados llegados de todas partes de Espa?a se refugiaron en el estadio de Montju?c a los pocos meses del inicio de la Guerra Civil. Fotos: GIANLUCA BATTISTA
Las mujeres destinaron las gradas del estadio para tender la ropa. Los ni?os lo utilizaban como otro lugar donde jugar.
Los cocineros preparaban sopa y carne con verduras hasta que el avance de la guerra hizo que escasearan las provisiones.
Ni?os en una zona amplia del estadio habilitada como comedor.
El terreno de juego acoge una clase de gimnasia (izquierda), una maestra se dirige a un grupo de ni?os en un aula habilitada (derecha, arriba) y una mujer con dos ni?os atraviesa el comedor instalado en el vest¨ªbulo de Montju?c (derecha, abajo).
Un hombre repara un zapato sobre una barandilla, con las gradas del estadio al fondo.
La exposici¨®n se encuadra dentro del acuerdo que Acnur, Agencia de la ONU para los Refugiados, tiene con la Fundaci¨®n FC Barcelona y el FC Barcelona para acercar la causa de las personas refugiadas a los aficionados al f¨²tbol de todo el mundo, mientras que los proyectos que apoya la Fundaci¨®n FC Barcelona est¨¢n orientados a ofrecer a los ni?os y a los j¨®venes refugiados oportunidades para desarrollar las habilidades esenciales necesarias que les permitan alcanzar su pleno potencial. Desde 2022, los primeros equipos del FC Barcelona (masculino, femenino y genuine) llevan en su camiseta el logotipo de ACNUR/UNHCR para dar a conocer la realidad de los 114 millones de desplazados forzosos que existen en el mundo. La exposici¨®n cuenta con im¨¢genes en blanco y negro, en su mayor¨ªa de la fot¨®grafa polaca Margaret Michaelis, pero tambi¨¦n de otros fot¨®grafos como David Seymour Chim, Antoni Campa?¨¤ y Agust¨ª Centelles.
Su inauguraci¨®n ocurri¨® en un d¨ªa simb¨®lico: el 25 de octubre, con motivo del encuentro de Champions League que enfrent¨® al FC Barcelona con el Shakhtar Donetsk en Montju?c (2-1). El Shakhtar, un equipo ucranio, tuvo que abandonar su ciudad tras la invasi¨®n parcial de Donetsk por Rusia en 2014, en la que ya se conoce como la guerra del Donb¨¢s, y jug¨® sus partidos como equipo local hasta 2016 en el Lviv Arena, en Le¨®polis, muy lejos del frente de batalla. Hoy, y despu¨¦s de que la invasi¨®n rusa pasara a una escala mayor a partir de febrero de 2022 y derivara en la guerra que vive Ucrania actualmente, el Lviv Arena ha corrido la misma suerte que, hace tantos a?os, corri¨® el estadio de Montju?c, gracias al apoyo del Shakhtar.
C¨®mo se vive en un estadio de f¨²tbol
El actor mexicano Alfonso Poncho Herrera, Embajador de Buena Voluntad de Acnur desde 2020, visit¨® el Lviv Arena al poco de llegar los desplazados ucranios. Contesta a un cuestionario por escrito: ¡°Fue desconcertante ver que ese monstruo verde, que normalmente est¨¢ lleno de j¨²bilo y alegr¨ªa, ahora acog¨ªa familias enteras que hu¨ªan del este de Ucrania¡±, rememora. ¡°Lo que m¨¢s me impact¨® fue ver a los ni?os que tuvieron que dejar a sus padres atr¨¢s¡±, a?ade el actor, de 40 a?os.
La liga ucrania continu¨® su curso en 2022 y algunos refugiados, cuenta Herrera, ve¨ªan a los dos equipos locales, el FC Lviv y el Rukh Lviv, jugar en el estadio, en lo que era su refugio temporal. ¡°Era un privilegio para los m¨¢s fan¨¢ticos, pero al mismo tiempo a?oraban poder volver a casa y tener una vida normal¡±, abunda Herrera, seguidor del FC Barcelona, donde jug¨® siete temporadas el mexicano Rafael M¨¢rquez, su futbolista preferido. Los all¨ª alojados, provenientes de otras partes del pa¨ªs, se convirtieron en una suerte de afici¨®n visitante pero tratados como si fueran el socio n¨²mero uno de alguno de los clubes locales.
El estadio de Montju?c, cuyo nombre oficial desde 2001 es el Ol¨ªmpico Llu¨ªs Companys, se construy¨® en 1929 y, tras el londinense de Wembley, era el m¨¢s grande de Europa cuando se inaugur¨®. Tras acoger Barcelona la Exposici¨®n Internacional de 1929, la ciudad estaba muy bien posicionada para albergar los Juegos Ol¨ªmpicos de 1936, cuya ceremonia de inauguraci¨®n tendr¨ªa lugar, precisamente, en Montju?c. Pero finalmente Alemania y el nazismo lograron imponerse y los JJ OO se celebraron en Berl¨ªn. En contraposici¨®n a este evento deportivo, Montju?c iba a acoger la Olimpiada Popular, del 19 al 26 de julio de 1936. El levantamiento militar de un d¨ªa antes lo impidi¨®. Hubo que esperar hasta 1992 para ver unos Juegos Ol¨ªmpicos celebrados en ese estadio.
Los beneficios del deporte entre los refugiados
Stephen Reynard es oficial de coordinaci¨®n de proyectos de deporte de Acnur. Asegura que el deporte proporciona a los refugiados algo de normalidad tras tener una vida con muchos cambios. ¡°Les ayuda a conectar con otros refugiados y con la comunidad que los acoge¡±, explica. ¡°Tambi¨¦n les sirve para trabajar el sentido de pertenencia a un lugar y mejorar las relaciones sociales, en especial antes y despu¨¦s de la pr¨¢ctica del deporte¡±, abunda.
Algunos de los desplazados que se ven obligados a abandonar su tierra sufren estr¨¦s postraum¨¢tico. Los m¨¦dicos prescriben la pr¨¢ctica de deporte, afirma Reynard, ¡°porque los s¨ªntomas de ese estr¨¦s se reducen a trav¨¦s de una esperanza renovada y sentido de determinaci¨®n, una mejora en la calidad de vida y de la autoestima¡±. En los lugares donde se reasientan, el deporte les sirve para liberar las frustraciones acumuladas y expresar emociones para enfrentarse a la victoria y la derrota junto con compa?eros de equipo.
La Fundaci¨®n FC Barcelona ha participado en cuatro proyectos en sendos continentes con la donaci¨®n de fondos y material deportivo, y con su metodolog¨ªa SportNet, que se sirve de la actividad f¨ªsica como herramienta de integraci¨®n social de colectivos vulnerables. Reynard se?ala los exitosos casos de los campos de refugiados de Nakivale y Oruchinga, en Uganda. El 96% de los j¨®venes que participaron afirma que han mejorado las relaciones con otros refugiados y con la comunidad que los acoge.