Detecci¨®n precoz y prueba r¨¢pida: c¨®mo romper la cadena de infecci¨®n del VIH

Cuando hablamos de una enfermedad cr¨®nica tendemos a pensar que es el resultado de una suma de infortunios, de un proceso en el que intervienen desde nuestros genes a nuestros h¨¢bitos de vida. Lo vemos as¨ª en la diabetes, el c¨¢ncer, la hipertensi¨®n y en tantas otras. Pero la infecci¨®n por VIH es diferente: en ella hay un antes y un despu¨¦s, un comienzo claro ¨Cla entrada del virus en el organismo¨C a partir del cual se inicia un camino sin retorno. Porque, aun cuando hoy disponemos de medicamentos antirretrovirales capaces de mantener la carga viral indetectable, la cicatriz que el virus deja en los primeros d¨ªas de la infecci¨®n seguir¨¢ presente de por vida.

Estos primeros d¨ªas tras la infecci¨®n, a los que tradicionalmente no se les ha prestado atenci¨®n, hoy se sabe que tienen una importancia capital. Es una fase que se conoce como infecci¨®n aguda ¨Ct¨¦cnicamente, primoinfecci¨®n¨C y su trascendencia est¨¢ motivando que se intente detectar el virus ya desde esos momentos iniciales para comenzar cuanto antes el tratamiento. En la respuesta del cuerpo a la infecci¨®n est¨¢ la respuesta.

El beneficio comunitario

¡°Detectar cuanto antes una infecci¨®n es crucial. Nosotros no podemos curar el VIH, pero s¨ª controlarlo. Por tanto, cuanto antes sepamos que una persona tiene VIH, antes podremos comenzar el tratamiento, lo que permitir¨¢ preservar el sistema inmunol¨®gico y, con este, la salud y la esperanza de vida¡±. Lo explica Michael Meulbroek, presidente de la ONG Projecte dels Noms-Hispanosida y fundador de BCN CheckPoint, un centro comunitario en Barcelona en el que una de las prioridades es conseguir adelantar el momento de la detecci¨®n del virus.

Siguen as¨ª la recomendaci¨®n de Onusida, organismo que aconseja detectar cuanto antes si una persona se ha infectado con el VIH y destaca los beneficios de conocer el estado serol¨®gico. ¡°Si se diagnostica r¨¢pido y se inicia un tratamiento antirretroviral, menos da?o se habr¨¢ hecho al organismo y mejor ser¨¢ el pron¨®stico a largo plazo¡±, explica el doctor Juan Ambrosioni, especialista en la unidad VIH-Sida y del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Cl¨ªnic (Barcelona).

Pero los beneficios de la detecci¨®n precoz no son solo para la salud del paciente, sino para la comunidad, a?ade el especialista: ¡°En la infecci¨®n aguda, las personas suelen tener la carga viral muy alta y ser muy contagiosos sin siquiera saber que est¨¢n infectados. Son una fuente muy importante de transmisi¨®n, e identificarlos puede ayudar a romper esa cadena¡±.

La opacidad del periodo ventana y la prueba r¨¢pida

Podr¨ªamos pensar que no debe de ser tan dif¨ªcil esa identificaci¨®n: bastar¨ªa con hacerse una prueba tras una exposici¨®n de riesgo, y asunto concluido. Pero el VIH, complejo donde los haya, no lo pone sencillo: hay un periodo ventana, que dura en torno a un mes, en el que las pruebas habituales no son capaces de detectar anticuerpos espec¨ªficos frente al VIH. En ese tiempo, contin¨²a el doctor Ambrosioni, ¡°es posible que la persona infectada d¨¦ un resultado negativo. Se dan todas las circunstancias en contra para que pueda seguir transmitiendo a otras personas la infecci¨®n: la carga viral elevad¨ªsima y el desconocimiento de la infecci¨®n¡±.

De ah¨ª la importancia de que el tiempo de ese periodo ventana, que hasta hace unos a?os llegaba a los tres meses, con las nuevas t¨¦cnicas de detecci¨®n se haya acortado a unas pocas semanas. ¡°Pero es necesario que las personas en riesgo sean conscientes de la necesidad de hacerse estas pruebas¡±, insiste Michael Meulbroek. ¡°En BCN Checkpoint hemos estimulado a hacerlas con m¨¢s regularidad y comenzar el tratamiento m¨¢s r¨¢pidamente. El resultado es que, entre 2017 y 2019, se ha reducido la incidencia en nuestra comunidad en un 60%¡±.

En esta ONG, centrada en la comunidad gay y transexual porque, como explica Meulbroek, ¡°es la que concentra mayor n¨²mero de infecciones¡±, cuentan con recursos para ofrecer no solo las pruebas m¨¢s r¨¢pidas y avanzadas, sino tambi¨¦n para dar soporte psicol¨®gico y emocional a quienes reciben el impacto de un diagn¨®stico positivo: ¡°Es un momento muy dif¨ªcil, la persona necesita estar arropada, compartir con quienes han estado en esa misma situaci¨®n. Es una p¨¦rdida y requiere su duelo¡±.

Con los pies en la tierra, la mayor¨ªa de los centros en los que se puede realizar esta prueba de forma gratuita (se puede consultar el listado en la p¨¢gina web del Ministerio de Sanidad y en la de Cesida) no disponen de los mismos medios y, de hecho, en muchos centros de salud no se cuenta con la opci¨®n de poder realizar una prueba PCR, sino tests est¨¢ndares. ¡°Pero hoy es realmente c¨®modo, r¨¢pido y gratuito poder saber si tienes VIH¡±, explica el doctor Ambrosioni. ¡°Eso s¨ª, estas pruebas r¨¢pidas son un primer m¨¦todo de cribaje: despu¨¦s, hay que confirmarlo mediante una prueba de laboratorio¡±.

Mejor pruebas regulares, no puntuales

Con toda esta informaci¨®n sobre la mesa, hay una pregunta inevitable: ?cada cu¨¢nto habr¨ªa que hacerse la prueba? No hay una respuesta ¨²nica. ¡°En caso de sospecha de infecci¨®n muy reciente, lo ideal es consultar¡±, recomienda el especialista del Cl¨ªnic. ¡°Y, aunque el test d¨¦ negativo, hay que hacer un seguimiento, reforzar las medidas de prevenci¨®n y repetir unos d¨ªas despu¨¦s¡±.

Para la vida cotidiana, especialmente en el caso de hombres que tienen sexo con hombres (HSH), Meulbroek aconseja: ¡°Tiene que haber un cambio de paradigma: no se trata de hacerse la prueba porque se ha tenido una relaci¨®n de riesgo, sino con regularidad, como parte de mi control normal¡±. Y a?ade: ¡°Si tengo muchas relaciones sexuales, o con muchas personas, estar¨ªa bien hacerse la prueba cada tres meses; de esa manera, la infecci¨®n siempre ser¨ªa reciente, intervienes con rapidez y proteges tu salud y la de tu comunidad¡±.

Pero el mensaje debe llegar al resto de la poblaci¨®n, se?ala el doctor Ambrosioni: ¡°El colectivo HSH est¨¢ muy al corriente; en cambio, en poblaci¨®n heterosexual de hombres y mujeres no hay esa misma percepci¨®n del riesgo y no se hacen la prueba porque ni siquiera contemplan la posibilidad. Por eso a menudo se diagnostica de forma tard¨ªa¡±.